Movimiento piquetero
9/4/2025
La elevación a juicio contra el Polo Obrero es un fraude judicial contra el derecho a la protesta
La ofrenda sumisa de Casanello y Pollicita a Bullrich y Milei.
Persiguen las luchas populares y buscan desviar la atención pública de la crisis.
Como los medios oficialistas venían anunciando desde hace días, finalmente el juez Sebastián Casanello elevó a juicio la causa contra nuestras compañeras y compañeros del Polo Obrero. Queda expuesta con absoluta claridad que la intención es utilizar esta causa para perseguir las luchas populares y para desviar la atención pública de la gravísima crisis a la que el gobierno de Milei llevó al país.
Casanello no puede actuar de forma más servil con el gobierno: saca la resolución un día antes del paro nacional, en medio de una fuerte crisis política del oficialismo y cuando se está derrumbando el programa económico con una corrida cambiaria, el día después de que el Congreso votara (tardíamente) una comisión investigadora sobre la megaestafa de $Libra, cuando el gobierno está siendo desautorizado internacionalmente y la Argentina está siendo golpeada por las medidas del gobierno de su aliado Trump. Además, solo dos días después de que nuestra compañera Vanina Biasi sufriera un vergonzoso procesamiento por denunciar el genocidio que lleva adelante el Estado de Israel sobre el pueblo palestino.
La resolución de Casanello es el punto final de una instrucción vergonozosa, en la que se violó sistemáticamente el derecho constitucional a la defensa. Convalida así haber finalizado la instrucción sin permitir que la defensa presentara testigos. Convalida también la utilización de las pruebas del allanamiento en el local central del Polo Obrero sin haber abierto las cámaras que lo filmaron, cuando la propia Cámara Federal de Apelaciones ordenó hacerlo y que se permitiera la presencia de un perito de parte. Fue una instrucción donde no se permitió que los peritos de la defensa presenciaran la apertura de los teléfonos y dispositivos electrónicos. Convalida además haber permitido que el pedido de elevación a juicio lo realizara Pollicita, después que este fiscal filtrara a la prensa oficialista su escrito antes de subirlo al expediente con el objetivo armar un escrache mediático; algo contrapuesto con la objetividad mínima que requiere un proceso judicial. Convalida la querella del Ministerio de Capital Humano a pesar de que la cartera mintió diciendo que el Polo Obrero no rindió las sumas que rindió.
Todo este expediente fraudulento tiene el objetivo de fundamentar una causa en la cual se acusa al Polo Obrero por impulsar las movilizaciones contra el hambre. Un gobierno que cesó totalmente la entrega de alimentos a los comedores populares nos acusa de “condicionar la entrega de alimentos a la participación en movilizaciones”, ¡cuando es claro que movilizarse era la única forma de arrancarlos al Estado! Nos acusan de autofinanciarnos con un aporte voluntario, ¡cuando si no fuera por estos aportes es imposible alquilar un local para un comedor popular!
Nos acusan de administración fraudulenta los mismos responsables de la megaestafa que vivimos todos los días contra los jubilados, los trabajadores y todo el pueblo argentino. Mientras se niegan siquiera a tomar en cuenta la prueba presentada, que muestra que el Polo Obrero utilizó los escasos fondos de los convenios con Desarrollo Social para garantizar la puesta en pie y refacción de más de 50 comedores populares, los proyectos de trabajo, productivos, culturales y deportivos en todo el país.
Esta farsa judicial al servicio del poder tiene un único objetivo, que es el mismo que vemos todos los miércoles cuando la policía de Bullrich apalea jubilados, el mismo que se esconde atrás de los gendarmes que tiran a matar a periodistas, el mismo que vemos en la persecución de todas las organizaciones: ponerle un bozal al pueblo argentino para impedir que se expresen los reclamos legítimos frente a un gobierno que no tolera las críticas, ni la oposición, ni las movilizaciones elementales y democráticas.
Ahora iremos al juicio a defender nuestra causa como siempre lo hemos hecho, con la frente en alto para defender a cada uno de los compañeros y compañeras que están sufriendo esta persecución injusta. Vamos a que se escuchen y se vean las pruebas que Casanello y Pollicita han impedido presentar. A defender a nuestra organización que sigue en pie en todo el país organizando la lucha contra el hambre y la miseria. Vamos a denunciar a un gobierno que nos quiere llevar al banquillo cuando están a la vista de todo el país sus estafas millonarias. Y a defender el derecho a la organización y la protesta popular, como lo hacemos día a día, en las calles, junto a los trabajadores y el pueblo argentino.


