Políticas
2/5/2024
Editorial
No está dicha la última palabra, luchemos para derrotar la reforma esclavista de la Ley Bases
Impulsemos una gran campaña por un paro activo frente al tratamiento en el Senado.
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@ojoobrerofotografia
La llamada “Ley de bases”, votada en la Cámara de Diputados este martes 30, es un golpe enorme para los trabajadores y todo el pueblo argentino. La población se va enterando, azorada, de todos los detalles de este proyecto nefasto, pactado entre gallos y medianoche con la oposición colaboracionista antes de llevarlo al recinto. La gran movilización del Primero de Mayo, de la CGT, tradujo el rechazo de las bases del movimiento obrero a esta ley, y mostró que la burocracia no tiene ningún mandato para negociar esta entrega. Pero no se puede soslayar la existencia de un clima de agitación que se está abriendo paso en la población y que empieza a contagiar también al movimiento obrero. La CGT ratificó la convocatoria al paro del 9.
La columna del sindicalismo combativo y la izquierda jugó un rol importante colocando -en volantes y con cantos y consignas que recogieron un gran apoyo- la necesidad de derrotar la ley con un paro activo nacional cuando se trate. Luego, el acto del sindicalismo combativo, los sectores en lucha y la izquierda, en la Plaza de Mayo, planteó con fuerza la necesidad de un paro activo nacional el día que se trate en el Senado la Ley. Esta perspectiva tiene una enorme vigencia luego de la enorme movilización contra el ajuste a la universidad pública, que con un millón de personas en las calles de todo el país le dio un fuerte golpe al gobierno de Milei.
Es que va creciendo la indignación a medida que circulan los detalles ocultos en el proyecto de Ley. Como denunció Romina Del Plá y todo el bloque del FIT-U en el Congreso es obscena la transferencia de recursos en favor del gran capital, que obtuvo moratorias amplias y premios al lavado, rebaja de bienes personales, beneficios para las inversiones mineras, libertad para aumentar los precios del petróleo, entre otras prebendas. Y contrasta brutalmente con los ataques a todos los derechos de la población.
Como viene denunciando el sindicalismo combativo, el proyecto golpea la organización sindical en los lugares de trabajo, eliminando las reinstalaciones de delegados o personal despedido por discriminación gremial o de otro tipo. Este ataque apunta a desmantelar la organización de las comisiones internas y cuerpos de delegados. Este objetivo se viene llevando adelante con complicidad de la propia burocracia sindical, que en muchos casos colabora con las patronales en el despido de activistas.
El proyecto ataca el derecho a jubilarse de quienes trabajaron no registrados. Eliminan la moratoria los mismos que propician el trabajo no registrado, para el cual se eliminan las multas, dando carta blanca a los abusos patronales. Un ataque que viene siendo denunciado por las movilizaciones de jubilados que explican incansablemente el rol de todos los gobiernos en desfinanciar el sistema jubilatorio y hundir las jubilaciones en la miseria.
Se anulan los derechos laborales para quienes trabajen en empresas de hasta cinco trabajadores, que serán considerados “colaboradores”, lo cual abre paso también a una ampliación de la tercerización en las grandes empresas. Se amplía a 8 meses el período de prueba, sin ningún tipo de derechos. Se elimina la estabilidad del empleo público. Se autorizan facultades extraordinarias a Milei para avanzar en privatizaciones clave, comenzando por Aerolíneas Argentinas, y disolución de entidades públicas, como el Inti. Mientras al gran capital y a los millonarios se los premia con rebajas de impuestos, vuelve el impuesto al salario para los trabajadores bajo convenio. Y ojo, no es sólo el $1,8 millón en el Mínimo No Imponible para el bruto de los solteros, es mucho más porque entran viáticos, extras, todo lo que va en el recibo. Los estatales son fuertemente golpeados y es fundamental una campaña en todas las reparticiones para impulsar el paro nacional cuando se trate, contra la política de las burocracias de ATE y UPCN que no movieron un dedo contra la aprobación de la ley, y negociaron abiertamente listas de despidos en las reparticiones.
