El 25 y 26 de septiembre se realizará el congreso de la Unión de Juventudes por el Socialismo, un evento con miles de jóvenes de todo el país para poner en pie de lucha todos nuestros reclamos. En el texto de su convocatoria se traza como objetivo la “construcción de una organización socialista que se enlace con la clase obrera, para enfrentar los planes del gobierno nacional y el capital financiero que quieren que la crisis que vive el país la paguen les trabajadorxs.”

Particularmente, en la Facultad de Arquitectura, Diseño y Urbanismo de la UBA el llamamiento tiene una importante razón de ser. Es que en esta Facultad se explicita el vaciamiento presupuestario del gobierno, la virtualización forzosa que aumentó exponencialmente la deserción estudiantil, la precarización docente y un incremento en el trabajo precarizado e informal en el ámbito profesional de lxs graduadxs.

Los problemas durante la cursada

El congelamiento presupuestario que atraviesa al conjunto de la universidad tuvo resonancia en el paso forzoso a la virtualidad. La facultad no dispuso de ninguna partida para resolver la faltante de herramientas informáticas entre estudiantes y docentes, no se dispuso ningún tipo de capacitación paga para quienes están a cargo de las cursadas y el abandono por parte de las autoridades fue una política deliberada, en cada uno de los planos, para profundizar un ajuste que se viene desarrollando hace años en el pabellón 3 de Ciudad Universitaria.

El resultado de esta política fue un abrumador aumento tanto en la deserción estudiantil como en la precarización docente. Se profundizaron los datos brindados por la propia facultad a principios de mayo2, donde se evidenciaba que el 18,2% de lxs estudiantes encuestadxs no tenía conectividad o tenía una conectividad deficiente; 44% no tenía computadora en su hogar o tenía que compartirla con otras personas que trabajaban en la casa y que sólo el 29,3% estaba conforme con la cursada virtual.

Los problemas al recibirse

Ahora, los problemas que tienen que afrontar lxs estudiantes de la FADU no sólo afectan a su estadía en la facultad. Quienes decidan encarar para el lado de la docencia se encontrarán el obstáculo de una FADU en la que, de 3600 docentes, 1/3 son ad-honorem, el 85% son interinos y 1/3 cobra un salario inferior a la categoría que corresponde. La nota de estos tiempos, para peor, es la propuesta del gobierno de Alberto Fernández de un incremento del 0% .

Por otra parte, quienes decidan encarar para otros ámbitos laborales se encontrarán con múltiples obstáculos, cada uno adaptado a su carrera, pero que tienen como leit motiv una acuciante precarización laboral. Sólo para ejemplificar veamos el caso de diseño gráfico. Durante el último tiempo hemos reflejado en este periódico cómo diferentes empresas desarrollan en el ámbito privado el concepto de “ad honorem” encubierto bajo “concursos”, “búsquedas de talento” o “pre entrevistas”.

El rol del CEFADU y nuestro desafío

Cabe entonces preguntarse ¿Hace algo el centro de estudiantes (CEFADU) frente al ajuste del gobierno y las autoridades, la deserción y la precarización de docentes y graduadxs? La respuesta es no. El CEFADU, dirigido por tres agrupaciones que responden a las autoridades que muestran el pacto existente en la gestión (conviven Franja Morada con albertistas), es una herramienta que utiliza el decano, Cabrera, para planchar al movimiento estudiantil. Las agrupaciones kirchneristas, desde La Corriente -conducción hasta el año pasado- hasta La Cámpora, tampoco ponen ningún grito en el cielo. Por arriba y por abajo se arma hay una complicidad en torno al silencio para no armar olas en la facultad. Sin embargo, ¿es posible planchar al movimiento estudiantil en este contexto?

La reacción de distintos sectores de freelancers y el rechazo activo a la precarización; el resquemor por la deserción; la deliberación y lucha de lxs docentxs y la profundización del plan del plan de ajuste del Gobierno y el FMI, augura el desarrollo de mayores movimientos de lucha.

Nuestra tarea, nuestro objetivo, será el de construir una alternativa de independencia política en la facultad que levante las reivindicaciones de cada uno de estos sectores, abone sus distintas luchas y se ponga como desafío recuperar su herramienta gremial para ponerlo al servicio de la defensa de la educación, en defensa de sus estudiantes y de lxs trabajadorxs. Con esta perspectiva, con la que intervenimos todos los días en la facultad y en la virtualidad, vamos al congreso de la UJS.

https://docs.google.com/forms/d/1VKKE2Ecob_BTtXz5nxvr6iOHOpBF1kf4t27vOhJmzbw/viewform

https://prensaobrera.com/congreso-ujs-2020/