Lleva 15 días la huelga general de los trabajadores de prensa de la agencia DYN. Los compañeros están planteando la recuperación de su salario, que ha caído un 40% en términos reales en el término de un año y un “sablazo” mayor con el plan “primavera”. El movimiento comenzó hace dos meses con medidas escalonadas y se ha transformado en la más grande cinchada por el salario entre los periodistas y las patronales. Si bien el salario es el detonante de esta extraordinaria lucha, en el plano más general está la intención de los monopolios (Clarín y Nación) de “redimensionar” la agencia a través de despidos, que empezaría con la cesantía de cincuenta compañeros.

La firmeza de esta huelga se mide en el comportamiento granítico de los 140 trabajadores, a pesar del “cerco” informativo que han tejido los patrones de los medios de información y del brutal aislamiento a que los han sometido la conducción de la UTPBA y los elencos burocráticos que van a disputar las elecciones en los próximos días. De la millonada de australes que el oficialismo de “tres caras” —Celeste, Azul y Blanca, Bordó y Azul— está invirtiendo en la campaña electoral, no se ha derivado un solo peso para la formación de un fondo de huelga para DYN.

Luego de 15 días y por presión de la lucha, se ha arrancado la convocatoria a un plenario de delegados del gremio. Puede ser la oportunidad de rodear la lucha con un movimiento de todo el gremio, y unificar el reclamo de DYN con todos los reclamos pendientes en las empresas, pero aquí no valen esperas. En cada lugar de trabajo son necesarios pronunciamientos, colectas, medidas de apoyo.

El triunfo de DYN hará más por el salario en prensa que todas las burocracias juntas que se disputan el gremio y que no tienen empacho en apostar a su derrota.