Pese a la incorporación de La Mella a la lista sciolista y de haber recibido el voto de Franja Morada, el Frente de Graduados por la Democratización retuvo los dos consejeros por un amplio margen.

 

La semana pasada fueron las elecciones del claustro de graduados en el Carlos Pellegrini.

 

En medio de una fuerte tormenta que ocasionó inundaciones en

Capital y Gran Buenos Aires, más de 500 graduados se acercaron a votar. Con 310 votos (58%) el FGD, que encabeza el Partido Obrero junto a otras organizaciones de izquierda, se impuso frente a “Graduados por el Pelle”; la lista del kirchnerismo, que no pudo superar los 226 votos (42%). De este modo, Nacho Ibáñez fue reelecto primer consejero titular del CER, evitando que los K se hicieran de la mayoría del consejo junto a la Ctera.

 

El Pellegrini, hoy día, está fuertemente asediado por la burocracia de Ctera y el Rectorado de Barbieri y Yacobitti. Héctor Mastrogiovanni, hombre del riñón duro de la burocracia, denunciado por golpear estudiantes en una toma de 2007, sumariado y sancionado en 2009, fue designado por una resolución del Rectorado como regente del turno tarde. Gracias a la lucha estudiantil y docente, esta designación fue frenada. Lejos de amilanarse y luego de esto, Mastrogiovanni amenazó a estudiantes y docentes, lo que le valió varias denuncias penales. En este contexto, la lista de La Cámpora y La Mella contó con el apoyo explícito del Rectorado

 

No sólo de su pata kirchnerista, sino incluso de los radicales. Lucas Clark, histórico dirigente de la Franja Morada, y Bernava, funcionario de la Secretaría de Escuelas Medias de Barbieri, se acercaron a votar al armado contra la izquierda. El intercambio de favores por no haber abierto la boca frente al escándalo de Mastrogiovani e incluso defenderlo.

La victoria del FGD es la expresión de una experiencia de lucha que marcó a fuego la perspectiva de sucesivas generaciones de graduados. Desde la recuperación de la Fuba en 2001, al calor del Argentinazo y las grandes luchas de 2006/7, este año hemos sido quienes apuntalamos la lucha de estudiantes y docentes contra los embates del Rectorado y la complicidad del kirchnerismo como conducción del Cecap y mayoría estudiantil en el CER.

A días de la presentación de listas para la elección de consejeros superiores, esta victoria deja un claro mensaje. Para defender la educación pública, y los reclamos de estudiantes y trabajadores de la UBA, necesitamos consejeros independientes de las mafias que la cogobiernan. Este triunfo es, también, un mandato por una Fuba independiente y de lucha, para defender la educación pública del ajuste actual y del mayor ajuste que se viene. El planteo de La Mella de encolumnar a la izquierda detrás del FpV fue derrotado. Con esta posición de independencia del movimiento estudiantil iremos, el próximo 4 de diciembre, a enfrentar a los agentes del Rectorado de privatistas y corruptos.