Una campaña por paro activo nacional contra la Ley
La diferencia entre la aprobación del proyecto en Diputados ahora y su rechazo en febrero fue la gran presión del gran capital sobre todos los sectores políticos para habilitar el tratamiento, a pesar de los ataques innumerables del gobierno de Milei contra las provincias y el pueblo que los diputados dicen representar. Fueron afinando los caminos de la confiscación a los trabajadores con los gobernadores, así llegó la vuelta de Ganancias, otro golpazo al bolsillo popular. Fue el canje en lugar de las retenciones. Así, la UCR le dio los votos a este aval enorme al gobierno que sigue hundiendo en la miseria presupuestaria a las universidades nacionales. Los diputados peronistas de Catamarca y Salta avalaron el régimen de grandes inversiones (Rigi) que es un festival de exenciones y carta blanca para el capital minero. Carta blanca para la contaminación y la destrucción de la Cordillera. Todo el bloque del peronismo posó de opositor sin llamar a movilizar ni plantarse contra un proyecto que favorece a las oligarquías locales para las que gobiernan sus gobernadores. La perspectiva de movilizar contra la Ley estuvo ausente del discurso de Cristina días antes, también de Grabois que se dedicó, días antes, a “aconsejar” a Milei. Ni hablar de la CGT que negoció artículos sottovoce a través del bloque de Pichetto a cambio de no decretar un paro activo y movilización para rodear el Congreso el día de la aprobación.
La oposición patronal jugó abiertamente un rol de freno, días después de que una enorme movilización de un millón de personas, con docentes, no docentes y estudiantes de las universidades públicas a la cabeza, le diera un enorme golpe al gobierno de Milei. Así las cosas, la movilización frente al Congreso la bancó la izquierda, el sindicalismo combativo, y el movimiento piquetero. El aval al tratamiento de la ley sin lucha fue una enorme concesión a un gobierno que venía golpeado y que buscó anotarse un poroto mostrando gobernabilidad con la aprobación de la ley, luego de la gran movilización.
Por paro activo y plan de lucha
Los números del gobierno están justos en el Senado. Y puede haber cambios en torno al impuesto al tabaco por disputas capitalistas en el sector y aún algún cambio en Ganancias. Pero la burguesía apoya esta ley de conjunto y especialmente por la enorme conquista patronal que significa la reforma laboral que incluye. El problema son las calles, las masas, lo probó la reacción ante el ataque a las universidades. En ese plano, si tocan una coma en el Senado, vuelve a Diputados prolongando la agitación y dando oportunidades que el movimiento popular debe aprovechar. El gobierno sólo puede salirse con la suya con la enorme complicidad de la oposición patronal y de la burocracia sindical. Por eso, la tarea de la hora es salir a explicar lugar por lugar los efectos de esta ley, llamando a movilizarse. Hay que impulsar asambleas y reuniones entre los estatales, para frenar la liquidación de la estabilidad laboral. Con todo el reagrupamiento de jubilados. Hay que recorrer las fábricas explicando cómo el proyecto refuerza la tercerización, el trabajo en negro y revienta la posibilidad de organizarse.
Un escenario central de esta campaña serán las universidades, que vienen movilizadas contra el gobierno por la liquidación del presupuesto. Además de todos los agravios a la juventud contenidos en la ley, su aprobación va a reforzar al gobierno en su política de ajuste. Es necesario pasar masivamente por los cursos, impulsar asambleas y convocar a movilizar al senado cuando se trate el proyecto.
En los próximos días, el movimiento piquetero definirá una jornada de lucha nacional contra la eliminación de los comedores y merenderos. La ley también los golpea, eliminando el derecho a la obra social para el monotributo social. En los barrios crece el hambre y la tarea de las organizaciones piqueteras de impulsar la lucha contra la miseria las pondrá en la primera línea de lucha contra la ley.
Los aceiteros pararon e impulsan parar y movilizarse junto a otros sindicatos en el cordón industrial y exportador de Rosario contra la Ley. El 6, para la CATT, aunque la UTA haya anunciado un carnereaje, contra la vuelta del impuesto a los salarios. El Sutna va al paro de 24 horas el 7 de mayo, por su paritaria y contra todo el paquete antiobrero.
En ese cuadro, el paro del 9, como todo paro nacional es un choque, pegará y hay que salir a garantizarlo y exigir que sea activo, lo que supone ampliarlo a 36 horas. No obstante lo cual, si se mantiene en 24 horas tenemos que impulsar que el activismo se movilice de todas las maneras posibles.
Contra la política de la burocracia de “administrar” las medidas de lucha en lugar de propiciar un golpe certero contra la política del gobierno con un plan de lucha en regla, planteamos impulsar un paro activo y plan de lucha cuando se trate el proyecto, impulsemos una campaña y movilización masiva con este objetivo.