Sindicales

4/5/2022

Estatales Córdoba: una revisión paritaria insuficiente que discrimina a los jubilados

Plan de lucha para reabrir paritarias.

delegado departamental Uepc- FURU

Imagen: Gabriel Flores.

El gobernador cordobés Juan Schiaretti anunció el martes 3 el adelanto a mayo de la cuota de aumento salarial correspondiente a julio para los empleados públicos, más una suma fija en negro como Fonid (incentivo docente) de $5.000 por cargo o 15 horas cátedras para lxs docentes.

El “decretazo” vino a escasas semanas de que las conducciones sindicales cerraran un acuerdo salarial hasta julio del 30% en cuotas, rechazado por las bases. En el caso de Uepc, la negociación salarial impuesta mostró el interés primario del sindicato que dirige Juan Monserrat de aceptar los términos del gobierno provincial antes que respetar el mandato unánime de las escuelas de la provincia de Córdoba.

Lxs jubiladxs pierden otra vez

La medida del gobierno deja afuera a los más golpeados: lxs jubiladxs provinciales, que ya sufren el robo de sus haberes debido a la aprobación en plena pandemia de la ley 10.694, que perpetró la Unicameral de Schiaretti. Como consecuencia de ello, lxs jubiladxs docentes cordobeses tienen la peor jubilación del país; los aumentos de los activos se cobran con dos meses de retraso, lo que licúa el salario diferido y además el haber que cobran es del 64%, notablemente inferior al 82% debido al cambio en el cálculo.

Lxs jubiladxs, entonces, debido al diferimiento en el pago, cobrarán la última cuota en agosto y, en el caso de la docencia, no recibirán los $10.000 correspondientes al Fonid por doble cargo, lo que constituye un grave golpe al bolsillo.

Inflación desbocada y salarios docentes en los puestos más bajos

Los salarios docentes y del conjunto de los estatales han sufrido un deterioro superior al del sector privado. Las categorías más bajas del gremio de comercio perciben un salario de $92.400, muy por encima del cargo testigo de una maestra de grado, equivalente a $70.000 con Fonid. Dentro de la variación de los salarios en el período febrero 2016 a febrero 2022, el de la docencia está en el último puesto: ha caído al fondo del escalafón de los estatales.

El acuerdo con el FMI está repleto de medidas inflacionarias: suba de tarifas, aumento de combustibles y devaluación de la moneda. Se suma que las grandes multinacionales trasladan los precios internacionales al mercado interno. Los costos de esta política la estamos pagando las y los trabajadores.

En este sentido, la medida que toma el gobierno es insuficiente para frenar la caída del salario. Si no se reabren las paritarias y se coloca una cláusula gatillo por inflación, en el 2022 la docencia volverá a perder salario por cuarto año consecutivo.

La Canasta Básica cada vez más lejos

La Canasta básica total de Almaceneros trepó a $100.008 en abril, en Córdoba. El director general del Centro de Almaceneros declaró que “se observó un incremento en productos que no se habían movido tanto antes y que son elementos esenciales para las familias, por ejemplo, el café subió un 60% y la polenta un 40%”. Además, indicó que tres de cada cuatro familias gastan la mitad de sus ingresos solo para alimentos (Cadena 3, 4/5).

Según las cifras que establece la Junta Interna de ATE-Indec, un hogar constituido por una pareja de 35 años con dos hijos en edad escolar necesitó, en marzo de 2022, $145.456 para satisfacer sus necesidades de bienes y servicios básicos. Se calcula que en mayo esta canasta superará los $160.000, una cifra a la que solo puede acceder un director de Secundaria con máxima antigüedad.

Plan de lucha para recuperar el salario

La recuperación del salario no está en los cálculos de la conducción de Uepc, está en manos de la base docente que con sus medidas de acción autoconvocadas colocó en agenda los más sentidos problemas que tenemos: precarización laboral producto de la reforma del Estatuto, jubilaciones de miseria, recorte de la “hora pedagógica” en inicial, precarización de la jornada extendida, cierre de cursos en la educación de adultos, etc. Todas estas manifestaciones fueron autoconvocadas y empujaron a la Uepc a tomar medidas aisladas, corriendo por detrás de estos procesos.

El anuncio del gobierno demostró que la docencia tenía razón cuando rechazó por insuficiente el acuerdo salarial. Semanas atrás, delegadxs de la oposición impugnábamos la asamblea departamental que aprobó con fraude este acuerdo rechazado.

El hecho de que el Ejecutivo “decrete” una actualización salarial de manera unilateral deja en ridículo a una burocracia sindical que está postrada ante un gobierno con recaudaciones récord. La docencia tiene los salarios más bajos porque la conducción sindical reniega de los planes de lucha, garantes de cualquier triunfo. En contraposición, las mejores paritarias de estos años fueron conquistadas por los sindicatos clasistas, recuperados por el sindicalismo combativo, como el Sitram (Municipales de Jesús María) y el Sutna. Por el camino de la lucha, vamos a recuperar el salario.