El "valija-gate" es la punta del iceberg de una oscura trama que sucesivas revelaciones vinculan a operaciones de inteligencia y conexiones con Estados Unidos. Leonardo Scatturice, el dueño del jet en el que Laura Arrieta llegó al país transportando valijas de contenido misterioso, es un personaje ligado a Santiago Caputo y de relaciones con Trump, que acumula contratos con el gobierno argentino.

Scatturice controla unas 50 empresas, varias con contratos en Educación, la Anses y la Side. Su firma Tactic llegó a un "acuerdo de lobby con el Estado argentino para asistirlo en la coordinación de reuniones entre oficiales de Argentina y Estados Unidos en temas de comercio e inversión" (Clarín, 15/7). Algunos de sus negocios se mantuvieron durante varios gobiernos, como lo demuestra su registro en el sistema COMPRAR desde el 19 de agosto de 2016.

Recientemente compró Fly Bondi, empresa líder en precarización laboral en la aviación, para la que ya obtuvo licitaciones millonarias. Hasta ahora, ha invertido casi 400 millones de dólares en el rubro. También posee contratos millonarios con el Ministerio de Economía de Luis Caputo: en lo que va del año, ganó cuatro licitaciones por $2.347.963.000 y estuvo a punto de cerrar un acuerdo con Trenes Argentinos, frustrado supuestamente por su exposición mediática tras el escándalo.

Scatturice está vinculado a Juan Pablo Pinto, expiloto de Alberto Fernández, quien declaró que 5 de las 10 valijas transportadas en el jet "eran de su propiedad" y que Arrieta solo llevaba "una cartera Louis Vuitton y un equipaje de mano". Arrieta, por su parte, accedió a puestos gerenciales en empresas de Scatturice (OCP Tech y COC Global Enterprise) y en la CPAC (la conferencia internacional de ultraderecha organizada por Trump). Scatturice, además, tiene lazos con Barry Benner, uno de los estrategas del magnate republicano, lo que le permitió organizar la filial argentina del evento.

Gracias a su relación con la familia Colunga (vinculada a los Macri), el empresario adquirió dos aviones ejecutivos y una compañía estadounidense de vuelos privados. A través de Caputo, impulsó el ingreso de Diego Colunga al directorio de Aerolíneas Argentinas.

Sus conexiones abarcan algunas de las arterias más sensibles del gobierno: economía e inteligencia. Scatturice no es nuevo en las arenas turbias de la política: está implicado en la causa Dark Star, iniciada para investigar espionaje ilegal y que habría sido orquestada por Jaime Stiuso contra espías opositores (estaba enfrentado a Fernando Pocino, exjefe de los espías de Cristina Kirchner).

Las pesquisas del "valija-gate" revelan omisiones en el control del equipaje e inconsistencias en los registros migratorios de tripulantes, pasajeros y en el origen del vuelo. Algunas versiones alertan que se trata de un caso de narcotráfico, hipótesis respaldada en que el avión perteneció a Fred Machado, el narco que financiaba a José Luis Espert y actualmente está preso por lavado, tráfico de cocaína y fraude virtual.

Milei en una encrucijada

Editorial de Gabriel Solano en 14 Toneladas T2E24. -

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