Sindicales

8/5/2021

La burocracia de la CGT saluda la política antiobrera de Alberto Fernández, a costa de la salud de los trabajadores

Funcionan a pleno la construcción y la industria en pleno desastre sanitario.

En un reportaje radial, el secretario general de la Unión Obrera Metalúrgica, Antonio Caló, festejó que a los industriales les está yendo bárbaro. Puso como ejemplo que” los metalúrgicos estamos en pleno empleo”, y aplaudió al ministro Guzmán, “un pibe inteligentísimo”, luego de la reunión de la cúpula de la CGT con Alberto Fernández. “Nosotros estamos bien, la UOM está bien. Hemos armado la Federación de Sindicatos Industriales, que son 24 gremios, y todos están bien en los gremios industriales, todos están trabajando, todos produciendo y todos con más trabajadores afiliados”.

Esta alegría rebosante del burócrata metalúrgico se la arrancan cifras de crecimiento en el pasado mes de marzo del 32 % en la industria y del 97% en la construcción respeto al mismo mes del 2020, según el Indec.

En un país que se hunde, con un endeudamiento que representa casi el total del PBI de la Argentina, con una pobreza que supera el 42 %, y un ajuste antiobrero de alcances históricos, los capitalistas están llenando sus bolsillos.

Precios y subsidios para las patronales

En dos meses, se anotaron más de 23 mil empresas para recibir el subsidio para el pago de los salarios a sus trabajadores, el Repro II. Así, se han pegado de la teta del gobierno del Frente de Todos ocho veces más empresas que hace seis meses, que pagarán subsidiados los salarios de sus obreros por el estado, a casi 700 mil trabajadores. Los capitalistas favorecidos, además, serán eximidos del pago de las contribuciones patronales –en detrimento de las jubilaciones de sus trabajadores-.

También, el gobierno permitió la actualización de los valores de referencia para la exportación de carne, en tanto que el crecimiento del precio del maíz a casi 300 dólares la tonelada, preanuncian un salto exponencial del precio de los alimentos, la columna de la canasta de los trabajadores.

En la provincia de Buenos Aires, los que venían a poner “platita” en el bolsillo de los más humildes, acaban de anunciar que el Banco Provincia destinará 6.000 mil millones de pesos para financiar a la agro industria y sus cultivos afines.

 

Fuera la burocracia sindical

Pero los trabajadores están mal, Caló.

Cuando al burócrata le repreguntaron cómo le había ido a los metalúrgicos con el salario, respondió “en términos futbolísticos perdimos por goleada. Y venimos perdiendo desde hace décadas, por eso si le empatamos a la inflación este año, festejamos”. Algo imposible, porque la entrega de la paritaria es grande como el Monumental (35.2 %), y está generando una profunda ola de repudio y de rechazo en las bases metalúrgicas, a lo que debe agregarse miles de despidos durante todo el 2020, y miles de suspensiones, con rebaja salarial del 30% pactadas el año pasado “para evitar despidos”.

Frente a una ofensiva de precios y de crecimiento de la inflación del orden del 4/5 % mensual que proyecta una inflación anual no menor al 50 %, lo de Caló se repite en toda la actividad industrial y de la construcción. Plásticos ( 37,5); Docentes bonaerenses ( 32); Estacioneros ( 34); Vestido ( 33); Bancarios (29¡), y en la Uocra, donde la construcción donde la actividad creció un 97%, los salarios se aumentaron un 35.8. En todos los casos, en cómodas cuotas.

¡Con 140 mil contagios y 3500 muertos promedio por semana, el boom que festejan Caló y toda la burocracia sindical es a costa de la vida obrera!

Es hora de que intervenga la clase obrera

Los trabajadores han salido a enfrentar esta ofensiva capitalista y la colaboración histórica de toda la burocracia sindical que, en la reunión con Alberto, ratificó que redoblará el apoyo al gobierno pejotista y su política de ajuste fondomonetarista.

Todas las luchas en curso han sido de sindicatos clasistas y antiburocráticos, o de auto-convocatorias contra las patronales y la burocracia sindical: El Sutna clasista arrancó una paritaria récord, del 54% anual y la garantía de que el salario debía superar en un 5 % el eventual crecimiento inflacionario: la huelga autoconvocada de los trabajadores de la salud de Neuquén, rompió la entrega del 15 % de Ate, arrancando un 53%; los paros docentes de los sutebas combativos y de Ademys fueron claves para imponer la suspensión de las clases presenciales en medio de la pandemia, y la lucha de los movimientos piqueteros para emplazar la política de hambre del gobierno. Esta lucha en el país se produce en medio de las rebeliones latinoamericanas, que hoy tiene al levantamiento de los trabajadores de Colombia en el centro de la escena.

Impulsamos la lucha de frente único y de unidad de trabajadores ocupados y desocupados del Plenario del Sindicalismo Combativo, para colaborar en la tarea de poner en pie un plan de lucha de conjunto que coloque a la clase obrera dando su propia salida a la crisis, para que la paguen los capitalistas y no los trabajadores.