Sindicales

6/5/2024

Estatales: tomemos el paro del 9 como punto de partida de una lucha real

La Ley Bases habilita privatizaciones y despidos masivos en la planta permanente.

Más puestos de trabajo en peligro.

“100.000 empleados públicos de planta permanente, en la mira del gobierno” tituló Clarín el 2 de mayo. Se amplificó, de ese modo, la denuncia que veníamos haciendo los partidos de izquierda y las corrientes antiburocráticas, como bien reflejó la diputada Romina del Plá en su intervención en el Congreso. La Ley Bases, a la espera de su aprobación en el Senado, incluye un ataque histórico a las condiciones laborales en el Estado. Su artículo 52 establece que “el personal alcanzado por el régimen de estabilidad que resulte afectado por las medidas de reestructuración que comporten la supresión de órganos, organismos o de las funciones a ellos asignadas; o de reducción por encontrarse excedida, conforme surja del informe fundado del órgano competente en la materia, la dotación óptima necesaria, quedará, automáticamente, en situación de disponibilidad por un periodo máximo de hasta doce (12) meses”.

Luego, se afirma que ­“cumplido el término de disponibilidad, sin que el trabajador hubiera formalizado una nueva relación de trabajo, quedará automáticamente desvinculado de la Administración Pública nacional”. De este modo, no solo corren riesgo quienes trabajen en organismos que desaparezcan, pues el “exceso de dotación” resulta causa suficiente. De más está decir que ese “exceso” es definido arbitrariamente por el Poder Ejecutivo, lo cual abre la puerta a despidos masivos a una escala sin precedentes. Indudablemente, los 15 mil despidos ocurridos hasta el momento son solo la primera fase. Así, no enfrentamos solamente el vencimiento de los contratos precarios en junio (prórroga de tres meses), sino también la amenaza concreta sobre el conjunto de los puestos de trabajo.

Es evidente para cualquiera que las primeras tandas de despidos en el Estado pasaron sin luchas fuertes. En estos meses, muchísimos trabajadores y trabajadoras manifestaron disposición a pelear en distintas iniciativas -asambleas, concentraciones, autoconvocatorias, etc. Sin embargo, los sindicatos del sector fueron un fuerte factor de contención para evitar una respuesta integral. Upcn se limitó a “protestar” contra los despidos mediante una acción judicial que se sabía inútil desde el vamos. ATE, por su parte, realizó medidas débiles y aisladas, promoviendo activamente la discusión “por sector”, lo cual fragmenta y desmoraliza al activismo. En estos cuatro meses, los plenarios se cuentan con los dedos de una mano, y en ningún caso se hicieron para fomentar una deliberación real. Cuando se trató la ley en el Congreso, los sindicatos de la CGT no convocaron a movilizarse. ATE concurrió con delegaciones mínimas el 29 y sostuvo su rancho aparte el 30, que también fue marginal. Por distintas vías, contribuyen con la gobernabilidad del gobierno antiobrero.

Indudablemente, la acción de las dirigencias sindicales refleja no solo su conservadurismo de aparato, sino también la orientación del frente político en el que abrevan (el peronismo). Finalmente, los votos para la ley de Milei no solo surgieron del PRO y la UCR, sino también del peronismo, incluidas las “provincias mineras”. Por otro lado, quienes votaron en contra no promovieron movilización popular alguna.

Sin embargo, la marcha de la crisis está cambiando el escenario hacia el tratamiento en el Senado. El 1 de mayo, aun regimentado, congregó mucha más gente de la esperada por la burocracia sindical. En este contexto, el paro del 9 puede transformarse en un contundente pronunciamiento de la clase obrera contra el ajuste y las leyes de Milei y los gobernadores. En el Estado, enfrentamos los despidos y un recorte salarial asfixiante (0% en mayo), sin que los sindicatos hagan algo. Aprovechemos el paro para impulsar desde abajo su continuidad: por asambleas sin distinción de afiliación y un paro activo cuando se trate la ley en el Senado. Es momento de levantarse para que no nos pasen por arriba. Las manifestaciones masivas desde el 20/12 hasta acá, incluyendo el millón de personas en las calles en defensa de la educación pública, demuestran que hay disposición a la lucha cuando hay un canal.

No está dicha la última palabra, luchemos para derrotar la reforma esclavista de la Ley Bases
Impulsemos una gran campaña por un paro activo frente al tratamiento en el Senado. –
prensaobrera.com
¿Industria de juicios laborales?: las sentencias equivalen al 2% de los trabajadores
Las patronales quieren facilitar despidos y eliminar derechos laborales. –
prensaobrera.com