El día lunes 28 de Septiembre, un centenar de vecinos, familias que están luchando por el derecho a la tierra y la vivienda marcharon desde el shoping de San Justo hasta las puertas del municipio. Al canto de “tierra si, desalojos no”, es que se plantaron frente a la casa municipal dispuestos a plantearle al intendente Fernando Espinoza que los atienda.

No a los desalojos

El intendente  no solo hace oídos sordos, sino que realiza los ataques más bajos. Nuevamente vuelve a dejar sin luz a los vecinos que están en una toma.

Lo hicieron hace algunos meses en el crudo invierno de pandemia y miseria en el Barrio 17 de Septiembre en la Ruta 1001, llevando esta semana los vecinos decidieron cortar en pleno las dos rutas que cruzan el predio. Ahora lo hace con la toma del Barrio Los Ceibos de González Catán. Desde que comenzó la toma el “diálogo” fue cercar el barrio con policías bonaerenses y gendarmes que actúan de manera hostil, prohibiendo a las familias entrar con bidones de agua u ollas con alimentos en los predios ocupados.

 

La movilización del día lunes fue recibida por el  municipio con un cordón policial frente de la dependencia.

El cuerpo de delegados presentó un petitorio y la única respuesta de las autoridades fue que “elevarían el petitorio”.

Los vecinos fueron acompañados de organizaciones como el combativo SUTEBA  distrital, el Polo Obrero, entre otras. También se encontraban presentes vecinos del Barrio Porvenir de Rafael Castillo que sufrió desalojo y amedrentamiento policial, también del Barrio 17 de Septiembre de Ruta 1001, y de Villa Las Antenas por la recuperación de viviendas abandonadas.

Se abre paso la perspectiva de una coordinación local por el derecho a la tierra y la vivienda,  acompañada por la puesta en pie y reforzamiento de cuerpos de delegados combativos e independientes. Es el camino que marca Guernica, en el mismo momento en que se desarrollaba esta movilización, también marchaban hacia la Gobernación los vecinos de Presidente Perón, para rechazar los chantajes de Kicillof en la toma, donde han ofrecido dinero a los vecinos para que abandonen la lucha por vivienda digna.

La lucha por este derecho elemental comienza a tomar forma y a copar las calles de la provincia de buenos aires. Planteamos la coordinación de esta lucha, rodeándolas de solidaridad, y de un congreso de la tierra y la vivienda con un plan de lucha nacional para ganar. Porque en esta lucha de clases, si ganan los vecinos, la clase trabajadora estará en mejores condiciones para ganar el resto de las reivindicaciones.

En la Matanza se prepara una nueva jornada de lucha la semana entrante que reagrupará todos los reclamos del distrito,  que parte de la denuncia por la contaminación, pasando por el reclamos de los feriantes del galpón 3 contra el desalojo, la recuperación de los puestos de trabajo de los feriantes y un subsidio para palear la crisis, y por supuesto el reclamo por la tierra para vivir.

Desde el Polo Obrero y el Partido Obrero, presentes como siempre en el reclamo genuino de los trabajadores, estamos a disposición de esta lucha y el apoyo permanente en los reclamos.