Políticas

14/10/2025

Milei-Caputo ceden el gobierno a Trump-Bessent

Editorial de Gabriel Solano en 14 Toneladas T2E37.

Caputo y Milei.

Lo que ocurrió la semana pasada y está ocurriendo ahora no registra antecedentes en la historia argentina, porque tenemos una intervención directa de Estados Unidos sobre el país, una intervención que es económica, que es financiera y que, como vamos a ver, también es una intervención política. Abarca todos los planos de la situación nacional.

¿Qué es exactamente lo que sucedió? La semana pasada, y eso lo veníamos viendo, el agotamiento del esquema económico del gobierno estaba a punto de llegar a su punto límite, el tesoro -lo que es el gobierno- directamente se había quedado sin dólares. Todos festejaban la semana pasada que el viernes era feriado y como el viernes era feriado ese día no iba a funcionar el mercado libre de cambios y por lo tanto se iba a ahorrar el gobierno de vender dólares. Pero así todo se había quedado el gobierno sin dólares para poder intervenir, siendo que la corrida no hace otra cosa que crecer y el tweet que había sacado hacía un par de semanas atrás el titular del Tesoro norteamericano, Bessent, no daba el resultado previsto porque la corrida continuaba y el riesgo país ya estaba nuevamente en 1.300 puntos y subiendo.

¿Qué hace, por lo tanto, Estados Unidos, mediante una intervención del Tesoro? Decide vender dólares, ellos llamaron comprar pesos, pero en realidad cuando uno vende dólares como intercambio es que uno compra pesos en el mercado argentino, y lo hizo no directamente el gobierno norteamericano sino que para eso utilizó a un banco, al Banco Santander, que a pedido del Tesoro norteamericano salió a vender dólares en Argentina. ¿Cuántos dólares? No es muy clara la información, porque aparte es un información que corresponde a Estados Unidos, no a Argentina, pero se estima unos 100 millones de dólares.

Nunca tuvimos, nunca, en la historia de Argentina, que otro país intervenga, ya no importa aquí si directamente o utilizando un banco privado para ello, una intervención tan directa en el mercado de cambio de Argentina. Lo cual lleva, esa es la conclusión final, a que el tipo de cambio en nuestro país lo fija un Estado extranjero. Es la renuncia completa a la soberanía monetaria, porque el tipo de cambio de Argentina -dólar más bajo, dólar más alto, precio más alto precio más bajo- ya no depende del gobierno argentino y por lo tanto de la voluntad del electorado argentino que vota a su gobierno, a sus representantes también en el Parlamento, si no que pasa a depender de los Estados Unidos. Insisto, es un hecho que no registra antecedentes en la historia nacional. A tal punto pasa esto que incluso en el plano informativo se produce un hecho que es inadmisible: todo lo que sabemos sobre esta intervención y todo lo que sabemos sobre los acuerdos que se están discutiendo, el pueblo argentino lo sabe exclusivamente por información que dan los funcionarios norteamericanos, especialmente Scott Bessent que es, insisto, el ministro de Economía de los Estados Unidos, el titular del Tesoro. Los funcionarios argentinos hasta el momento no dijeron nada, no le informaron al pueblo nada; cuando tuiteó Bessent lo único que hizo Milei fue hacer un comentario en inglés, es decir, en el idioma no del propio país y no es el idioma que maneja el pueblo argentino, por lo tanto, por lo que entiendo, está desconociendo completamente lo que pasa con su sistema financiero, con su sistema bancario, con el tipo de cambio, esto es un resorte específico de Estados Unidos y los funcionarios de nuestro país no dicen nada.

Se produjo un hecho incluso llamativo, e interesante a la vez, que es que aparece el reportaje a Scott Bessent en donde él dice las condiciones que está poniendo Estados Unidos y aparece nuestro jefe de gabinete, Guillermo Francos, a decir que no es tan así. Pero ¿cómo es si no es como dice Bessent? No aclaró cómo es. Y además acá lo que importa no es lo que dice el que va a recibir la plata, lo que importa es lo que dice el que la va a poner, porque si al que la va a poner le dicen que no es así, no la pone más. Y si no pone más la plata se acabó el gobierno de Milei en un plazo muy pero muy breve.

