La gobernadora rionegrina Arabela Carreras, con la complicidad de la conducción Verde de ATE, siguen con la política de dilación y de indefinición en relación al salario de los trabajadores de la salud. La falta de certezas, la no presentación de grillas salariales y la postergación del debate salarial, cuando la inflación y la suba de precios impacta sobre nuestros salarios, es la forma de ganar tiempo y desmovilizar la lucha de las y los hospitalarios, que durante el 2020 hemos puesto nuestros reclamos en las calles. Plantear como “conquista” licencias que en muchos casos son denegadas por razones de servicio, no sólo es una cortina de humo, sino que raya en la provocación de parte de quienes dicen representarnos.

Carreras no pretende blanquear el salario, ni pretende avanzar en este proceso. Por lo contrario, toda su política salarial con todos los estatales y docentes ha sido incorporar sumas fijas a los salarios, desvalorizando a los mismos, desfinanciando la obra social y la caja jubilatoria. Tampoco pretende que los salarios superen la línea de pobreza y que aumenten según la inflación. La causa de esto es sostener los acuerdos con el pago de los intereses de la deuda provincial en dólares e iniciar un nuevo ciclo de endeudamiento por la refinanciación acordada con los acreedores usurarios. En la misma línea que el gobierno nacional del Frente de Todos, que fijó un “aumento” del 7 %, que fue respondida por los trabajadores del Garrahan con sucesivos paros y manifestaciones, en la provincia Juntos Somos Río Negro aplica la misma política de hambre y saqueo.

La movilización convocada para este viernes es la respuesta al inmovilismo de todas las centrales sindicales, tanto nacionales como provinciales. Desde Tribuna Estatal consideramos que este proceso de movilización se debe profundizar con Plenarios Provinciales de todos los hospitales, avanzar en confluir con los sectores que luchan contra el ajuste gubernamental y superar el inmovilismo cómplice de los gremios.

La conquista de nuestros reclamos se ganan en la calle, tal como lo han demostrado las movilizaciones de mujeres luchando por el derecho al aborto legal, o los trabajadores/as aceiteros que le han impuesto a las patronales un salario mínimo de $ 90 mil pesos.

Recomposición ya del 75%. No a las cuotas ni sumas en negro. Reincorporación de los despedidos. Ley de Insalubridad. Defensa del 82 % móvil. Insumos de calidad y cantidad adecuadas.

El viernes todes a la marcha. 18:30 h Hospital López Lima de Fiske Menuco.