Políticas

8/7/2022

Más aumentos en Precios Cuidados, en medio de desabastecimiento y remarcaciones

El gobierno acordó con las cámaras alimenticias un recorte en la canasta de productos del programa y una pauta de aumento promedio trimestral.

Precios Cuidados

La Secretaría de Comercio Interior renovó el programa Precios Cuidados y el gobierno acordó con las distintas cámaras del sector alimenticio un recorte en la canasta de productos del programa y una pauta de aumento promedio trimestral del 9,3%, que se dividirá de la siguiente manera: 3,3% en julio; 3,2% en agosto y 2,5% en septiembre. De esta forma, prevalece el continuismo de las políticas de Feletti y Hang con el presunto objetivo de combatir el desabastecimiento, pero son las mismas recetas ya fracasadas que solo se amoldan a los intereses de las patronales.

La nueva etapa del programa entrará en vigencia desde mañana hasta el 7 de octubre. El recorte de la lista de productos que integra el programa fue de 401 productos, de 1350 artículos con los que contaba el programa, con la renovación se redujo a unos 949 artículos. Cabe recordar que, tanto Feletti como Hang, han autorizado aumentos en Precios Cuidados como respuesta al reclamo de las patronales alimenticias que presionan con el desabastecimiento de las góndolas, como es el caso de los proveedores de café y de papel que retienen los productos con fines especulativos frente a futuras devaluaciones, un recurso que utilizaron todas las patronales alimenticias el último fin de semana para preservar su tasa de ganancia frente a la corrida cambiaria.

El gobierno continúa cediendo a estas extorsiones, otorgando aumentos y recortes en el programa, mientras enarbola un discurso contra la inflación como si se tratara de “agentes externos” que intervienen en la economía contra los bolsillos populares, con el slogan contra los “formadores de precios”. Las medidas que impulsa revela que es el propio gobierno uno de estos formadores de precios, quizás el principal. En este sentido, en julio comenzarán a llegar todos los aumentos autorizados: las boletas de gas y electricidad, el aumento previsto para el agua en la zona del Amba, el transporte público, telefonía, internet y televisión por cable y, por quinta vez, las prepagas. Un sacudón para las familias obreras con sello oficial.

A su vez, los salarios y las jubilaciones continúan siendo víctima de la corrida inflacionaria y cambiaria que seguirán horadando los ingresos de los trabajadores. Las consultoras privadas ya vaticinan una inflación para el mes de junio casi un 8%, un récord mensual para lo que va del año. La canasta básica total (CBT), que establece la línea de pobreza se ubicó en $99.670 y la canasta básica alimentaria (CBA), que establece la línea de indigencia, se ubicó en $44.499 (Página12 22/6). En tanto, los números afirman que el salario mínimo vital y móvil de $45.540 y la jubilación mínima de $37.524,96, no solo no alcanzan para cubrir la canasta básica total sino que rozan la línea de indigencia, lo que manifiesta que el gobierno se ocupa de que los salarios y las jubilaciones no se remarquen al mismo tiempo que los precios.

Mientras se les concede aumentos en el precio de los alimentos más consumidos por la masa laboriosa de este país a las patronales que “remarcan todos los días” (Braun, presidente de la cadena de supermercados La Anónima, dixit), también reafirman que no se establecerá aumentos en las retenciones a los pulpos del agro, quienes gozan de “rentas extraordinarias” a costa los precios internacionales en alza de los granos y su traslado al mercado interno. Al mismo tiempo, el gobierno firma paritarias a la baja y en cuotas, en complicidad con las burocracias sindicales y los empresarios, para que seamos los trabajadores los que continuemos pagando la crisis.

La CGT, por su parte, decidió “esperar el momento oportuno” para convocar a una movilización, porque no existe en el horizonte de la central obrera defender las necesidades de los trabajadores. Su inmovilismo sirve como sostén del gobierno, que está aplicando un ajustazo contra los salarios y que recrudecerá el ajuste en el segundo semestre. Esta ofensiva pone a la orden del día la necesidad de ir hacia un paro nacional y un plan de lucha que rompa con el FMI, consigna que llevaremos este 9 de julio a la gran movilización convocada por el Frente de Izquierda Unidad.