Motorizados por la derrota electoral, el gobierno de la provincia de Buenos Aires, liderado por Axel Kicillof, llevó también a cabo un recambio de gabinete. El mismo fue presentado como un “cambio de aire” en la gobernación, de cara a “la etapa de la pospandemia, el crecimiento y la reconstrucción productiva”. (Página 12, 20/9)

Sin embargo, quienes asumieron son viejos conocidos. Entre ellos se encuentran Martín Insaurralde, exintendente de Lomas de Zamora y ahora jefe de gabinete, y Leo Nardini, exintendente de Malvinas Argentinas y ahora asignado como ministro de Infraestructura y Obras Públicas.

¿Qué significado tiene la integración de este tipo de actores al gobierno provincial? Aníbal Fernández encaminó la respuesta a esta pregunta, cuando felicitó a Kicillof por integrar a los “barones del conurbano” a su gestión. Definidos por él mismo como la “aristocracia de la provincia de Buenos Aires”, personajes como Nardini son los jefes de los aparatos punteriles enquistados en las grandes barriadas del conurbano, que desarrollan el clientelismo político y la manipulación de la asistencia social en beneficio del atornillamiento en el mando de los intendentes. El propio intendente de Malvinas carga con una causa de malversación de becas Progresar por un monto de $6.224.403, donde la imputación esta firme y en plena investigación.

Nardini, que asumió en 2015 como intendente, ha hecho de la obra pública su estrategia de marketing en Malvinas Argentinas. Con obras cosméticas y fuertes lazos con constructoras monta una pantalla para tapar una pobreza extendida que habita el municipio. A comienzos de 2020, y en simultáneo con el comienzo de la pandemia, se registraron una gran cantidad de casos de dengue y otras enfermedades ligadas a la falta de obras públicas como desagües en los barrios más pobres del distrito. Sumado a basurales a cielo abierto en varios puntos de la región, cuya máxima expresión es el campo La Juanita (utilizado por las empresas del parque industrial para desechar residuos sin tratar a metros de las casas de lxs vecinxs). Un verdadero abaratamiento de los costos de desechos para los capitalistas. Nardini mantuvo siete años este punto de contaminación y enfermedades, hasta que este año, la lucha popular y la asamblea de vecinxs de campo La Juanita logró forzar el compromiso de cierre.

La incorporación de estos jefes del conurbano traduce el reforzamiento del rumbo de ajuste y la derechización del gobierno nacional en la provincia. La pejotización de Kicillof, con el aval de Cristina, es parte de una avanzada de los intendentes frente a la derrota, en la búsqueda de recomponer los votos perdidos en las Paso y obtener lugares de conducción dentro del gabinete. Para ello se desplazaron a los elementos camporistas acotando la intervención de Máximo Kirchner. El copamiento de representantes de los intendentes en el gabinete plantea un preponderancia de lo más rancio y conservador del peronismo. Nardini, secretario de Juventudes en el PJ, es el responsable de haber armado el PJ Pastoral en plena ola verde: un conjunto de representaciones de iglesias evangélicas que se proponía actuar dentro de la órbita del peronismo en Malvinas Argentinas. Nada que envidiarle al representante del Opus Dei, Juan Manzur. En materia de “seguridad”, es un reforzamiento de la línea represiva en el gabinete de Berni, ya que fue un ejemplo de manejar la pandemia a base de represión, cierre de calles, copamiento del distrito por cinco fuerzas represivas y persecución de los transeúntes. El presupuesto destinado a la policía era (y es el que falta) en los hospitales del municipio, que se sostienen sobre la ultraprecarización de residentes y contratados; tal cual se comprobó en los reclamos que salieron a poner en pie como ocurrió en mayo de este año, en medio de la segunda ola, con el personal del hospital Trauma.

El “aire fresco” del que habla Kicillof carga con el olor de los basurales y tufillo de corrupción. A la par del olvido y la pobreza que ahonda en los barrios de Malvinas Argnetinas, crece la organización con el Polo Obrero, que pelea por trabajo y obras de urbanización. Para les jóvenes se confirma que Berni no es un facho que anda dando vueltas perdido en el gobierno de Axel. Sino que se trata de una orientación que ahora se refuerza con las incorporación de antiderechos y figuras de lo más rancias a su gabinete. Debemos denunciar este suceso por su nombre, y construir una alternativa política al gobierno que profundiza su tinte conservador. La referencia política del Frente de Izquierda – Unidad que se consolidó en estas elecciones se plantea como el polo político de lucha contra el gobierno ajustador.