Se cumplieron doce años del asesinato y la desaparición forzada de Daniel Solano a manos de la policía de Río Negro. En 2011, llegado desde Salta y a los 27 años, mientras trabajaba en la multinacional Expofrut tercerizado por la empresa Agro Cosecha, organizó un reclamo salarial contra una estafa en la localidad de Lamarque, donde trabajaba y pernoctaba en su estadía como trabajador golondrina. Aunque la lucha logró condena a perpetua y cárcel para los siete policías, falta llevar al banquillo a empresarios de la fruta y de la noche, y a la Justicia, políticos y sindicalistas cómplices.

Río Negro y los 40 años de democracia: desapariciones, asesinatos y femicidios

Fue en el debate de candidatos a gobernador por la provincia en el canal 6 de Bariloche, en mayo de este mismo año, que Gabriel Musa, candidato a gobernador por el FIT-U, hizo la denuncia ante los demás candidatos. Enumeró una serie de casos que se mantienen en la impunidad. El candidato le replicó a Alberto Weretilneck, futuro gobernador y en ejercicio al momento de la desaparición de Daniel, sus propias palabras en una entrevista alrededor del caso: “El pueblo no va a soportar ningún desaparecido mas”. Dicho esto, hoy también buscamos a Esteban Machuca (2017), trabajador rural de General Godoy, del cual hace pocos días se cumplieron seis años de su desaparición.

Debemos sumar la tortura seguida de muerte de Jorge Gática (2023) en la comisaria 45 de Cipolletti a manos de cinco policías, o el asesinato de Elías Garay (2022) en Cuesta del Ternero.

También aumentaron los casos de femicidio. Ya van 17 años sin Otoño Uriarte (2006), secuestrada por una red de trata de personas para explotación sexual en el valle rionegrino donde está involucrada la policía, empresarios, políticos, etc. En noviembre empieza el juicio por el femicidio de Agustina (2021) en Cipolletti. A 40 años de democracia, los casos de femicidio en Río Negro superan la media nacional.

Debemos sumar el juicio que se desarrolla por el asesinato a manos de cinco albatros en Villa Mascardi de Rafael Nahuel (2018), el joven trabajador mapuche de la Lof Lafken Wilkul Mapu.

Puede casi afirmarse que, desde el regreso de la democracia, en la provincia prima un patrón: la impunidad, la protección y la connivencia política judicial en desapariciones, asesinatos, femicidios. Parte de ese patrón es la participación del propio Estado en esto.

Banderas de lucha

Los casos mencionados se han vuelto lugares de resistencia y banderas impostergables, que es lo otro que puede afirmarse. Viene de organizarse una marcha en Fernández Oro que exigió justicia por Otoño, luego de que este sábado en el acampe de Choele Choel se realizara una jornada por Daniel Solano. Carmen, la madre de Jorge, convocó una jornada para el 22 de noviembre en Cipolletti, día en el que una audiencia dejará clara la acusación contra los cinco policías que torturaron y asesinaron a su hijo. Ese mismo día, en la Justicia federal de Fiske Menuco/General Roca, se leerá la sentencia a los cinco albatros acusados del asesinato de Rafael Nahuel.

A 12 años sin Daniel Solano, desde el Partido Obrero exigimos juicio y castigo a los demás responsables materiales e intelectuales de su asesinato y desaparición. Memoria, verdad y justicia.

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