Mujer

23/9/2021

Caso Paola Tacacho: el juez Pisa es condenado a juicio político

En el mes de agosto, la Legislatura tucumana, en su comisión de juicio político, resolvió acusar al juez Francisco Pisa por mal accionar en las causas por las denuncias que Paola Tacacho había realizado cuando era acosada por Mauricio Parada Parejas, quien se convertiría en su femicida luego de ser ninguneada por Pisa y la justicia provincial en general.

Recordemos que en febrero de este año Juan Manzur, el entonces gobernador de Tucumán, le aceptó la renuncia condicionada para el juez Francisco Pisa, horas antes de que se analizarán los siete pedidos de juicio político que habían sido presentados en ese momento en la Legislatura provincial. Una verdadera jubilación de privilegio que asciende a más de trescientos mil pesos.

Finalmente, la renuncia condicionada del juez Pisa no se concretó debido a que el trámite jubilatorio no se resolvió en los plazos establecidos. En junio pasado, Pisa presentó su renuncia lisa y llana ante Manzur, pero esta vez el gobernador no la firmó, por lo que tampoco se hizo efectiva. una vez iniciado el juicio político no pude ser interrumpido “por ningún trámite jubilatorio o actuación administrativa” y agregó que el juez permanecerá suspendido mientras se desarrolle el proceso (CuartoPoderSalta, 24/8).

El comienzo del juicio a Pisa inició cuando el vicegobernador Jaldo dirigía la legislatura, y estaba en medio de peleas públicas con Manzur, y antes había sido cajoneado. Queda claro que priorizan la guerra de camarillas internas en el PJ y no los derechos de las mujeres, por eso  no está claro si el juicio va a prosperar o lo volverán a cajonear.

Este juez fue quien cajoneó las 14 denuncias que Paola Tacacho, víctima de femicidio, argumentando cosas irrisorias, como que les faltaba lugar para guardar los expedientes o que no había pruebas suficientes, siendo que eran sobradas las pruebas del acoso que sufría Paola desde hacía 5 años. Además, sobreseyó a Mauricio Paradas Parejas, su acosador, quien finalmente acuchilló a Paola en la vía pública para luego suicidarse de la misma forma.

El juicio político es un primer paso en el camino de justicia para Paola y desenmascarar a un poder político y judicial podrido hasta la médula, cuyo accionar tomó conocimiento público luego del crimen de la docente, pero que es reiterativo en cada causa de violencia contra mujeres y diversidades. Es por esto, que no debemos depositar confianza ciega en la legislatura “celeste” que llevará adelante el juicio: es justamente el antro de misóginos que protege a otros abusadores, como Bussi, y que siempre se opuso a cuanto derecho reclamemos en las calles. Debemos seguir en estado de alerta y movilización permanente para conquistar la justica para todas las víctimas ¡No pasarán!