Movimiento piquetero
25/5/2022|1645SP
El “bono para todos” no era para todos
Seguir
Fila frente al Anses
A fines de abril, en medio del plan de lucha piquetero, el gobierno anunció un bono, una especie de IFE 4, luego de que la Unidad Piquetera instalara en la agenda nacional el problema del trabajo y la lucha contra el hambre. Este bono, que fue arrancado con la lucha callejera, se suma al bono conquistado a fin de marzo para los beneficiarios del Potenciar trabajo.
En la propaganda el Frente de Todos, junto a la burocracia sindical y organizaciones sociales del gobierno, se colocó la idea que este bono era para todos los trabajadores no registrados y jubilados, echando lastre frente a los ataques que ellos mismos promovían contra los piqueteros y contra los luchadores populares.
La idea que quisieron instalar no pasó la prueba. Muchos trabajadores que no acceden a la conectividad o algún dispositivo quedaron fuera de este “bono para todos”. Pero aquellos jóvenes adultos y mayores que sí lograron tener el acceso, se encontraron con la primera maniobra para restringir el acceso, el colapso de la página, que derivó en una movilización a la Anses logrando la extensión de los plazos para la inscripción. También se hicieron operativos presenciales pero que también se encontraban con el mismo problema, largas filas y un sistema colapsado.
El IFE 4 nació ajustado
Para mencionar algunas de las cifras que demuestran el ajuste y semejante recorte al “bono para todos”, tenemos que había casi 18 millones de personas empadronadas entre quienes tuvieron que hacer el trámite (11,8 millones) y jubilados que ya ingresaban en forma directa (6,1 millones): esto representa el 57% de la población. De ese total, 4,3 millones fueron rechazados, es decir, que aproximadamente casi el 40%.
Los rechazos fueron por diversos motivos. El cruce de datos arrojó casos donde aparecían propiedades o ingresos inexistentes, otros casos por haber realizado compra de calzado (en cuotas obviamente) en una familia de al menos tres niñes, otros por no actualizarse la información respecto de relaciones de trabajo terminadas y una cantidad enorme, como mencionamos antes, por el colapso o por no tener acceso a internet ni dispositivos.
Otra muestra del ajuste es el enorme recorte que significa si se compara con el pasado, bajo la cuarentena el IFE se pagó en tres veces de 10 mil cada uno y ahora son solo dos cuotas de 9 mil cada uno con una inflación del 100% mediante, y ni hablar del aumento de la desocupación.
Todos estos datos, sumados al ajuste general que sufrimos los trabajadores con tarifazos, aumento de precios en alimentos, dan fundamento genuino a las acciones de la primera etapa del plan de lucha que la Unidad Piquetera votó en Plaza de Mayo el 11 y 12 de marzo en un plenario nacional.
El jueves 26 nos movilizamos hacía el Ministerio de Desarrollo Social y la Anses para quebrar las restricciones que dejan afuera a millones de trabajadores.
Basta de maniobras, ninguna restricción, el bono tiene que ser para todos y sin dilaciones, apertura universal de los programas sociales, aumento de su monto, alimentos para los comedores populares, trabajo genuino. Basta de ajuste.
https://prensaobrera.com/movimiento-piquetero/la-unidad-piquetera-frente-a-nuevos-desafios