Políticas
30/11/2025
Las luchas que se vienen en Mendoza
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Partido Obrero Mendoza
Movilización contra el proyecto San Jorge frente a la Legislatura.
El reciente triunfo electoral del oficialismo, tanto a nivel provincial como nacional, ha envalentonado a los gobiernos para avanzar rápidamente con su agenda, buscando utilizar el resultado como un aval a sus políticas. Así, mientras Milei acelera el tratamiento de la reforma laboral, el gobernador Cornejo hace lo propio con los proyectos mineros.
Vale la pena, sin embargo, matizar la fortaleza con la que salieron de las elecciones. Tanto Milei como Cornejo han perdido una cantidad más que considerable de votos (en términos absolutos) entre 2023 y 2025. Por otra parte, el esquema económico del gobierno nacional es frágil, constatado en el hecho de que ha tenido que ser rescatado en múltiples ocasiones. A su vez, el gobierno provincial, que esperaba que el triunfo debilitara las luchas, ve crecer las manifestaciones en defensa del agua, contra el proyecto minero de San Jorge.
Un ataque brutal contra los trabajadores
La reforma laboral impulsada por el gobierno nacional es un ataque brutal contra los trabajadores. Cercena derechos elementales como las vacaciones, dejando en manos de las patronales la decisión sobre cuándo y por cuánto tiempo un obrero puede tomarlas. Elimina las horas extras con la creación de un banco de horas y abarata los despidos, atacando la estabilidad laboral. Plantea descuentos por enfermedad y ataca la organización sindical, buscando que los trabajadores actúen de forma individual ante la patronal.
Cornejo, a su manera, avanzó exactamente en el mismo sentido sobre los trabajadores estatales. Las reformas al estatuto del empleado público y a los regímenes profesionales y no profesionales tocan los mismos puntos: atacan la estabilidad laboral conquistada por el sector, establecen un doble presentismo que se descuenta por enfermedad, salarios dinámicos según productividad y otorgan más poder y discrecionalidad para la patronal.
El empleo estatal funciona como un nivelador de salarios para un amplio grupo de trabajadores (el salario de docentes o trabajadores de la salud en el sector privado, por ejemplo, sigue más o menos su evolución). Por eso, el ataque al empleado público es la antesala de un ataque contra el conjunto de los trabajadores en la provincia. La reforma laboral de Milei y los gobernadores es una avanzada contra los trabajadores en general, buscando disminuir el “costo laboral” para aumentar la ganancia empresarial.
Cómo nos preparamos para lo que viene
Lejos de organizar a los trabajadores ante semejante ofensiva, la CGT negocia la reforma laboral. La burocracia sindical provincial tampoco ha sido un obstáculo para Cornejo, dejando pasar las reformas casi sin luchar.
En la legislatura, el oficialismo tampoco ha encontrado oposición: todos los partidos —incluyendo quienes se presentaban hace unas semanas como la opción para frenarlo— han votado favorablemente la Ley de Presupuesto. Es decir que radicales, libertarios, peronistas y verdes comparten la "hoja de ruta" del presupuesto provincial. Lo mismo vale para las leyes que habilitan la megaminería, donde el oficialismo cuenta con el apoyo principalmente del peronismo.
Debemos derrotar el plan de guerra contra los trabajadores de Milei-Cornejo. Pero para ello, debemos romper con las direcciones sindicales y políticas que nos han traído hasta aquí. Ni la burocracia sindical ni la oposición cómplice en la legislatura van a enfrentar a fondo estos ataques.
La reforma laboral, la modificación del estatuto del empleado público, la reforma educativa y el avance de la megaminería no son hechos aislados, sino parte de un plan para recomponer la tasa de ganancia de los capitalistas a costa de los trabajadores. Frente a esto, es urgente oponer un programa alternativo que ofrezca una salida para la clase obrera: defensa del empleo, mejoras salariales, rechazo al ajuste en salud y educación, y protección del agua y los recursos naturales. También contra la injerencia del imperialismo de Trump, el FMI y empresas como Mekorot.
El Partido Obrero, en el Frente de Izquierda, convocará a asambleas abiertas en todo el país para que los trabajadores nos preparemos para intervenir en las luchas venideras. Con los métodos de la clase obrera y un programa que enfrente la crisis del capital, debemos organizarnos en barrios, lugares de estudio y trabajo con el objetivo de construir un paro general que derrote a los gobiernos de Milei y Cornejo.
