El viernes 12 de julio con el voto de la mayoría de los partidos políticos representados en la legislatura de Río Negro se aprobó la adhesión de la provincia al Rigi (Régimen de Incentivo a las Grandes Inversiones), convirtiéndola en la primera provincia adherente del país.

Este régimen en la provincia implica un megaproyecto de depredación ambiental a través de las megamineras, oleoductos, entre otras explotaciones en las que se perfila la provincia. Se eliminaría cualquier obligación por parte del inversor que podrá apropiarse de empresas públicas o privadas y recursos naturales sin obligación de generar empleo, ni de contratar proveedores en el país, ni de generar nuevas industrias o inversión en investigación y desarrollo, ni transferencia de tecnología alguna.

Pero eso no es todo porque en la misma sesión la Legislatura, incluso con más votos a favor que para la votación de la adhesión del Rigi (37 y 35 respectivamente), facultó a la Secretaría de Energía para avanzar en negociaciones para la prórroga de las concesiones petroleras por 10 años.

La entrega de los recursos naturales de la provincia tiene a todo el arco patronal, político y a la burocracia sindical respaldando esta nueva medida gubernamental.

Acá los responsables tienen nombre y apellido. Alberto Weretilneck (Juntos Somos Río Negro) que tiene precedentes con políticas entreguistas, con episodios como la modificación de la Ley de Tierras en favor del fracking y la megaminería en 2023 o la desprotección del Golfo San Matías (y sus reservas naturales) para favorecer el negociado hidrocarburífero en 2022. Por supuesto el radicalismo (Coalición Cívica ARI y Unión Cívica Radical) y el PRO (Cambia Río Negro) funcionales a Weretilneck, y a favor de los ataques de los pueblos originarios -vale mencionar que recientemente el PRO presentó un proyecto para no permitir la bandera mapuche en instituciones públicas que habitan en la provincia y luchan aguerridamente contra el extractivismo. El peronismo (Vamos con Todos y Nos Une Río Negro), que trajo a Mekorot a la provincia, apoyó a Weretilneck para ganar la gobernación que se encolumnó detrás de Massa quien llamaba a “repartir la torta que es la cordillera”. Y Primero Río Negro, la filial de Milei, un dueto en la legislatura de antiderechos y negacionistas del cambio climático. Más claro imposible.

Este tipo de políticas promocionadas gobierno tras gobierno como el único modo de salir de la crisis en la que nos metieron ellos mismos se trata de dilapidar los bienes comunes en beneficio de empresas multinacionales por la promesa de migajas que terminan siendo mal distribuidas, si son distribuidas. Extranjerización de la tierra, contaminación, pérdida de biodiversidad, concentración de la tierra son constantes en cada nuevo proyecto.

Desde Tribuna Ambiental y el Partido Obrero nos pronunciamos contra el ajuste y el saqueo que intentan imponer los gobiernos. Organizate con nosotros y preparemos un plan de lucha. 

Nuevos anuncios económicos: el dúo Milei-Caputo en aprietos

Al ministro “mago” no le quedan muchos conejos en la galera. –

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