Salud

10/8/2020

Masacre patronal: crecen contagios y muertes por coronavirus en el Ingenio Ledesma

La empresa actúa como un foco de propagación sobre la desbordada localidad de Libertador General San Martín. En la provincia de Jujuy, ya son 3.665 casos positivos y 92 las muertes.

Tras casi tres meses sin casos positivos, el sistema de salud de la provincia de Jujuy se encuentra ahora colapsado por el avance del coronavirus, como ha debido reconocer el gobernador Gerardo Morales -que venía jactándose de tener controlada la situación.

Desde el gobierno sostienen que el crecimiento de los contagios se debe a la forma en que la gente se comporta, colocando el problema en la responsabilidad individual. Pero es claro que los lugares de trabajo son la mayor fuente de contagios, como pone de manifiesto la situación catastrófica de Libertador General San Martín, donde se encuentra el Ingenio Ledesma.

En la empresa de los Blaquier ya hay 221 trabajadores que dieron positivo y siete muertos, a los que hay que sumarle al menos dos familiares directos también fallecidos.

Desde el Sindicato de Obreros y Empleados del Azúcar del Ingenio Ledesma (Soeail) denuncian que el complejo industrial “se ha convertido en un foco de contagio y propagación del virus“. La localidad de Libertador ya suma (acorde a Salta12-Página12) 14 muertes desde el 1º de agosto, con personas que han fallecido en sus casas sin recibir atención, y denuncias de vecinos de que nadie va a retirar los cadáveres y “los descubren por el olor” (Anred, 8/8). El hospital de la zona se encuentra al 110% de su capacidad (ídem), y la saturación se extiende al sistema privado, lo que podría llevar en breve a que los médicos tengan que empezar a elegir a quien le dan o no un respirador. Muchos, con síntomas de Covid-19 o con otras enfermedades, deben hacer hacer todo tipo de artilugios para poder ir a la capital provincial, San Salvador, a ser atendidos.

Tras la muerte de cuatro trabajadores del ingenio, el Soeail fue un paro de 24 horas. A su turno, ha denunciado penalmente a la empresa por  negligencia y propagación del virus. Obreros denuncian que ante la presentación de síntomas, la empresa les otorgaba una licencia de 14 días, luego de los cuales volvían a su lugar de trabajo sin que se les realice ningún testeo. Si bien la patronal ha tenido que parar algunas actividades por la falta de personal, no tiene ninguna voluntad de detener la producción frente al avance brutal del virus dentro de la empresa. Pero esta falta de medidas de resguardo puede terminar llevando contradictoriamente, con un mayor crecimiento de los casos, a una parálisis más grande de la producción de la empresa, mostrando los resultados anárquicos de la avaricia patronal.

Un colapso general (y la receta: automedicación)

La situación de Libertador General San Martín es la cara más aguda de una crisis sanitaria más general en la provincia. Morales ha debido retroceder a la fase 1 de aislamiento y en los últimos días ha reconocido parte de este colapso, como el hecho de que se encuentran ocupadas 54 de las 60 camas disponibles de terapia intensiva.

Ante esta situación, el gobernador ha salido a pedir a las obras sociales y a la salud privada que presten colaboración. Estos pedidos y quejas de Morales revelan que, pese a la presentación rimbombante de medidas relativas a ambulancias y de algunos préstamos de respiradores de los privados, no existe una centralización del sistema sanitario, algo que está haciendo ver sus efectos perniciosos.

A su turno, la falta de personal es integral: como denunciaron los propios trabajadores, muchos agentes de la salud pública trabajan también en el sector privado. Incluso el gobierno señala que tendría más disponibilidad de camas para terapia intensiva, pero no tiene los trabajadores especialistas; y ha salido a solicitarlos a otras provincias.

El accionar antipopular del gobierno se hace claro en estos déficits y en la falta de respuestas a los trabajadores de la salud pública, que vienen llevando adelante distintas iniciativas de lucha en defensa del salario, contra la precarización laboral y por la provisión de insumos. Pero también en anuncios del Ejecutivo, como el que recoge el portal Jujuy al momento este domingo, que distribuiría un kit de medicamentos para que las personas que dieron positivo se automediquen, algo desaconsejado por parte del Ministerio de Salud de la Nación y en general por la comunidad científica. Morales habría dicho, según este medio, que ante la aparición de síntomas “se metan los antibioticos de entrada nomás”.

Con un registro oficial hasta el momento, de 92 muertos y 3.635 infectados y una tasa diaria de contagios que este domingo alcanzó los 245, se revela como inaplazable la centralización de todo el sistema de salud bajo un mando único, garantizándose todos los recursos necesarios para la atención a la población y, junto con ello, un control popular de la cuarentena.