Sindicales

12/4/2022

Foetra: basta de perder con la inflación ¡recomposición salarial ya!

Necesitamos que la categoría inicial sea equivalente a una canasta básica familiar.

La Naranja Telefónica movilizando.

La escalada inflacionaria no para. Las consultoras privadas estiman un 60% anual para el 2022, y alrededor de un 6% para marzo. Efectivamente, se empieza a ver como se acelera el impacto inflacionario del acuerdo con el FMI, que viene con más tarifazos, recorte de subsidios y devaluación entre otras medidas. Mientras los productores de alimentos adaptan los precios locales a los internacionales en dólares, justificándose en la guerra en Ucrania, recaudan una renta extraordinaria, porque los costos de producción son en pesos. El aumento de los alimentos supera ampliamente el índice general de inflación que mide el IPC (Indice de Precios al Consumidor), que es lo que viene tomando como referencia la conducción de la Mesa de Unidad Sindical (MUS) para negociar las minicuotas, una vez que ya se dispararon los aumentos. Pero correr de atrás al IPC no alcanza para recomponer el poder adquisitivo.

La inflación viene ganando la guerra…

El gobierno anunció que los salarios le ganarían a la inflación, pero eso no ocurrió. No fue más que una puesta en escena para un refrito de medidas: como los “Precios de Cercanía”, que volverán a fracasar como los “Precios Cuidados”, “Máximos”, etc. En tanto, las cámaras de comercio salieron a aclarar que no habrá retracción de precios; cada empresario tomará la decisión que crea conveniente. Así lo hacen Telecom, Telefónica y Claro, que anunciaron nuevos tarifazos desde el 1 de abril, de alrededor de un 12%.

Pero siguen atacando el salario…

En este contexto la CGT, la Unión Industrial Argentina y el gobierno se reunieron en forma “tripartita” para tratar de contener y frenar los reclamos de los trabajadores, frente a un cuadro inflacionario demencial. El comunicado de la MUS sobre la discusión paritaria no informa cuanto están reclamando ni cuanto ofrecieron las empresas. Insta a una reunión con el Ministerio de Trabajo cuando es el gobierno el que quiere imponer los techos salariales del 45/50%, que llevaría a una pérdida del 10 o 15%. Las conducciones sindicales oficialistas de la CGT y las CTAs no han movido un dedo para enfrentar este ajuste y la sumisión del país al pago de la deuda. Solo quieren contener la presión de las bases, que se empieza a expresar por paritarias genuinas para recomponer el salario y las jubilaciones.

Con el IPC no alcanza: canasta familiar para la categoría inicial

La MUS, que integran Foetra/Fattel, la Foeesitra, Cepetel y Fommtra, vienen firmando acuerdos inconsultos y por detrás de la inflación. Desde octubre a enero perdimos entre 2 y 4 puntos cada mes, hubo una “leve recuperación” en febrero (con el incremento por única vez) y nuevamente quedamos por debajo de la inflación en marzo, sin contar el atraso acumulado en paritarias anteriores. Los aumentos no van al básico ni a los adicionales como la antigüedad. Un 40% va a la voz de pago “adicional especial” que no figura en el Convenio, y fue creado para bajar el premio semestral (productividad) y los turnos diagramados (que se paga sobre el básico más antigüedad, por trabajar sábados, domingos y/o feriados, con francos compensatorios correspondientes).

Los “trabajadores de las móviles” no cobran el premio semestral y ahí sí los aumentos van al básico, confirmando que el “adicional especial” es solo una herramienta para devaluar el premio semestral, que deberían cobrar todos los trabajadores de las telecomunicaciones. El salario en Movistar, Personal y Claro tiene una escala salarial que apenas supera la línea de pobreza. Cuando trabajamos en empresas que, lejos de la crisis, acumulan ganancias fabulosas. Las categorías, por su parte, se mantienen congeladas a pesar de la incorporación de nuevas tareas y tecnologías.

Las compañeras y compañeros que realizaron teletrabajo no han cobrado ni un plus por los gastos adicionales en los domicilios, y en muchos casos tampoco se paga la conectividad al cien por ciento. La tarifa telefónica, un adicional no remunerativo (en negro) continúa congelada en $357 mensuales desde hace más de una década.

Organicemos la lucha por el salario y las reivindicaciones

Para dar vuelta esta situación necesitamos una intervención organizada de las y los trabajadores, participando activamente en la discusión y negociación paritaria por medio de plenarios de delegados con mandato y asambleas de base. Participando activamente en las elecciones de delegados que se vienen. Porque es necesario reorganizar el gremio de abajo hacia arriba, planteando la pelea por las condiciones de trabajo, contra los aprietes para aumentar la productividad con la polifunción y los retiros “voluntarios”. Enfrentando la reforma laboral de hecho en Telecom, Claro y el vaciamiento en Telefónica.

Hay que pelear para que ningún trabajador/a quede por debajo de la canasta familiar, que supera en los hechos los 140.000 pesos mensuales. Esto es lo que necesita una familia trabajadora para cubrir las necesidades básicas de vivienda, salud, educación, alimentación, ropa, recreación y demases. Necesitamos una recomposición salarial tomando como base el salario actual y no las actas de junio de 2021. Con cláusula de actualización automática por inflación. Proponemos que la paritaria y el salario se resuelvan en una Asamblea General del gremio.