Salud

29/5/2021

Córdoba: la vuelta a presencialidad escolar en el nivel inicial es antisanitaria

La docencia a nivel provincial se organiza, porque a quienes gobiernan no les importa la salud ni la educación.

docente de Villa María (Córdoba)

El gobierno de la provincia de Córdoba anunció que levantará restricciones y que se retornará a la presencialidad en el nivel inicial educativo. En momentos en que todos los indicadores están en rojo la medida tomada por quienes gobiernan no hará más que presionar sobre un sistema de salud en estado crítico. En ese sentido, ya vimos en la ciudad imágenes de ambulancias haciendo fila esperando que se desocupen camas.

Sin embargo, “el día lunes 31 de mayo el dictado de clases retomará a la modalidad bimodal, es decir, a las burbujas presenciales y virtuales alternativas”, comunicaron fuentes oficiales a Cadena 3. Esta medida en medio de la mayor pandemia que haya azotado a la humanidad hasta la fecha, afectando la salud y la vida de millones de personas en todo el planeta, pone en evidencia el desinterés del gobernador Schiaretti, del ministro de Educación Grahovac y de su aliada, la conducción de Uepc, abren escuelas sin siquiera garantizar la inoculación de la docencia de conjunto.

Se vuelve a la presencialidad en el nivel inicial, y no en los otros niveles educativos. Pero de acuerdo al relevamiento del Ministerio de Educación, de la segunda quincena de abril: “si se analiza a qué nivel educativo (de los obligatorios del sistema, que no incluye a 20 activaciones del nivel Superior) pertenecen las escuelas en las que se activó el protocolo, sin distinguir si se trata de escuelas estatales o privadas e incluyendo tanto a las de modalidad especial como a las escuelas normales y las técnicas secundarias, tenemos que los casos (5.250) se distribuyen de la siguiente manera: nivel inicial, 30,8% (791 casos), nivel primario, 36,4% (1916) y secundario, el 48,3%”.

Los datos fueron publicados en El Diario, medio en el que se dio cuenta que “del total de casos informados, 3.638 correspondieron a estudiantes (69%), y 1.317docentes (25%); el resto se dividió entre directivos y no docentes”. Además, en la provincia, y solo en las primeras semanas de abril se activó el protocolo en 5.270 escuelas.

Quienes gobiernan ubican al trabajo docente también como “actividad esencial”, pero no se garantizan las condiciones para desenvolverla. A la docencia le pagan por debajo de la línea de pobreza, mientras que las y los estudiantes tampoco tienen cubierta la conectividad. Y para peor sus números los testimonios que indican que hay estudiantes que no se alimentan como corresponde, con hambre no se puede estudiar.

En este marco se vuelve a la presencialidad, cuando no están dadas las condiciones para enfrentar la segunda ola de coronavirus en las escuelas públicas, totalmente desmanteladas y precarizadas de los recursos necesarios desde hace décadas.

Nosotros, los docentes, lo que más queremos es la presencialidad; pero en estos momentos donde han recrudecido ferozmente los contagios y las muertes, exigimos la suspensión de la misma por una virtualidad temporal; además, condiciones sanitarias y de salubridad, vacunas, salarios y sustanciación de los cientos de miles de cargos docentes que faltan para garantizar la educación de las y los alumnos, cobertura de equipos y de conexión para toda la comunidad educativa.

Volver a las aulas, con contagios cercanos a los 5.000, y el aumento de la letalidad es un acto de deshumanización de esta política del gobierno cordobés que defiende el interés de las grandes patronales. En Córdoba los docentes somos una actividad esencial ¿para qué? ¿para quién? Si hay circulación comunitaria del virus y no se toman medidas para evitar que la docencia y las y los estudiantes se contagien.

En este marco, es claro que se pretende mantener las escuelas abiertas mientras los padres trabajan y siguen manteniendo a los más ricos; ya que la muerte de un trabajador es una circunstancia en su política depredadora.

“Estamos en el peor momento de la pandemia”, dijo el presidente Alberto Fernández. Pero es el resultado de su gestión puesto que es evidente un colapso sanitario. Además, el ajuste y restricciones se aplican para las familias trabajadores.

Revertir este escenario crítico requiere de una intervención independiente. En ese sentido avanza la organización de la docencia contra el retorno a la presencialidad antisanitaria. En ese sentido, un plenario de la docencia autoconvocada en asamblea impulsa la convocatoria al paro, y plan de lucha, para que intervenga la docencia. Para construir esa perspectiva es que se plantea una bicicleteada y caravana para el próximo lunes en la sede de Upec, desde las 17 horas.

Esta propuesta está en marcha mediante autoconvocatorias, asambleas y el debate de un programa para unificar a la docencia. En Villa Maria también podemos recorrer esta misma perspectiva. Solo lxs trabajadores pueden darle una salida a la crisis.