West Ocampo, de la Sanidad, es uno de los burócratas gordos que firmaron el Pacto con De la Rúa en apoyo a la reforma laboral antiobrera.

Aunque el Congreso aún no la sancionó, West Ocampo ya empezó a firmar convenios por empresa.

En San Luis, por ejemplo, firmó uno “con una empresa de pañales que aceptaba el período de prueba por 6 meses, la polivalencia, el traslado geográfico y la jornada flexible” (La Nación, 9/2).

Sanatorio Mitre

Por otro lado, la patronal del Sanatorio Mitre, en la Capital, está “tercerizando” sectores productivos a empresas super negreras. Estas comienzan por chantajear a los trabajadores, para que acepten entrar en la “nueva” empresa con salarios más bajos y menores derechos. En el caso de Cocina y Mucamas, se trata de la Natural Foods S.A., que ofreció tomar a trabajadores, que tienen muchos años de antigüedad, pero a condición de que empiezen de cero y de que acepten pasar de un salario de 700 pesos a otro de… 310, con el incremento de una hora en la jornada de trabajo (de 8 a 9 horas), la pérdida de francos (¡de 6-8 francos mensuales a 4!) incluido el dominical. Es decir, reducción del salario a la mitad, 6 horas de trabajo más por semana y la perdida de francos de descanso.

El sindicato firmó a espaldas de los trabajadores un “acuerdo-marco” que autoriza a la patronal a imponer este planteo. Para el que no lo acepta… ¡la calle!

Los trabajadores, sin organización gremial que los defienda, están muy confundidos. Pero la Agrupación Sindical Independiente de la Sanidad (ASIS), requerida por los trabajadores para intervenir ante la traición sindical, ha iniciado una campaña de agitación. El viernes 3 se plantea hacer un acto-asamblea en la puerta del Sanatorio.

No a los “acuerdos-marco” por empresa que firma la burocracia sindical. Cualquier propuesta patronal debe ser discutida y aprobada en Asamblea General. Reincorporación de los despedidos. No a la tercerización trucha. Estabilidad laboral: ¡todos los compañeros a planta permanente!