Sindicales

6/10/2020

Kicillof patea la paritaria estatal

La tercera reunión paritaria de los trabajadores del Estado bonaerense encuadrados en la Ley 10430, que se iba a realizar el lunes 5 por la mañana, fue suspendida por el gobernador de Kicillof sin dar explicación alguna.

El gobierno trata con desprecio a los estatales, enfermeros y auxiliares de escuelas de la provincia de Buenos Aires, que solo hemos tenido en lo que va del año de una suma fija remunerativa de $4.000. El reclamo salarial se reavivó cuando luego de meses de mantener nuestra paritaria cerrada, el gobierno otorgó sin chistar un aumento del 40% a la policía en un solo pago. La exigencia crece a pesar de la entrega de las burocracias sindicales.

A la primera reunión paritaria, el gobierno llegó con las manos vacías, sin oferta alguna. En la segunda, ofreció un mentiroso 10% de aumento que iría al básico y a algunas bonificaciones, lo que es una oferta nominal inferior a los 3.000 pesos. Una verdadera miseria.

Frente a esta nueva reunión, las juntas internas combativas de ATE en la región convocaron a una concentración para reclamar un aumento del 40% en un solo pago. En el corte, nos enteramos que la paritaria se suspendía para el día siguiente. Es decir que mientras el gobierno hace cuentas y define el presupuesto a medida del FMI y los bonistas, pretende cerrar la paritaria sin cubrir ni la pérdida del 2019 ni la de un 2020 en que los salarios son devorados por la inflación y la devaluación.

La burocracia que dirige los sindicatos está preocupada, a la espera de gestos del gobernador, mientras dejan pasar las oportunidades de defender nuestros reclamos por su adhesión a la política de pacto social -que implica aceptar que la crisis se descargue sobre nuestros salarios y condiciones de trabajo.

En ATE, la conducción provincial Verde se negó a marchar ante la paritaria aduciendo temor a los contagios, pero convocó al día siguiente a una caravana y movilización en la Capital por la paritaria nacional. La lista kirchnerista Verde y Blanca, juega a disputarle terreno a la conducción Verde pero realizando acciones divisionistas a las convocadas por varias juntas internas en el último plenario de delegados local. No es una situación nueva, pues la política de la Verde y Blanca es de integración a la gestión de Kicillof, al punto de que nunca denunciaron los despidos de la ministra Agustina Vila en Educación.

Desde Tribuna estatal llamamos a realizar acciones de lucha, fortaleciendo las asambleas y debates con las juntas internas combativas, para enfrentar el ajuste de Kicillof contra estatales, enfermeros y auxiliares, para exigir un aumento salarial del 40% en un solo pago.