Sindicales

29/11/2022

6D: transformemos la jornada trucha de la CTA en una acción de lucha real

Reunión de la CTA.

La Comisión Ejecutiva Nacional de la CTA resolvió una “jornada nacional de protesta para el 6 de diciembre”. La medida tiene por objeto “rechazar” lo acordado en el Consejo del Salario Mínimo, Vital y Móvil, ya que, según el comunicado de la CTA, “el salario de referencia hoy está por debajo de la línea de indigencia”.

En la jornada se insistirá, además, en el reclamo de un Salario Universal, un aumento de emergencia para trabajadores formales, informales, jubilados y jubiladas, terminar con la precariedad laboral, y conseguir la aprobación de la Ley Previsional.

La acción se definió en una reunión que se realizó en la sede nacional de la central, a puertas cerradas y de espaldas a cualquier deliberación de las y los trabajadores. En el marco de esa jornada, se propuso que en CABA haya una movilización desde el Ministerio de Desarrollo Social al de Salud, y luego al Ministerio de Economía. A su vez, se dice que habrá movilizaciones en todo el país.

Cabe aclarar que la CTA-A no llama al paro como parte de la jornada de lucha, con lo cual desde el vamos la burocracia de Godoy tiene prevista una movilización de aparato en el mejor de los casos. En el mismo comunicado, se plantea que “se convocará a sumarse a todas las organizaciones que busquen expresarse en la calle””. ¡Tarde llegaste CTA!

El mismo día que se reunió el Consejo del Salario (22 de noviembre), la Unidad Piquetera ganó las calles por un salario mínimo de $1400.000, trabajo genuino, y una jubilación que contemple el 82% móvil.

Kirchnerismo recargado

El nivel de integración de la CTA-A al gobierno ajustador es total. Recordemos que el mismo día que residentes y concurrentes del AMBA, junto a los docentes bonaerenses y los jubilados, se movilizaron a la Plaza de Mayo, Godoy y sus amigos estaban marchando al acto de “la jefa”, en el Estadio Único de La Plata.

Más aún, durante todo el proceso de lucha de los trabajadores de la salud, las dos CTAs brillaron por su ausencia, no han organizado a las centrales para apoyar a los médicos y al conjunto de los trabajadores del sector para llevar su lucha a la victoria.

La reunión del ejecutivo de la CTA discutió una agenda para el 2023, buscando nuevamente un lugarcito en el armado electoral oficialista, levantando una batería de puntos.

Desde la central se impulsa la “construcción de una movilización con los más diversos sectores para el 1 de febrero, por una democratización del sistema judicial, por la renuncia de la Corte Suprema; activar los debates sobre el cálculo de las jubilaciones y la revisión del sistema previsional en Argentina; la puesta en marcha de una campaña para lograr la reforma de la Ley de Asociaciones Sindicales; poner en marcha iniciativas para debatir la recuperación de la Ley de Medios, como una herramienta fundamental para la democratización de la comunicación y la estimulación de los medios populares”.

Como se ve, el sindicato dirigido por Godoy no tiene nada que envidiarle a los gordos de la CGT o la CTA de la embajada norteamericana encabezada por Yasky y Baradel. La burocracia de todos los colores pretende someter políticamente a las y los trabajadores detrás de las diversas variantes políticas patronales.

El 6D vamos por lo nuestro

El ajuste cada vez más agudo contra los trabajadores, llevado adelante por el gobierno de los Fernández y Massa, es enfrentado por importantes luchas. La victoria de los trabajadores del neumático con el Sutna a la cabeza, la rebelión de la salud con el triunfo de los residentes de CABA, los paros provinciales convocados por las seccionales del Suteba multicolor con un altísimo acatamiento a pesar del intento de bloqueo de Baradel, la creciente lucha del Garrahan y el Hospital Posadas, entre otras luchas, muestran la bronca que se extiende en numerosos sectores al calor de una inflación que evapora los salarios y hunde en la pobreza e indigencia a las y los trabajadores.

Es desde esa perspectiva que llamamos al conjunto del activismo independiente, a las y los trabajadores a transformar el “saludo a la bandera” que pretende la burocracia de la CTA-A el 6D, en una instancia de lucha, deliberación y organización independiente, por la agenda de los laburantes.

Por un paro nacional y un plan de lucha contra el ajuste del gobierno del FMI. Inmediata reapertura de paritarias. Salario inicial de $200.000, indexado por inflación (cláusula gatillo). 82% móvil para jubilades. Pase a planta permanente de todos los trabajadores precarizados. Abajo la tercerización laboral. Por el triunfo de todas las luchas.