Entonces hemos dado un salto, insisto, porque Estados Unidos pasa a manejar la política cambiaria, la política del tipo de cambio y por lo tanto también la política económica general de Argentina, tiene esa magnitud. Esto ha dado lugar incluso a un debate dentro de los Estados Unidos, porque muchos están diciendo con razón -una de ellas es la senadora demócrata Elizabeth Warner- que cuando Scott Bessent toma esta medida no está salvando a la Argentina, sino que está salvando, por un lado a Milei -o pretende salvar a Milei, veremos si lo logra-, que es un aliado de de el presidente Trump en América Latina y, por otro, está salvando a los amigos directos del titular del Tesoro, de Scott Bessent, que son los grandes grupos de inversión internacionales BlackRock, Fidelity, Pimco y otros que lo que habían hecho en los últimos meses era comprar activos argentinos, básicamente vender dólares comprar pesos o vender dólares y comprar títulos públicos en pesos en la expectativa que eso permitía tener beneficios más altos en nuestro país, porque las tasas de interés que paga Argentina son más altas que las que se pagan a nivel internacional. Ese negocio, que puede ser muy, muy redituable, solo cierra si cuando te vos te querés llevar la guita en el medio no hubo una devaluación, si en el medio hay una devaluación perdiste por la devaluación lo que ganaste con el diferencial de tasa de interés.

¿Cómo hacían estos tipos para llevarse la guita si Argentina se había quedado sin dólares? Bueno, la única forma es que entren dólares desde afuera para permitir que se vayan los amigos de Bessent de manera directa con esos dólares y puedan finalmente realizar el negocio hasta el final. Este Bessent tiene una larga historia en este tipo de manejos, incluso cuando estaba en el sector privado, porque formaba parte del grupo de inversión de Soros, que fue el que estuvo detrás, en la década del 80, de una gran especulación contra la libra esterlina, una moneda mucho más fuerte que la Argentina, y le ganó la pulseada al Banco de Inglaterra, obteniendo beneficios extraordinarios para el grupo Soros, Bessent en ese momento era un ejecutivo del grupo Soros. Bessent dice ahora algo, que también puede ser interesante, que es que en realidad lo que él está haciendo es beneficioso para Estados Unidos, incluso en términos financieros, porque está comprando pesos que están baratos, ese argumento lo dijo también el ministro de Economía, Caputo, que dijo, Bessent, como yo, nos dedicamos a arbitrar con la tasa de interés. Esa es nuestra, digamos, característica de economistas, así hacemos plata.

Ese comentario es interesante porque no queda claro qué quiere Estados Unidos. La mayoría de los analistas, y yo creo que eso es lo que tiene razón, ven en esa afirmación exclusivamente un mensaje confuso, tramposo de la Reserva Federal y del titular del Tesoro para ocultar que posteriormente a las elecciones de 26 de octubre viene una devaluación. Entonces si lo que pasa es que el peso está barato y se va a encarecer no viene una devaluación, vienen una revaluación. ¿Es así? Nadie piensa en serio eso. En realidad, la mayoría de los economistas lo que deduce es que este es un esquema de emergencia armado hasta el 26 de octubre, tratando de que mejore las chances electorales de La Libertad Avanza y sus aliados, y que luego del 26 de octubre vendría una devaluación monetaria mucho más fuerte y, por lo tanto ya el peso no se que estaba barato, sino que va estar más barato todavía, porque la devaluación consiste en eso, en que se desvaloriza la moneda nacional y se revalorizan otras monedas, en este caso el dólar.

