Políticas

5/10/2021

Congreso Nacional

Sesión por la Ley de Etiquetado Frontal: una pantomima electoral en Diputados

No se reunió el quórum. Hubo ausencias incluso en el propio Frente de Todos.

La sesión de la Cámara de Diputados convocada para el día de hoy por el oficialismo tenía en su temario el proyecto de Ley de Etiquetado Frontal junto a otros proyectos sobre las condiciones de personas en situación de calle y de los trabajadores vitivinícolas. La sesión se levantó por falta de quórum, al estar presentes 122 diputados. Los que se ausentaron fueron los legisladores de Juntos por el Cambio, aquellos que responden al gobernador cordobés Juan Schiaretti y cinco integrantes del Frente de Todos.

Los diputados oficialistas que se ausentaron son José Luis Martiarena (de Jujuy), Karim Alume Sbodio (San Luis), Juan Mosqueda (Chaco), Alcira Figueroa (Salta) y Graciela Navarro (Santiago del Estero).

El proyecto en cuestión había sido aprobado casi por unanimidad en el Senado en julio de este año. Solo las senadoras tucumanas Silvia Elías de Pérez (radicalismo) y Beatriz Mirkin (Frente de Todos) junto a la riojana Clara Vega (interbloque Parlamentario Federal) habían votado en contra por considerar que afectaba la industria azucarera de sus provincias. Pero, como sucede habitualmente cuando se hace demagogia con temas de cierto interés popular, después de la media sanción fue cajoneado y llevado ahora al recinto solo para ser sacrificado en una maniobra de campaña electoral.

El Frente de Todos adjudica a Juntos por el Cambio la responsabilidad de no haber podido aprobar la Ley de Etiquetado. La oposición atribuye al oficialismo “cortarse solo” con el temario de la sesión especial y no tratar otros temas de su interés, como la Ley de Promoción Bovina o el debate en comisiones de la implementación de una boleta única para las elecciones. Lo cierto es que hay sectores de peso dentro del FdT que se oponen a esta norma en defensa de los ingenios azucareros y las alimenticias, empezando por el jefe de Gabinete Juan Manzur. Este equilibrio de Nash, donde ninguno de los dos sectores tiene mayores beneficios al moverse de su posición, se terminó llevando puesto el proyecto.

La pantomima parlamentaria tenía el objetivo por eso de contrarrestar la evidencia de que la agenda legislativa del gobierno está dominada por el ajuste del Presupuesto 2022 y una serie de regímenes de beneficios al gran capital, todo en el marco de una orientación dirigida a cerrar el acuerdo con el FMI. En ese cuadro se inscribieron las presentaciones con el propio Alberto Fernández de la Ley de Agroindustria y la Ley de Hidrocarburos. El intento del oficialismo de mostrarse tomando un reclamo progresivo, y simulando un choque con la oposición en función de ello, pretende ocultar que unos y otros coinciden en el aspecto central de firmar un nuevo programa fondomonetarista.

Está claro que los partidos que gobernaron el país y nos llevaron a la crisis actual no tienen nada para ofrecerle a quienes luchan por una mejor alimentación de la población, porque sostiene un régimen de hambre. Solo el Frente de Izquierda Unidad propone enfrentar esta orientación, y con esa convicción estuvo presente en la movilización que reclamó la sanción de la Ley de Etiquetado. Como todos los reclamos, este también se ganará en las calles.