El pasado viernes 6 de septiembre se realizó el escrutinio del Centro de Estudiantes de la Facultad de Veterinaria (CEV) y de los representantes estudiantiles en el Consejo Directivo, esto en el marco de elecciones en toda la UBA. En Vete se revalidó, con la victoria del Evet (UJS + independientes), una experiencia de más de 20 años de organización estudiantil y de independencia política de las autoridades y de todos los gobiernos que han pasado. También se presentaron AFV (Franja Morada) y la Tropilla (La Cámpora). En este sentido, se dieron los siguientes resultados:

Consejo Directivo: 
Evet 37,80%
AFV 36,08% 
La Tropilla 25,20% 

Centro de Estudiantes:
Evet 41,09%
AFV 34,06%
La Tropilla 23,23%

A su vez, en la elección se marca claramente un cambio de la agrupación que recibió el apoyo de las autoridades de nuestra facultad. Previamente ese lugar lo ocupaba La Tropilla, que de hecho fue fundada como “independiente” mientras recibía apoyo concreto de autoridades claves de la facultad, como lo es el actual Secretario de Hacienda. De esta forma es que obtuvieron un espacio propio (La Pulpería) en la facultad por fuera de los espacios del CEV y sin que se someta al voto del estudiantado, sino que simplemente las autoridades decidieron entregárselo a su agrupación afín.

Hoy en día, La Tropilla perdió ese lugar frente a AFV que, luego de realizar una primera elección de 13% en 2022, obtuvo también su lugar propio dentro de la facultad por parte de la gestión (La Matera). Pero AFV no solo vino con el apoyo de las autoridades de nuestra facultad, sino que también con el del rectorado de la UBA. Esto quedó muy claro en la elección, no sólo por los cuadernos regalados por la Fuba y el Banco Galicia a dicha agrupación, sino porque vimos situaciones inéditas en nuestra facultad, como la decisión de dejar gente ajena a la facultad durmiendo en la misma, incluso dentro del pabellón central donde se quedaban las urnas de Consejo Directivo. 

Todo esto se da en un marco general de las elecciones en la UBA donde, frente al incesante trabajo de las autoridades universitarias de aplacar la lucha iniciada en abril, no se observa aún una maduración suficiente del movimiento educativo. Y donde evidentemente se consolidaron acuerdos entre el decanato de veterinaria, compuesto principalmente por un sector peronista pero con inserción de la UCR, y el rectorado de la UBA, compuesto principalmente por un sector radical pero con inserción del peronismo, para brindar este apoyo político a AFV. Y de hecho fue así que lograron arrebatarle el lugar de minoría estudiantil en el consejo directivo a La Cámpora.

Al mismo tiempo, se ve en AFV un fenómeno particular, primero que nada por plantearse como una agrupación nueva e independiente en la universidad; cuando no solo ya dirigieron el CEV (con otro nombre), sino que forman parte de la agrupación que dirige el rectorado de nuestra universidad hace más de 100 años. Con esta postura “apolítica”, mentirosa y apuntando claramente a un sector social que defiende que el centro de estudiantes sea un espacio únicamente de servicios, y no nuestra herramienta de organización en defensa de la universidad pública; han logrado permear en un sector del estudiantado que incluso se posiciona hasta en contra de la política estudiantil, a pesar de formar parte de una agrupación.

Este es un fenómeno muy similar al que se da en la Fauba con la LAI, agrupación cercana a la Franja Morada pero también relacionada con la Sociedad Rural y el sector terrateniente; donde a pesar de defender el recorte histórico de las carreras en la universidad y recibir apoyo de ex decanos como Vilella, que participó del gobierno actual de Milei, siguen posando de apolíticos e independientes ante les estudiantes. De hecho ambas agrupaciones presentan la particularidad de haber decidido no participar de la última marcha universitaria del pasado 23 de abril, lo que marca que existe un sector independiente de la Franja Morada dentro de AFV, que se verá si choca o no con los intereses privatistas de la misma. 

Ante todo esto, sin embargo, se impone en veterinaria la organización independiente, donde sobre la base de la organización estudiantil y el debate político de qué roles buscan ocupar las agrupaciones de las autoridades en nuestra facultad, prevaleció la única conducción independiente de toda la UBA. Esto no solo por sostener, hace más de 20 años, un centro de estudiantes que funciona, se organiza en defensa de las condiciones de cursada, a la par que convierte los espacios del CEV en herramientas para garantizar la cursada. Sino por la apuesta a la organización estudiantil en defensa de nuestras reivindicaciones como estudiantes, haciendo asambleas, reuniones abiertas, juntadas de firmas y movilizaciones; conquistando así desde la readmisión por violencia de género, pasando por la duplicación de las prórrogas, y hasta el dictado del EJE 6 y de las PPS ambos cuatris. 

Es claro que el CEV jugó un papel muy importante en la rebelión educativa de principio de cuatrimestre, marcando desde el primer día la necesidad de intervenir, con numerosas asambleas, cacerolazos y acciones de lucha que le permitieron no solo ser una referencia para les estudiantes de Veterinaria sino también para los estudiantes de Agronomía y el CBC. A diferencia del resto de los centros de estudiantes, a excepción de FFyB (ahora conquistado por las fuerzas del rectorado), alineados con las autoridades universitarias, el CEV siguió organizando instancias de deliberación posterior a la marcha, como lo fue la asamblea de Paternal, que acompañó iniciativas de docentes y no docentes, al mismo tiempo que puso en pie iniciativas estudiantiles junto con los estudiantes de Agronomía o el Agrotécnico. 

Impulsemos la segunda marcha educativa

El CEV se convierte así en el único centro independiente de las autoridades en toda la UBA. Además de expresar un reconocimiento a una agrupación con mas de 20 años de trayectoria, es claro que esto expresa un desafío: Veterinaria debe convertirse en un ejemplo para todo el activismo independiente del movimiento estudiantil.

La marcha educativa del 2 de octubre debe ser un nuevo punto de inflexión en la lucha por la universidad. En el caso de nuestra facultad, el retraso salarial deja un saldo de mas de 48 renuncias docentes, demostrando una vez mas que sin salarios no hay universidad. El levantamiento de la emergencia presupuestaria, y el levantamiento de todo el proceso de lucha por parte de las agrupaciones alineadas al rectorado, como es el caso de AFV en nuestra facultad, demostró hasta qué punto las autoridades defienden una agenda contraria a la de les estudiantes.

Este 27/9 tendrá lugar la primer asamblea del CEV, posterior a la revalidación de la conducción, en la cual hacemos un llamado a todes les estudiantes a participar para discutir cómo intervenir en defensa de la facultad.

El Presupuesto 2025 del desfinanciamiento educativo

Las partidas quedan a discreción de la motosierra de Milei. –

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