Los profesionales del Hospital Municipal de Bahía Blanca vienen desarrollando una serie de medidas de fuerza votadas en asambleas, dado que la intendencia de Susbielles no ha respondido favorablemente a los reclamos realizados respecto de la jornada laboral del personal profesional de enfermería: el descuento de la contribución solidaria arbitraria a trabajadores sindicalizados y el pago de bonificaciones a trabajadores profesionales.

La deteriorada situación de la salud pública viene afectando tanto a los trabajadores del sector privado como a los hospitales estatales. Como una historia que se repite, los hospitales privados de Bahía Blanca afiliados a Fecliba anunciaron un año atrás el inminente colapso económico por la quita de fondos del gobierno nacional, cuestión que se ha ido profundizando con el paso de los meses. Otro tanto ocurre con el Hospital Regional Penna, que depende del gobierno de Kicillof, noticia periódica por el deterioro de sus instalaciones, lo que se agravó con la inundación del 7 de marzo pasado y la falta de profesionales, y ha significado el cierre de guardias.

Frente a las medidas de fuerza, la contraofensiva del kirchnerista Susbielles ha sido la vuelta a las ocho horas diarias para el personal de enfermería, que hace unos diez años conquistaron las seis horas diarias. Susbielles apunta a no pagar horas extras necesarias por la falta de personal, subiendo la jornada en dos horas. Los trabajadores reclaman el ingreso de personal y una mejora salarial. Una de las mociones aprobadas en la asamblea este jueves 4, por unanimidad, fue sostener la lucha para conservar la jornada laboral para enfermería de 6 horas y “no dar un paso atrás en esto”.

Lejos de encontrar el apoyo del Sindicato Municipal (STM), la conducción del mismo rechazó la medida dado que “no es legítima”, llegando a afirmar que la medida responde a “decisiones arbitrarias de una minoría”, planteando que el paro profundiza la crisis en un sistema público que presenta deficiencias y criticando a los profesionales que alternan horarios en distintos hospitales. La burocracia pejotista del STM se calza el mismo traje que la del resto de las burocracias que le hacen el “aguante” al ajuste de Kicillof y de los intendentes.

Susbielles viene de hacer aprobar la semana pasada un aumento del ABL, ahora llamado Tasa de Servicios Urbanos (TSU), cercano al 80%; un verdadero tarifazo a los golpeados bahienses después de la inundación del 7 de marzo pasado. Si algo caracteriza al intendente es su progresismo trucho, que no deja de fijar posición permanentemente en contra de los derechos populares y su predisposición al diálogo con su amigo Milei, que también aplica un ajuste a escala nacional. Los lazos entre el peronista Susbielles y el facho libertario Milei son profundos y son el fruto de una confluencia política en el ataque al pueblo (tarifazo) y a los derechos de los trabajadores en la pretensión de aumentar la jornada laboral.

El Partido Obrero, integrante del Frente de Izquierda, se solidariza con los trabajadores del Hospital Municipal, apoya su lucha y llama a todo el pueblo trabajador de Bahía Blanca y a sus organizaciones a hacer lo propio. Hay que rodear de solidaridad esta lucha para llevarla al triunfo.

Lo que está en juego es la salud pública, amenazada por los recortes de Susbielles, Kicillof y Milei. Esta batalla es un capítulo de la lucha más general que tenemos que librar contra la reforma laboral esclavista que el gobierno mandó al Congreso nacional. El Partido Obrero de Bahía Blanca realizará una Asamblea Abierta el sábado 13, como parte de una iniciativa similar en todo el país dirigida a organizar la lucha contra la reforma laboral de Milei y superar la complicidad del pejotismo y de la burocracia sindical.

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Movilizamos el 19/20 de diciembre para frenar a Milei y su reforma esclavista -

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