Gabriel Solano, precandidato a presidente por el Partido Obrero-MST en el Frente de Izquierda, participó del programa Desiguales (TV Pública), que está conducido por Lucila Trujillo y Pablo Caruso. Entre los diversos temas que se trataron se encontró el de la estatización de las organizaciones obreras y sociales.

En este sentido, Solano dijo que es crucial que el movimiento popular sea independiente del Estado. “Con la Unidad Piquetera, por ejemplo, defendemos ese principio; sino ocurre algo negativo como con ciertos grupos bajo el macrismo (se refiere al Triunvirato Cayetano, o sea, al Movimiento Evita, a Barrios de Pie y a la CCC) que pactaron con Carolina Stanley”. Esos mismos grupos están integrados hoy al ministerio que dirige la ajustadora Victoria Tolosa Paz.

Por esto es que estas organizaciones no apoyan la pelea que la Unidad Piquetera viene desenvolviendo contra el ajuste del gobierno nacional. Juan Grabois, dirigente de la Utep, le dio la espalda a la enorme jornada nacional de lucha que la UP llevó adelante este martes 4 de julio. Se encuentra más preocupado por realizar su campaña electoral en el marco de la interna de Unión por la Patria; luego de las Paso deberá hacer campaña por el ajustador proimperialista Sergio Massa.

“Con la CGT pasó lo mismo, en el 2017 firmó la reforma laboral, la cual no se aprobó por la rebelión popular del 14 y 18 de diciembre, que fue contra la CGT y no promovida por ella”, agregó Solano.

La cooptación-estatización de las organizaciones obreras y sociales es un instrumento del capital y sus gobiernos para neutralizar la lucha de la clase obrera. Generalmente se manifiesta bajo la forma de la incorporación de dirigentes o miembros de ciertas organizaciones a puestos en el Estado capitalista y también de la atadura de estas al gobierno, lo que las lleva a dejar de pelear por reivindicaciones.

Que se hayan recrudecido los femicidios o se haya profundizado la crisis ambiental, revela que el gobierno del Frente de Todos armó el Ministerio de Mujeres y el de Ambiente para cooptar a sectores de los movimientos de lucha como la ola verde o contra la depredación ambiental. La CGT, entretanto, hace campaña por Sergio Massa, después de haber apoyado todos estos años al gobierno nacional pactando paritarias a la baja.

En cambio, el Sutna (sindicato de neumático), cuya dirección es políticamente independiente y clasista, sí organiza luchas para defender a los trabajadores y las lleva hasta el final. Así, a través de paros, movilizaciones y de una huelga conquistó el año pasado la mejor paritaria del movimiento obrero argentino (la única que tiene cláusula gatillo por inflación).

Los Sutebas multicolores, por su parte, son los que organizan la lucha contra el ajuste antieducativo de Axel Kicillof, mientras la dirección celeste de Roberto Baradel, estatizada hasta los tuétanos, boicotea esa pelea y llama a hacer campaña electoral por el gobernador.

Gabriel afirmó que “esa estatización le quita a los trabajadores un instrumento para defenderse, que es el derecho a la protesta”. Asimismo, dijo que “el ejemplo más extremo (de cooptación) es lo de Emerenciano Sena en Chaco, quien se convirtió en un funcionario del gobierno pero sin cartera, lo que derivó en el crimen de Cecilia”.

Sena “manejaba un presupuesto del Estado sin ningún tipo de control y construía viviendas y colegios; el grupo de Sena fue utilizado por el gobierno de Capitanich como un grupo de choque contra movimientos de lucha (por ejemplo el de mujeres)”, dijo Solano. Gracias a los fondos que le otorgó el Estado provincial, la familia Sena se enriqueció y pudo hacerse de varias propiedades, vehículos de lujo y emprendimientos económicos.

El Partido Obrero defiende y promueve la independencia política de todos los movimientos de lucha. Solo con esta orientación se puede luchar consecuentemente por todas las reivindicaciones.

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