La rápida reacción del Polo Obrero y otras organizaciones logró la liberación de un grupo de compañeros que había sido detenido por la Policía de la Ciudad durante la desconcentración del impresionante acampe piquetero de 48 horas que conmovió al país.

La fuerza al mando del jefe de gobierno Horacio Rodríguez Larreta había retenido un camión y detenido a varios manifestantes y militantes del Polo Obrero.

Esta acción ilegal de las fuerzas represivas del Estado se suma a las provocaciones y las requisas sufridas por los manifestantes el miércoles 30, cuando las columnas de desocupados llegaban a la Ciudad de Buenos Aires para manifestarse contra el ajuste del gobierno y el FMI, por trabajo genuino, apertura y aumento de los programas sociales, y libertad de organización.

 

Al grito de “¡Piqueteros, carajo!”, se celebró la liberación de los compañeros.