Sindicales
21/10/2024
Estatales: rechacemos el “examen de idoneidad” de Milei y Sturzenegger
Quieren ir por más despidos. Respondamos con lucha.
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delegado de ATE Ministerio de Economía
Milei y Sturzenegger.
En una reciente conferencia de prensa matutina, el vocero presidencial con rango de ministro, Manuel Adorni, anunció la implementación de un “examen de idoneidad” del que participarían 40 mil trabajadores del Estado. El mismo se llevaría adelante en diciembre, mes en el cual vencen decenas de miles de contratos en la Administración Pública Nacional; pérfidamente se inscribe en toda una línea de ataques del gobierno hacia el sector.
El funcionario no explicó el propósito del examen. Sin embargo, el ministro de Desregulación, Federico Sturzenegger, despejó cualquier duda: “va a ser un requisito necesario pero no suficiente, ya que después por supuesto van a definir la renovación o no por los parámetros usuales si la persona merece la renovación del contrato“.
Queda claro que se trata de un pretexto para nuevos ataques a los trabajadores, mientras en el Estado se multiplican los ingresos de familiares de funcionarios e “influencers” libertarios – algunos de ellos con grandes sueldos- sin la más mínima aptitud.
En su diatriba, Adorni sostuvo que el examen se encuentra enmarcado en las modificaciones que la Ley Bases introdujo en la Ley Marco de Regulación de Empleo Público Nacional. Pero eso no es cierto, pues los cambios operados en esta ley refieren al régimen de nuevos ingresos a la Administración Pública, mientras que la pretensión del gobierno es golpear a trabajadores y trabajadoras que cuentan con años de antigüedad, conocimiento y experiencia en sus puestos.
Nuevamente, tal como ocurrió con la gestión del macrismo en el gobierno, la extendida precarización laboral que fue prohijada durante los gobiernos de Néstor y Cristina Kirchner es utilizada por el ultraderechista Milei para echar a la calle a decenas de miles de trabajadores.
El denominador común de todos los gobiernos es encubrir una relación laboral bajo formas de contratación precarias y eternos contratos a término, violentando así la estabilidad en el empleo público fijada en la Constitución y el convenio colectivo.
A dónde está, que no se ve…
La amistosa colaboración de UPCN con esta orientación de gobierno es burda. El propio Andrés Rodríguez es uno de los principales “portavoces” del sector mas recalcitrante de la burocracia cegetista que mantuvo negociaciones reservadas con el Gobierno para que pueda prosperar la reforma laboral. En el gremio estatal, la Ley Bases resulta mortal: termina con la estabilidad laboral y activa gravemente el sistema de reubicación y disponibilidad (antesala de despidos), determina la obligatoriedad del descuento por día no trabajado por paro, endurece el régimen sancionatorio y agrava las condiciones jubilatorias. Una verdadera demolición de derechos.
Pero también ATE tiene su cuota de responsabilidad. El sindicato nacional (Lista verde) lleva adelante un trabajo de desmoralización, con el anuncio de medidas difusas y paros sin efectividad ni anclaje en los sectores de trabajo. Por el lado de la Verde y Blanca, han rechazado abiertamente la posibilidad de llevar adelante medidas unificadas en nombre de que hay que construir “trincheras” en los lugares de trabajo, sin que eso los haya llevado a apoyar siquiera las peleas contra los despidos en las distintas dependencias. De conjunto, ATE subordina su actuación a la “unidad” del peronismo hacia 2025 y deja que el gobierno golpee ahora, en vivo y en directo.
Daniel Catalano, secretario general de ATE Capital, se integró a la lista pejotista de CFK compartida con la burocracia del Smata y con Insfrán y sus patoteros. La Verde, por su parte, proclamó al gobierno de Kicillof como “el mejor posible”, mientras los auxiliares de escuela que deberían defender perciben ingresos de indigencia.
Una salida
La enorme pelea que están llevando delante de manera masiva los estatales del Hospital Garrahan muestra que podemos organizarnos y superar las dificultades. Allí, las y los trabajadores ya han conquistado un bono de 500 mil pesos y continúan la lucha. Debemos seguir su ejemplo, organizando una gran deliberación en todos los lugares de trabajo para poner en pie una asamblea de trabajadores del Estado, sin distinción de afiliación sindical ni de modalidad de contratación.
Rechacemos el examen trucho e impulsemos la pelea por el pase a planta permanente y el salario construyendo a lo largo y ancho del país la organización de un paro nacional estatal.
