Las elecciones legislativas de 2013 posicionaron al Partido Obrero en dos bancadas del Departamento, Tartagal y Mosconi con votaciones importantes en ambas ciudades.

En estas ejecutivas, el gran objetivo era defender estas bancadas conquistadas.

 

Cada localidad tuvo su particularidad, pero lo que surge del conjunto es que se confirmó el derrumbe del romerismo y la gran mayoría de sus candidatos locales. Al igual que a nivel provincial, la UCR se ubicó en tercer lugar con gran apoyo de un sector de los medios oficialistas, en la línea de que haya una oposición complaciente que desplace al PO.

 

En Tartagal, el cristinista Leavi -patrón del trabajo en negro- logró casi el 45% de los votos ante una oposición que pertenece a su mismo frente, el que llevaba a Urtubey como gobernador. En la categoría concejales, la UCR ganó con casi el 13%, y el oficialismo logaría ingresar siete concejales sobre 11 con diferentes colectoras.

 

Nuestra bancada de Tartagal está aún en discusión, logramos 1509 votos y nos correspondería la décima primera bancada. Un piso restrictivo del 5% nos dejaría afuera.

 

En Mosconi, la disputa entre los intendentes fue el eje de la elección. Allí disputaban también dos oficialistas. Finalmente se impuso el PRS, con Ruarte (denunciado por malversación de fondos en su gestión 2007-2011) que vuelve a la intendencia con el apoyo explicito del aparato oficial. El actual intendente terminó cuarto.

 

En este escenario político no pudimos retener nuestra bancada, pero sostuvimos una votación de casi 600 votos para concejal y casi duplicamos, al igual que en todo el departamento, en las categorías para gobernador, senador y diputados.

 

En Aguaray se conformó un rejunte contra el oficialista Alcoba, quien luego de las Paso confió su suerte a la amplia diferencia que había sacado, 20 puntos. Urtubeistas, romeristas, radicales y hasta ex alcobistas se “unieron” y lograron por 36 votos superar al candidato y actual intendente. Esto no disimula que esta unidad en la desgracia prontamente hará implosión por sus peleas de camarilla. Algunos con críticas y otros valorando nuestra coherencia, resaltaron nuestra total independencia ante este conglomerado de fuerzas.

 

La novedad ante esta descomposición es que nuestra compañera Mariela Álvarez, delegada regional en la lucha docente y referente de Tribuna Docente fue electa como Convencional Constituyente con más del 10%. Una bocanada de aire fresco se apresta a experimentar la vecindad de Aguaray con el ingreso de quien planteará las reivindicaciones de los trabajadores en la elaboración de la Carta Orgánica.

 

En Salvador Mazza, nuestra lista mantuvo las votaciones de las primarias, conformada por varios familiares que luchan contra la impunidad, referentes de la juventud, laburantes y vecinos, que nos da un plafón para el desarrollo partidario en esta ciudad.

 

El acompañamiento en esta lucha electoral de sectores como la juventud, la docencia, pequeños comerciantes (puesteros), jubilados, ex trabajadores de YPF y vecinos, marcan el camino para fortalecer las iniciativas populares y para el desarrollo político del partido. 

 

Nuestra convencional en Aguaray, Mariela Alvarez, y nuestro joven concejal en Tartagal, Joaquín Carrizo, de sólo 22 años (banca que pelearemos hasta el final) se presentan como los principales voceros para que la crisis no la paguen los trabajadores.