La semana pasada concluyó con una concentración en Salta capital frente a Casa de Gobierno, que impuso al gabinete en pleno que reciba a los representantes de la autoconvocatoria contra el tarifazo de Orán y San Martín. La delegación de Orán llegaba luego de que la noche anterior una nueva caravana multitudinaria apoyara la lucha. Dos días antes, la jornada piquetera nacional contra el despido de 160.000 compañeros había tomado el reclamo de los pueblos para que caiga el tarifazo y se aplique un descuento del 80% por zonas calientes, sellando la unidad de los reclamos de los desocupados con el resto de las víctimas del ajuste.

Los ministros tuvieron que comprometerse ante los delegados de los pueblos en consultarlos antes del 13/2 sobre los alcances del decreto de zona caliente. La cuestión es central porque los vecinos, que ya conquistaron que la tarifa se congele por el lapso de seis meses a valores de noviembre, previos al último tarifazo, plantean que la rebaja permanente por zona caliente tiene que alcanzar al 80% de las facturas por todo concepto y para todos los usuarios. De imponerse, este reclamo sería una conquista de alcance histórico. La lucha ha instalado muy fuerte también el reclamo para que se vaya Edesa y el servicio sea estatizado bajo control de los trabajadores y usuarios.

La asamblea de Orán que se consolidó como un frente único de organizaciones de desocupados, docentes, comerciantes  y vecinos, aprobó anoche mantener  el aguante en el acampe hasta el 13/2. Esta asamblea  es la que ha permitido superar todas las maniobras y aprietes del gobierno, de los legisladores y del ente regulador para quebrar la lucha. Extender estos métodos a todos los pueblos del norte provincial es la clave de una victoria total del movimiento. Con ese propósito estamos interviniendo los compañeros del Partido Obrero en unos cuatro pueblos del norte y con actividades de apoyo en Salta capital.

Una lucha que divide aguas

El tarifazo es sostenido por todas las fracciones políticas de gobierno a ambos lados de la grieta, porque es condición central del arreglo con el FMI, que apoyan todas ellas. Otro tanto vale para la complicidad con empresas contratistas completamente parasitarias, que ofrecen un mal servicio y no invierten un peso, como Edesa, que es emblema de los negociados del poder, desde el mismo momento de la privatización del servicio hace ya 27 años. Esto explica que, paso a paso, se fuera repudiando a los representantes de todas estas facciones en el desarrollo de esta lucha, que también puso de manifiesto que no debe postergarse ningún reclamo popular en nombre de que en Salta va a haber elecciones anticipadas el 14 de mayo, con autoridades que recién van a asumir en diciembre….

Sáenz viene de haber tenido una crisis de gabinete a cuatro meses de la elección. Tuvo que cambiar al presidente de Aguas del Norte en medio de una crisis total de abastecimiento por falta de inversión, por robo y corrupción de los pocos fondos destinados a obras en la materia y al  ministro de Salud, en medio de las denuncias por la falta de profesionales en todo el interior provincial.

En este marco, y tratando de explotar demagógicamente la crisis en el oficialismo, acaba de formarse el frente “Avancemos”, un cambalache de hombres del régimen que gobierna Salta hace 28 años. Dicen estar del lado de los reclamos populares por el agua y contra el tarifazo… como si estos agravios no tuvieran nada que ver con el ajuste que se aplica en todo el país y que ellos apoyan en un 100%. El frente reúne a Estrada, actual diputado nacional y exministro de Economía que aplastara los salarios públicos bajo el gobierno de Urtubey (puesto por La Cámpora en un puesto clave del ministerio de Wado de Pedro por otros dos años); Zapata, diputado nacional del interbloque de JxC, referente del olmedismo que en Salta es la principal pieza de Milei y Biella (quien, con un partido provincial, fue socio de la UCR, de Juntos por el Cambio y también de Sáenz alternativamente). El partido de la Victoria se reúne el 10/2 para decidir si es parte de este enjendro o será otra colectora del frente reeleccionista de Sáenz.

La versión oficial de Juntos por el Cambio ha quedado deshilachada, formada por la fracción oficial de la UCR y el PRO. Ambos partidos irán divididos en los tres frentes patronales que intercambian y seguirán intercambiando  sus jugadores hasta el mismo momento de cerrar las listas. Todos tienen el mismo ADN, por eso pueden mudarse de frente solo por conveniencia en cuanto al acceso a los cargos. Todos bancan el régimen oligárquico responsable de la pobreza extrema y ahora el saqueo del litio en favor de las multinacionales.

El Frente Grande y algunos grupos piqueteros kirchneristas han formado un cuarto frente “para vivir bien”. Tratan de sostener la ficción de que el kirchnerismo podría ser una alternativa popular cuando sostiene a Massa y a todo el paquete del FMI.

Los desafíos de la izquierda

En el campo de la izquierda se nos plantea la tarea de multiplicar los esfuerzos por el triunfo a la lucha de los vecinos del norte y de todas las expresiones de lucha de los trabajadores, rechazando la idea de que los reclamos deban postergarse en nombre de que hay elecciones -lo que supondría postergar los reclamos en nombre de un cambio de autoridades que recién ejercerán el poder dentro de once meses.

Debemos realizar además todos los esfuerzos para que se constituya el Frente de Izquierda Unidad y que los trabajadores puedan tener también en las elecciones una alternativa independiente, frente a todas las alianzas patronales, para reforzar con el voto las batallas que se están dando para derrotar el ajuste. Que la experiencia de estas luchas contribuya a desarrollar una fuerza social que supere a las direcciones oficialistas en los sindicatos y en el movimiento piquetero, que multiplique las autoconvocatorias independientes. Es decir que la conquista del voto y eventuales bancadas obreras sea parte de una preparación política para triunfar en las  grandes batallas que se van a librar en el terreno de la lucha de clases, para terminar con los políticos capitalistas y abrir paso a un gobierno de los trabajadores.

Tenemos una polémica abierta con los compañeros del MST que podría frustrar la formación del FIT-U, porque entendemos que las candidaturas deben ser coherentes con estos propósitos; de allí que rechazamos que Samuel Huerga, actual concejal de Oran que fuera electo por Política Obrera, pueda ser candidato del FIT-U, porque se ha incorporado al MST sin exponer critica alguna a su pacto con varias fracciones de los partidos capitalistas para acceder a la presidencia del concejo deliberante de Oran. Se trata de un asunto de principios: nuestros parlamentarios deben ser un bastión de defensa de la independencia política de la clase obrera y servir para desarrollar la conciencia  de que el triunfo de la clase trabajadora no pasa por escalar cargos en la burocracia del Estado sino en desarrollar una fuerza social revolucionaria.

En Salta, como en todo el país, seguimos proponiendo hacer un congreso abierto del FIT-U para discutir la intervención común y dar participación a toda una camada de luchadores que emergen en las luchas contra el ajuste. Los militantes del Partido Obrero, reunidos en plenario provincial, han propuesto a Gabriela Cerrano y a Claudio Del Plá como candidatos del frente a legisladora y gobernador respectivamente. Hemos planteado desde noviembre e insistimos que, si no hay consenso, podemos hacer una elección interna entre los afiliados de la izquierda y los independientes para ordenar las listas.