Entonces, esta intervención es realmente muy importante porque, pensemos nada más, ¿qué ocurriría mañana si el gobierno argentino no accede a las condiciones que le pone Estados Unidos? No vende más dólares y no solamente no vende más dólares, sino que sale a vender los pesos que compró y por lo tanto provoca una devaluación monetaria y hay una verdadera crisis política. El gobierno de Milei, llegando de manera tan crítica a estas elecciones va a negociar con Estados Unidos completamente entregado y Estados Unidos se hace con muy poco dinero -porque estamos hablando de muy poco dinero- de una posición muy, muy clave, muy estratégica en América Latina. Eso es lo que está pasando acá. ¿Cuáles son las condiciones que dijo Bessent que pretendía de Argentina? Fue muy claro, dijo que Argentina se vaya, se aleje de China, esa es la gran condición, que se aleje de China y que se aleje de China significa muchas cosas. En primer lugar, que los recursos naturales que Argentina tiene van a ser del dominio de las empresas norteamericanas y no del dominio de empresas chinas. ¿Cuáles son esos recursos naturales? El uranio, que es un mineral muy importante incluso para uso militar, es clave para todo el armamento atómico y con el uranio hay un gran debate porque esta, sobre todo hoy, la provincia de Chubut discutiendo qué va a pasar con el uranio y Estados Unidos quiere quedarse con ese uranio, quiere quedarse con el litio y quiere quedarse con el cobre, es decir, quiere quedarse con posiciones claves y, desde ya, también en términos más militares construir en Ushuaia una base militar, que el candidato de La Libertad Avanza de Tierra del Fuego de algún modo confirmó que son negociaciones bastante adelantadas; en el medio también está quién va a manejar la hidrovía, es decir, resortes estratégicos de la Argentina. Y hay un debate también qué va a pasar con el swap que en su momento China le dio a Argentina, si se va a cancelar o no, o por lo menos que se cancelen los 5.000 millones que había activado originalmente Massa para poder pagar la deuda. Así que es claramente un plan de alejamiento de China y de sometimiento a Estados Unidos, siendo que -y esto lo hemos explicado en varias oportunidades- la economía argentina y la economía norteamericana son economías competitivas, porque lo que Argentina suele exportar al mundo es lo mismo que exporta Estados Unidos y que por lo tanto hay un interés muy grande -y lo dice Bessent en el reportaje- que a China los que le vendan la soja sean los farmers norteamericanos y no la oligarquía argentina instalada en la pampa húmeda, eso tuvo una situación de pelea que ha llevado incluso a choques de Milei con la base agraria capitalista de Argentina, que tiene miedo a ser reemplazada por los norteamericanos.

Entonces acá hay un sometimiento de fondo y Argentina queda completamente a la deriva y a merced de las decisiones que pueda llevar adelante Estados Unidos, porque insisto, si mañana el gobierno de Milei decide no cumplir tales o cuales condiciones, Estados Unidos tiene la posibilidad de tirar abajo la moneda argentina, armar una corrida, una hiperinflación y se acabó el gobierno y para que eso no ocurra hay que darle una cantidad enorme, enorme, enorme, de recursos naturales. Se habla de un swap de 20 mil millones de dólares, que tampoco está claro cómo va a ser, porque en principio los swaps son acuerdos entre los bancos centrales y este sería un acuerdo entre el Tesoro norteamericano y el gobierno argentino. Se dice que ese sería en cuotas, no todo junto, lo cual da más capacidad de chantaje, porque te da una parte y las otras partes quedan supeditadas a que se cumplan los compromisos establecidos.

