La muerte de Fabián Gutiérrez, hallado bajo los escombros del hotel Dubrovnik en Villa Gesell, mostró que la precarización laboral, la codicia patronal y la corrupción del Estado capitalista mata y en en este caso se llevó a un luchador de la clase obrera.

Fabi era un obrero clasista por naturaleza. Su espíritu solidario fue destacado durante estos días de angustiosa vigilia por compañeros de trabajo, vecinos y amigos. 

Un día de 2012 apareció en la 2° Conferencia Sindical del Partido Obrero. Se enteró de su realización por unos afiches y al llegar preguntó por los aeronáuticos. Desplegó su compu y aparecieron escenas filmadas por él esos días en el Aeropuerto de Ezeiza. Eran imágenes de la huelga de vigiladores de Securitas y personal de limpieza de Serza, que fue histórica y de la que fue protagonista. Esos 15 días de paro y manifestaciones masivas fueron ocultadas por los medios que tienen base permanente allí pero están a las órdenes de Eurnekian.

La lucha por ser reconocidos como trabajadores aeronáuticos estaba llegando a su fin, traicionada por las burocracias, y Fabi nos propuso organizar de inmediato una reunión de activistas a la que concurrió Aldo “el Colo” Busatto, delegado histórico de los técnicos aeronáuticos y dirigente de la agrupación La Pista. Los despidos ya habían comenzado y también la resistencia que lo llevó a encadenarse en el hall de pasajeros junto a otras compañeras en dos oportunidades. El saldo de esta lucha tuvo victorias y derrotas parciales; Fabi fue reinstalado producto de fallos judiciales y nuevamente despedido. Los vigiladores obtuvieron una suma extra que se ha integrado al convenio como “plus aeroportuario”. También se convocó por primera vez a elección de comisión interna en dos sectores del aeropuerto y allí la burocracia de UPSRA perdió en ambas. Sin embargo, el despido de un centenar de activistas impidió el surgimiento de una dirección sindical combativa que hubiera alterado las duras condiciones de explotación que aún imperan en el aeropuerto.

Fabi fue un luchador consecuente, en su sector y extendiendo las luchas a toda injusticia contra la clase obrera. Su alta exposición en los paros de los aeronáuticos tercerizados, sosteniendo piquetes durante 15 días, llevó a la patronal, hambreadora y precarizante a despedir a un centenar de trabajadores. Fabi se opuso y organizó que lo representemos judicialmente a él y otros 15 compañeros de seguridad y limpieza, pidiendo sus reinstalaciones. La mayoría de ellas con éxito. El ensañamiento de la patronal con Fabi fue desmedido, incumplió las sentencias judiciales y pagó fortunas en astreintes (multas); cualquier cosa antes de tener entre sus filas a un activista. Finalmente, Securitas permitió el reingreso de Fabi.

Posteriormente, lo vuelven a despedir y se logró nuevamente su reinstalación por vía judicial. Dos veces Fabi le torció el brazo a Securitas. Entonces la patronal emprendió una denuncia penal por retención indebida del uniforme, que incluyó un allanamiento de su vivienda, en medio del proceso de reinstalación. Denuncia en la que, luego de una batalla junto a sus abogadas, logró demostrar su inocencia y Fabián fue absuelto.

Siempre preocupado por todo, siempre laburante, siempre en la primera fila. Siempre Fabi.

Fabi continuó su lucha en otras empresas de vigilancia pero su persistente activismo lo llevó a integrar la lista negra de la Caesi, la cámara patronal de la seguridad privada y comenzó a dedicarse a la carpintería. Aún así sostuvo su presencia en las marchas de vigiladores impulsando la construcción de la agrupación que fundara, El Mangrullo.

Lo recordamos marchando en la columna del Partido Obrero de la mano de su hija Melina, con su uniforme de Securitas, cuya gorra había modificado poniendo SECU RATAS.

Hace pocos días, con motivo de un nuevo plenario de la CSC, nos respondió que no podría venir porque estaba en Villa Gesell y en un audio relató las pésimas condiciones en que se encontraba trabajando y viviendo; esto hoy se explica en la tragedia de la que fue víctima.

Fabi, te vamos a extrañar y a recordar siempre. A tu memoria, vamos a vencer, Fabi. Los trabajadores vamos a vencer.

Justicia por Fabián Gutiérrez.

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