Sindicales

11/11/2020|1609

Gri Calviño: continúa la lucha contra el lock-out patronal y la flexibilidad laboral

Tres semanas de lucha en la metalúrgica.

Han pasado tres semanas de lucha de la heroica clase obrera de Gri Calviño. Los trabajadores han enfrentado durante las mismas la falta de pago, el lock out, el incumplimiento de convenios internos logrados con la lucha, la pretensión patronal de imponer un régimen de semiesclavitud en la planta sobre la base de la multiplicidad de tareas. Y hay que añadir también la declarada intención de deshacerse de la combativa comisión interna.

Luego de la permanencia pacífica en el playón, los trabajadores se trasladaron al estacionamiento como resultado de la presencia de más de cien policías de la infantería bonaerense. Han realizado movilizaciones al Ministerio de Trabajo de la provincia, la última de las cuales se llevó a cabo la semana pasada sin ningún tipo de resultado concreto a pesar de haberse decretado la conciliación obligatoria.

Desde luego que la lucha dio sus resultados, aunque parciales, en la medida en que los compañeros han cobrado la última quincena, aunque defectuosamente, pero el lock out persiste como manera de extorsionarlos e imponerles la flexibilidad laboral.

La patronal y el Ministerio de Trabajo (respondiendo a la ofensiva general del gobierno contra la clase obrera) se han confabulado para desgastar a los trabajadores postergando una y otra vez nuevas audiencias para resolver el conflicto.

Los trabajadores han respondido con asambleas cuyas decisiones siempre fueron enfrentar las pretensiones patronales con la lucha. Sin embargo, la dirección de la UOM seccional Quilmes-Varela-Berazategui no han resuelto ni siquiera un paro, lo mínimo que corresponde a un sindicato en defensa de los trabajadores en conflicto, pero también del resto de los metalúrgicos, víctimas también de las embestidas y atropellos patronales. Cabe señalar que en el transcurso de esta lucha se han hecho presentes delegaciones solidarias de docentes, gráficos, de compañeros del neumático, de Firestone, de AGD-UBA, quienes llevaron dinero para el fondo de lucha, de metalúrgicos de la zona norte, muchas de ellas delegaciones de la Coordinadora Sindical Clasista, y que el Polo Obrero ha entregado mercadería en sendas oportunidades para sostener la lucha.

La lucha de los compañeros de Gri Calviño merece triunfar. Hay que apoyarla con todos los medios posibles. La conciliación obligatoria no puede ser excusa para inmovilizar al gremio, sino todo lo contrario, más que nunca redoblar la movilización de los metalúrgicos por Gri Calviño y por todos los reclamos de las fábricas de la seccional.
La UOM debe llamar a un nuevo plenario de delegados en puerta de Gri que resuelva un plan de lucha inmediato para alcanzar la victoria obrera.