En un replay de la reunión de la semana pasada, la “paritaria” docente-estatal pasó nuevamente a cuarto intermedio, sin fecha de convocatoria y sin oferta salarial alguna. La amansadora tiene el propósito de demorar una definición, para luego presentar el aumento que ofrezca el gobierno ajustador de Kicillof -si lo hay- como un hecho consumado. El secretario general de Udocba ratificó este proceder burocrático declarando que espera una nueva reunión a la brevedad para firmar el aumento. Un cheque en blanco a Kicillof.

Las burocracias del Frente Gremial Docente Bonaerense (Fudb) -que capitanea Suteba- van a las “paritarias” de Kicillof sin mandato, y, al igual que Upcn y Ate, aprueban lo que venga sin asambleas ni reuniones de cuerpos de delegados. Se limitan a endosar la oferta a la baja del gobierno bonaerense a espaldas de los trabajadores.

El Frente de Unidad Docente Bonaerense a la rastra del ajuste

Según un comunicado del Fudb, Pablo López, el ministro de Economía que comanda las reuniones paritarias, se avendría a tomar como base de un próximo aumento el mes de junio en lugar del mes de diciembre 2023 como vino ocurriendo la mayor parte del año. Lo que no dice el Fudb es que -con su venia e inacción- Kicillof y López se comieron la actualización por inflación de junio “argumentando ” la prioridad en el pago de los salarios y aguinaldos. Dejaron pasar junio profundizando la caída salarial cuando la pobreza supera el 50% de la población.

El comunicado, que agradece “la continuidad de la paritaria bonaerense” ( sin aumento) no dice una palabra sobre la esencialidad antieducativa, que Milei y los gobernadores quieren imponerle a los docentes para eliminar el derecho de huelga y coartar la lucha contra el ajuste educativo. Esta reforma laboral no ha merecido respuesta por parte de Kicillof y Sileoni. Todo lo contrario: días atrás e invocando el cumplimiento del calendario escolar, el gobierno negó el Día del Estatal a los auxiliares de escuelas, lo que llevó a un paro de este sector de los trabajadores de la educación, que son los peores pagos.

El silencio cómplice de Kicillof frente a la esencialidad reaccionaria coincide con la política de la burocracia de Baradel, que ha borrado los paros de su agenda para no “hacerle el juego a Milei”. Durante el 2023, fueron Baradel y cía los que le cubrieron las espaldas a Kicillof, convalidando los descuentos salariales brutales para castigar los masivos paros de la oposición combativa multicolor. Desde hace mucho que la burocracia celeste de Suteba se ha “autoregulado” y pontifica contra los paros que “vacían las aulas” al peor estilo libertario, contribuyendo a la desmovilización de la docencia.

¿Paritarias o bajada de línea ajustadora?

Las paritarias sin oferta se han transformado en una puesta en escena repetida del gobierno y las burocracias, donde los funcionarios de Kicillof muestran los bolsillos vacíos e invocan la crisis fiscal, la caída de la recaudación y el ahogo de Milei para mantener los sueldos de pobreza cuando una familia necesita un millón de pesos para no ser pobre. Mientras aprieta a los trabajadores, el gobernador se prepara para gatillar en dólares el equivalente a 350 mil millones de pesos de la “reestructurada” deuda externa bonaerense en el mes de setiembre.

Las concesiones a los capitalistas son presentadas cínicamente como una política de “equilibrio productivo” mientras que son los trabajadores quienes pagan el ajuste. Esta dilatación del aumento se da cuando las proyecciones inflacionarias preanuncian otra subida de los precios y una escalada del dólar.

Recorte salarial y jubilaciones en peligro

Para los docentes la paritaria debería incluir también la recuperación de lo perdido por la anulación del Fonid, un recorte salarial al que terminó de ponerle el sello Kicillof adaptándose al ajuste de Milei y los gobernadores. El segundo recorte lo tendrán los directivos y docentes con mayor carga horaria que sean alcanzados por el impuesto a las “ganancias’. La judicialización sin lucha es pura cháchara.

En el acto del 1 de julio, el peronizado gobernador Axel Kicillof dijo que el gobierno de Milei viene por las jubilaciones. Esta amenaza vale también para el IPS y su “armonización” con la Anses. De prosperar implicaría un golpe mortal a las jubilaciones bonaerenses al despegarlas de las paritarias y los aumentos salarios estatales y docentes. La defensa del Instituto de Previsión Social y la lucha contra la modificación del régimen jubilatorio es una cuestión de vital importancia e innegociable para todos los trabajadores bonaerenses.

Plan de acción

La caída y retroceso salarial es responsabilidad del ajuste de Kicillof y de las burocracias paralizadas que van de adorno a las paritarias. Para el gobierno la prioridad es este “aguinaldo” a los especuladores, que pagará en el próximo vencimiento de una deuda externa fraudulenta y confiscatoria. Hay que rechazar este saqueo.

Para romper este círculo vicioso, hay que impulsar y organizar asambleas y cuerpos de delegados para votar mandatos de aumento por un salario igual a la canasta familiar e indexado por inflación, y por la recuperación salarial de lo perdido. Abajo la reforma laboral y las legislaciones antihuelgas.

Plan de lucha para preparar la huelga general contra el ajuste de Milei y los gobernadores.

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