Educación
10/9/2025
La educación superior de Córdoba en la mira: un “Plan de Desarrollo Educativo Provincial” que solo es ajuste
Mucha parafernalia de “escuela posible” que es pura incertidumbre hasta para el gobierno.
Seguir
Simón Bolívar, profesorado provincial.
Mientras el gobierno provincial de Córdoba se encamina a la campaña electoral con Juan Schiaretti a la cabeza, Martín Llaryora no deja de ajustar. De un primer semestre de luchas estatales por paritarias con la docencia y UEPC Capital a la cabeza, pasamos al segundo semestre donde, por un lado, tenemos la campaña embelesada de falsas ilusiones de crecimiento del gobierno provincial y, por el otro, tenemos a los trabajadores organizados contra los despidos y la sobrecarga laboral, y por la reapertura de las paritarias.
Uno de los caballitos de batalla de Llaryora es su ministro de Educación, Horacio Ferreyra, que implementa a fondo un plan de ajuste en toda línea. El llamado “Plan de Desarrollo Educativo Provincial” significa en los hechos un recrudecimiento de las condiciones educativas ya muy deterioradas. Pero no solo se trata de la “Escuela posible” sin contar con ningún recurso, significa un ajustazo en todos los niveles educativos.
En la educación superior asistimos a recurrentes ataques que ponen en juego la continuidad de las carreras. La incertidumbre constante que existe debido a que las carreras son a término, a saber que se abren de acuerdo a la matrícula año tras año, es cada vez más una evidencia de cierre. El proyecto “Transformar Córdoba” implica la creación de carreras de educación por área y no específicas, es decir unificar profesorados dejando en la calle a cientos de docentes. Y el primer paso en esta perspectiva es el trabajo en cátedras conjuntas, mediante la excusa de la formación disciplinar que ya se está dando en las escuelas.
Es claro que esta orientación va de la mano con la formación de docentes que entiendan como vocación el exceso y precarización laboral. La feria de ciencias, institucionalizada y obligatoria a nivel provincial, fue uno de los puntos de partida para mostrar a las futuras generaciones de docentes el camino a seguir: proyectos que “incentiven” emprendimientos mediante conocimientos simples, sobrecarga laboral y ausencia de recursos en las instituciones.
Entre otros ataques que sufrimos les estudiantes, existe el problema de la bimodalidad de cursada, es decir la presencialidad combinada con la virtualidad, que en la actualidad es 25% virtual y 75% presencial en el primer año y luego 50-50 en los siguientes años de cursada. Este punto, en el que el gobierno provincial insiste, es el camino para ir a una virtualización completa de la educación superior principalmente en el interior de la provincia. Esto implica un problema esencial que parte de los recursos con los que se cuenta para ese tipo de “cursada” de manera individual, la sobrecarga laboral de elaboración sistemática de materiales y todo esto sin meternos en la formación pedagógica que acarrea la virtualidad donde muches autores sostienen la pérdida de continuidad entre otras problemáticas.
Por otro lado, se presenta el problema del BEC (Boleto Educativo Cordobés), por el cambio de Red Bus a Sube, sin la certeza sobre si seguirá vigente o de qué forma se gestionará el pase a esta altura del año. Sin embargo sabemos que los demás boletos sociales, hoy, están pagando un costo menor del pasaje (55%) y no un subsidio completo como inicialmente sucedió, lo que conlleva un recorte de hecho. Sin dudas, el cese del boleto educativo significaría el fin de la cursada para miles de estudiantes en la provincia puesto que, tan solo en la ciudad se necesitan entre 2 y 4 boletos para asistir a clases (con un costo de $1.580 cada boleto).
Como vemos este proceso de ajuste no es nuevo, tiene una larga trayectoria que hoy se puede vislumbrar mejor.
Frente a estos ataques debemos defender la educación superior, ¿cómo?, como lo vienen haciendo los docentes de inicial y primaria, de media, de técnica y de artes. Organizados, en asambleas y en las calles. Para desarrollar esta perspectiva es menester que los centros de estudiantes y los delegados docentes convoquen a asambleas donde podamos discutir un plan de acción para que la reforma antieducativa de Llaryora y Ferreyra no pase. El próximo 12 de septiembre, en la jornada nacional de lucha que oportunidad de visibilizar el rechazo a la reforma antieducativa de Llaryora, distinguido alumno del gobierno nacional a la hora de aplicar el ajuste.
La jornada de lucha del 12 llama a movilizar por cada reclamo particular y se impulsa bajo la consigna de Fuera Milei. Es un espacio para unificar nuestros reclamos en la acción callejera, con todos los sectores que están en lucha, como UEPC Capital, el Sindicato Único del Neumático, el Sindicato de Químicos y Petroquímicos de Río Tercero, las organizaciones piqueteras como el Polo Obrero, organizaciones de jubilados y todas las luchas en curso. La cita es a las 18 hs, desde Colón y General Paz hasta Casa de Gobierno. ¡Nos vemos en la lucha!

