La movilización extraordinaria, los paros masivos, la organización activa de las escuelas, y de los distintos colectivos de niveles y jubilado-as, y las asambleas de los autoconvocados han puesto en pie un movimiento sin precedentes en la docencia.

Este movimiento, en tres semanas, puso en jaque dos veces seguidas la política de ajuste salarial que habían acordado el gobierno y las principales conducciones sindicales de la provincia. El líder desplazado de la CGT y legislador oficialista, José Pihen, apareció como un parásito para pedir que se le reconozca a su gremio el aumento conseguido por la lucha docente. Esto a pesar de que el SEP firmó apresuradamente el acuerdo para sofocar esta lucha.

La asamblea departamental, en su versión más reaccionaria, no sólo aprobó nuevamente una propuesta que empobrece más a la docencia; también dio luz verde al ataque a los protagonistas de esta lucha. A pesar de que votó: “exigir al gobierno que se abstenga de realizar cualquier tipo de sanción económica o disciplinaria”, se automandató para que sea la conducción Celeste quien haga la tarea fina de aplicar esta medida disciplinaria. Fue Monserrat quien en su primera intervención pidió la destitución del delegado opositor Franco Boczkowski, y envalentonó al resto de sus departamentales a intervenir en este sentido y a votar: “repudiar todas las actitudes antidemocráticas y anti estatutarias, agresiones, hostigamiento y maltrato al Secretario General, a dirigentes, a delegados escolares, compañeras/os de trabajo y toda acción que vulnere a Uepc”. Una medida que apunta principalmente a disciplinar a su propia base que rompe con la regimentación de la Celeste y se coloca en el terreno de los autoconvocados. El hecho de que la columna de la conducción no concentrara más del 20% de los 15 mil docentes movilizados el día del paro, es una muestra de esto.

La Celeste no va más, paso a la docencia organizada

La principal conclusión que sacó la docencia es que no puede seguir sosteniendo ni económicamente ni con sus condiciones de trabajo a una burocracia que hace dos décadas está integrada físicamente al gobierno, al que le aportó no solo un Ministro de Educación, sino también la mayoría de los inspectores y directores que hostigan diariamente a trabajadores cada vez más precarizados y peores pagos. No es casual que la conducción de Uepc no se movilice por justicia para Karina Moyano.

Los-as docentes que doblegamos al gobierno, ahora tenemos la tarea de organizar las escuelas con delegadas-os propios, reabrir la paritaria para no seguir perdiendo salario y desplazar a la Celeste de Uepc, para poder imponer el conjunto de nuestros reclamos.

Tomamos el planteo de poner en pie en Córdoba la Multicolor que viene desplazando a la Celeste en varias provincias. Sin embargo, necesitamos establecer la base de nuestra organización para poder concretar el frente con el conjunto de los sectores que hoy estamos luchando, sostenerlo en el tiempo, sortear las maniobras de la conducción y recuperar nuestro sindicato para la docencia.

En este sentido, propondremos a la próxima asamblea de autoconvocados cuatro puntos constitutivos de la Multicolor que acercaremos para el debate y el aporte al conjunto de la docencia:

1-      Todas las decisiones de la Multicolor deben ser decididas y coordinadas en asamblea: campañas, iniciativas, programa, candidaturas, etc.

2-      Organizar una campaña unificada para concretar delegado-as independientes del gobierno y la conducción en todas las escuelas posibles.

3-      Recuperar el sindicato con una lista única de la oposición conformada en asamblea e integrada democráticamente por todos los sectores en lucha. Organizar una campaña por la afiliación masiva de la docencia.

4-      Iniciar una campaña contra la regimentación, sanciones, hostigamiento y persecución que desarrolla el gobierno y la conducción de Uepc: no a los descuentos por luchar; ninguna sanción a Franco Boczkowski; justicia por Karina.

Con la fuerza de las escuelas, la democracia y la movilización de los autoconvocados pongamos en pie una Uepc de lucha.