Sindicales
20/12/2024
RÍO NEGRO
Bariloche: trabajadores auxiliares de escuelas en pie de lucha y en alerta ante posibles despidos
Una gran respuesta implicó un primer recule del CPE. Hay que continuar la lucha ante la posibilidad de la no renovación de los contratos el 31/12.
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Foto: corresponsal.
Este martes 17, 280 trabajadores y trabajadoras auxiliares de servicio de diferentes escuelas de nuestra ciudad fueron notificados de que debían tomarse vacaciones anuales en forma obligatoria sin ninguna información sobre su futuro laboral. Tienen contratos precarios que finalizan este 31 de diciembre. La noticia causó enorme indignación entre las y los compañeros, denominados PSA, y entre la comunidad educativa de la ciudad. La respuesta de lucha no se hizo esperar.
Ocurre que inmediatamente se realizaron cortes de calles en diferentes establecimientos, convocatorias en las puertas de las escuelas, cartelería denunciando la situación y una rápida movilización al Consejo Escolar de la zona Andina. El pronunciamiento masivo de las escuelas de la ciudad fue contundente.
Frente a esta gran respuesta del colectivo de trabajadores porteros/as, la docencia y diferentes organizaciones y sindicatos de la ciudad, los funcionarios salieron a explicar que hubo una confusión y no habría despidos. Sin embargo, no hay nada escrito sobre la continuidad de contratos que finalizan este fin de año.
Es indudable que la maniobra de fondo de los funcionarios de Educación era utilizar el fin de año para imponer el golpe a las y los trabajadores y que la medida, disfrazada de vacaciones, prospere. Se trata de una política criminal que expone la motosierra del gobierno provincial, el cual ejecutó una política salarial de pobreza con sumas en negro y montos por debajo de la inflación. Es que no solo fue en Educación, sino también en Salud y numerosas áreas del Estado, desguazando los presupuestos y profundizando la persecución a las y los que luchan.
Así como la tentativa de despedir a 280 trabajadores y trabajadoras expone la política del gobierno, también la respuesta y la solidaridad refleja las enormes reservas de lucha que existen en el colectivo de trabajadores. Esto desmiente a las direcciones sindicales que, bajo el argumento de que “la gente no está para luchar” desenvuelven una política de contención en beneficio del gobierno. Es que el pronunciamiento colectivo y las acciones en concreto permitieron un primer recule del Estado.
Hay que aprovechar para ir a fondo y garantizar, mediante resolución escrita, que el conjunto de las y los compañeros/as continúe con sus puestos de trabajo. Junto a ello, urge el pase a planta para finalizar con el cuadro de precarización laboral.
Sigamos en alerta y profundicemos las acciones de lucha.