Con eso hemos llegado ahora. Y no es una intervención solamente económica. Si uno lee el Clarín del día de ayer -12/10- el editorial que saca Santiago Fioriti, comenta con lujo de detalles que además de toda la intervención de Bessent en materia económica, estuvo directamente en la Casa Rosada un tipo que se llama Barry Bennett -Barry Bennett es un asesor directo del Partido Republicano y directo de Donald Trump- y estuvo reunido con Santiago Caputo, uno de los que forman parte del Triángulo de Hierro del gobierno. Y es llamativo lo que dijo este Bennett, que fue con una carpeta con nombres de dirigentes de Argentina, con nombres de gobernadores de Argentina, diciendo bueno yo hablé con todos estos, para que después las elecciones se incorporen al gobierno. Es decir, que ya no es solo una intervención económica, sino que está delineando Donald Trump a través de diferentes personas, por ejemplo este caso Barry Bennett, que estuvo en la Casa Rosada reunido con el gobierno y después dice que hubo varias reuniones secretas, en la cual hay una intervención directa sobre una serie de gobernadores y dirigentes políticos de la supuesta oposición para que posteriormente al 26 de octubre se incorporen al gobierno, ¿Por qué? Bueno, porque todo el mundo entiende que el gobierno de Milei, en su actual conformación, no da garantías de gobernabilidad y que para el ataque que tiene que venir en la Argentina de una devaluación muy fuerte y de una reforma laboral que está reclamando y que el gobierno acaba de prometer en un acto de una empresa, para una reforma previsional, para una reforma fiscal, para hacer lo que dijo el otro día la titular del FMI, Georgieva, "se observa que el problema que tiene Milei y lo que tiene que lograr es hacer lo que pasó en algunos países del Europa del Este, reducir un 50% los salarios y un 50% las pensiones, la jubilación argentina, y que la gente lo vote", que eso es muy difícil, la cuadratura del círculo. Entonces como eso no puede no ocurrir, están buscando con qué esquema político se fortalece el gobierno para este ataque a los trabajadores. Entonces, es importante tener en cuenta esto porque está en la agenda de Barry Bennett no está solamente Macri, no están solamente los gobernadores de Provincias Unidas y también están los peronistas. ¿Y qué lo prueba eso? Y lo prueba, por ejemplo, lo que acaba de suceder en la votación en el Congreso sobre los DNU, donde varios sectores del peronismo fueron al rescate del gobierno, haciendo una serie de trampas parlamentarias que son difíciles de percibir para el pueblo que este por ejemplo, se retira cuando se vota en particular un artículo o no dan quorum para otro, de manera tal que tenga que volver al Senado y no salga el proyecto parlamentario, pero se ve la colaboración del peronismo claramente en todo esto.

Entonces de fondo lo que estamos asistiendo es la intervención directa de un gobierno que ha cedido la soberanía, ya política y económica a Estados Unidos y que esto no le garantiza una estabilidad, porque acá vamos a tener que pasar por muchas crisis, no es que Estados Unidos va a poder vender 4 mil millones de dólares todos los meses para mantener el tipo de cambio como está en la Argentina. Incluso si eso lo hiciera, que no va a pasar, ¿cuál sería el resultado? Sería la quiebra de una parte importante del país, porque la economía capitalista que tiene Argentina, el tipo de cambio, tal cual está establecido hoy, lleva a la quiebra de una parte importante de la industria, del comercio, la caída de consumo, lo que estamos viendo, sería profundizar esta lenta agonía, pero Estados Unidos no va a poder poner 4 mil millones de dólares todos los meses, que es lo que más o menos están perdiendo el Banco Central si uno ve que hemos perdido los dólares del blanqueo, si uno ve cómo perdió los dólares de la cosecha y si uno ve cómo perdió los dólares del FMI.

Entonces vamos a momentos decisivos y ese momento decisivo tiene que expresarse también al momento de la votación, porque en la votación la única fuerza política que se enfrenta decididamente al imperialismo norteamericano es el Frente de Izquierda y eso lo tenemos que decir claramente: que los votos al Frente de Izquierda son los votos para repudiar estos pactos coloniales, porque no lo va a hacer Kicillof que fue el que armó el acuerdo para que entregue la gran gran multinacional de petróleo norteamericano Chevron a Vaca Muerta, no van a ser ellos, sino tienen que ser la izquierda y los trabajadores. Y la pelea que se vive viene Argentina va a ser una pelea muy importante y una gran votación de la izquierda le va a dar la legitimidad necesaria para poder jugar un papel relevante en la crisis que se viene.

El femicida Pablo Laurta y la agenda reaccionaria de Milei
El asesino participó de encuentros con Agustín Laje y Nicolás Márquez, asesores del presidente e ideólogos del odio a las mujeres. -
prensaobrera.com
"No seamos una estrella más de la bandera yanqui", el Frente de Izquierda repudia la cumbre Trump-Milei
Con un acto frente al Ministerio de Economía, donde hablará Gabriel Solano, rechazará la entrega colonial de Argentina. -
prensaobrera.com