Sindicales

17/8/2022

Sin paritarias en la provincia de Buenos Aires

Cero aumento y complicidad de las burocracias sindicales con el ajuste de Kicillof.

Comisión Técnica Salarial

Sin gloria y con pena finalizó la ronda de la “Comisión Técnica Salarial” con los sindicatos estatales, la Asociación Judicial Bonaerense y el Frente de Unidad Docente Bonaerense. El faltazo de Kicillof, de “gira” por el interior, preanunciaba lo que finalmente ocurrió: no hubo oferta de aumento salarial y ni siquiera el adelantamiento de la cuota de septiembre, una carta que el gobierno se guarda para “cerrar” la negociación. El telón de fondo del fiasco consensuado con la burocracia sindical es la ampliación del tarifazo en los servicios que pulveriza los salarios.  Posiblemente Axel Kicillof esté a la espera de lo que ocurra con la postergada reunión, como ocurrió con la nonata mesa de acuerdo de precios y salarios, del Consejo del Salario, que pasó para el 22/8 condicionada por los capitalistas a la devaluación, la reforma laboral y el ataque a los planes sociales.

El Kici gana tiempo sostenido por las burocracias estatales y docentes integradas a su gobierno. Como muestra basta un botón: la burocracia de UPCN fue con un “reclamo” del 10% de aumento a pesar de una inflación estimada para el 2022 del 90% que dejaría el acumulado anual al menos 20 puntos por debajo de la inflación, y más sumergido aún si se considera el aumento sideral de los precios de los alimentos. Cubriéndose, el sucesor del fallecido burócrata Quintana reconoció la pérdida salarial del 25% sufrida por los estatales bonaerenses y arrastrada desde el gobierno de Vidal. El comunicado de Ate agrega que en el zoom se reclamó el pase a planta de 20.000 trabajadores precarizados, una radiografía de la reforma laboral en el Estado cuando está vigente el decreto de congelamiento de nuevos ingresos, dispuesto por la ex ministra Batakis y sostenido por Massa como parte de la “reducción del déficit fiscal”, para pagar la fraudulenta deuda externa.

La maratón virtual de la Comisión Técnica Salarial no pasó de reuniones por zoom, otro indicio de que el gobierno de Kicillof se proponía de antemano seguir con la amansadora ante la complicidad impávida de las burocracias.  Las tres horas en pantalla fueron una puesta en escena en vísperas de la “movilización” de la CGT y la CTA en apoyo al gobierno de los Fernández y Massa. Kicillof dio otra señal de que no habrá reapertura de paritarias sino un “seguimiento de la inflación” (trucho) y llegado el caso una suma fija o adelantamiento de cuota. La connivencia de las burocracias kirchneristas y cegetistas con el ajuste nacional y provincial la pagamos los trabajadores con el derrumbe del salario, las jubilaciones y la pérdida de conquistas. La conducción de ATE no sólo entrega el salario, alineada con el miserable 10% de aumento, es también la avanzada de la extensión de la jornada laboral para los trabajadores del Estado bajo la ley 10.430, que enmascaró en su momento como una ” recomposición salarial”.

Esto mismo hacen Suteba, la Feb y Udocba con la quinta hora “voluntaria” en primaria, que implicaría un plus de 20.000 pesos a cambio de mayor flexibilización y horas del trabajo. Con el aval a las cinco horas en un gremio docente, que combina las jornadas extenuantes de dos y tres cargos para vivir con una enorme desocupación y precarización laboral, Baradel y Cía firman acuerdos con Kicillof que dejan a la enorme masa de la docencia por debajo de la canasta de pobreza. Al momento no hay siquiera un comunicado del Suteba sobre el fiasco de la “Comisión Técnica Salarial”. La dirección yaskista de la Asociación Judicial Bonaerense declaró el “alerta” después de haberse sumado integralmente a esta cogestión del ajuste salarial y colaboración con el “gobernador amigo”. El hilo conductor de las burocracias de ATE y Suteba, cada uno desde sus respectivas ” centrales”, es la ausencia de asambleas para votar un mandato salarial y un plan de acción.

La cantinela contra los ” formadores de precios” y la inflación no le hace ni cosquillas a las corporaciones capitalistas y sí es el pretexto de Cristina, el kircherismo y Kicillof para sabotear las paritarias bonaerenses y apoyar al gobierno, un discurso tramposo mientras la vicepresidenta le achaca a las paritarias alimentar las expectativas inflacionarias. La miseria social impacta sobre los trabajadores y sus organizaciones, horadando la integración traidora de las burocracias sindicales al peronismo fondomonetarista. La movilización del 17 a Plaza de Mayo es un canal para agitar el Paro Nacional y Provincial, la reapertura de las paritarias para arrancar un salario no inferior a la canasta familiar, y para luchar por la recuperación de loa sindicatos y su independencia frente al Estado y la burguesía.