-Exclusivo de internet

Al menos tres delegados de Telecentro han sido agredidos físicamente por Sebastián Pierri, gerente de la empresa, cuando éstos repartían un volante con la consigna “Basta de tercerizaciones en Telecentro”.

El golpe de puño y la clásica “gatillada” con los dedos a modo de amenaza de muerte dejó al desnudo, una vez más, la impunidad empresaria y las formas en que estos grupos -en este caso el Pierri- se valen para defender, sostener y acrecentar el extraordinario negocio de las telecomunicaciones viabilizado en el triple play.

No es una “gatillada” más: se enmarca en el compromiso de la presidenta a los empresarios de mantener la “paz social”, atacando a un activismo que viene exigiendo el fin de la tercerización y que ha acentuado sus reclamos luego del asesinato de Mariano Ferreira a manos de una patota de la Unión Ferroviaria.

Pierri, viejo conocedor de impunidad y privilegios otorgados durante décadas en los distintos estratos del Estado y bajo todos los gobiernos, ha escrito una nueva página.

No le basta con el guiño K en varios municipios -monopolizados por el grupo Clarín- para utilizar y montar su red sobre alumbrado público sin ninguna inversión inicial; tampoco lo conforma la reciente homologación del CCT Uocra en el Ministerio de Trabajo, que permite contratar y subcontratar para tareas de televisión (instalaciones, montaje de red, etc.); no lo satisface armar una red de espionaje que incluye GPS en cada camioneta de servicio para acelerar los ritmos de trabajo. Lo mantiene ciego la pasión por obtener más, más y más ganancias a costa de la explotación de los trabajadores.

Párrafo aparte merece la Comisión Interna de Telecentro, la que bajó a anunciar lo sucedido 72 horas después de transcurridos los hechos y a informar que “los tercerizados son mayoría a esta altura dentro de la empresa y que había que hacer algo”, sin decir qué.

Varios compañeros salieron a reclamar medidas concretas y no aisladas en torno a la tercerización y a las condiciones de trabajo (herramientas, plus por chofer, plan de carreras, etc.).

Se impone la necesidad de realizar asambleas en todas las bases y votar un plan de lucha, el cual tenga como objetivo el pase a planta bajo convenio del Satsaid de todos los compañeros que están bajo distintas formas de contratación precaria.

Está en debate una medida de fuerza que rechace estas prácticas mafiosas y coloque sobre el tapete los intereses generales de los trabajadores de Telecentro.