El 5 de febrero se realizó una elección de convenciona­les municipales en Valle Viejo, donde triunfó el oficialista Frente Cívico, que amplió el margen de diferencia sobre el PJ con relación al 10 de abril pasado. Con 1.000 votantes menos, el Frente Cívico pasó de 3.785 votos a 3.839, mien­tras el PJ descendió de 3.531 a 3.445. La polarización electo­ral se acentuó, pues el 10/4 el FC y el PJ obtuvieron el 80% de los votos, y en esta oportuni­dad el 90%.

El Frente Cívico movilizó su aparato partidario y el apa­rato de la intendencia, explo­tando la parálisis del PJ, que está envuelto en una feroz in­terna provincial.

El PO

Los diarios locales destaca­ron el hecho de que el PO se había transformado en la ter­cera fuerza (el 10/4 era la quin­ta), elevando su porcentaje del 2,60 a casi el 3%.

Nuestro partido realizó una enorme campaña, reconocida como tal por todos los medios, por el PJ y el FC. Se recorrió casa por casa todo el municipio; se realizó un acto de cierre, luego de una caravana de bici­cletas; hubo carteles colgantes y pintadas. Se registraron más de 50 fiscales (que cubrieron todas las mesas).

Todos los medios y partidos pronosticaron una votación superior para el PO, lo que se reflejó en un formidable re- agrupamiento partidario y en el hecho de que diversos secto­res pertenecientes a otras fuerzas del municipio y fuera de él hayan planteado abrir discusiones políticas o directa­mente aliarse a nuestra pro­puesta frentista.

Cuando concluyó el escruti­nio, las calles del municipio fueron recorridas, natural­mente, por una importante ca­ravana del Frente Cívico, pero también salió el PO a los ba­rrios con unos 50 compañeros para demostrar, por esa vía, la consolidación del desarrollo partidario.

Fracaso de la derecha. Bancarrota del centroizquierda

Esta elección fue también un laboratorio para varios ex­perimentos. Uno, promovido por Fuerza Republicana y el Modín que, como globo de en­sayo para extender la alianza a nivel nacional, obtuvo el 1,7% de los votos.

Pero el fracaso fue más acentuado en las filas del cen­troizquierda. El PSP se abrió del Frente Cívico y procuró presentarse como FREPASO, pero fue impugnado por otros sectores como Democracia Avanzada o por Opción Pro­vincial (del senador nacional Mario Fadel). El PSP apenas obtuvo el 1,6%. Más lamenta­ble fue el resultado para el PC, que había roto un frente con el PO (ver PO N° 436).

A pesar de poner el lema Partido Comunista bien chi­quito y superdestacado “en el Frente Grande”, llegó últi­mo con el 1% de los votos, un fracaso que anuncia nuevas crisis en sus filas.

Perspectivas

La provincia está envuelta en una crisis pavorosa. El go­bierno no puede pagar los suel­dos, está rematando el patri­monio provincial y cortando importantes conquistas. Esto ha llevado a que se convoque a un Congreso extraordinario de ATECA, que votaría el no ini­cio de las clases, y a que otros gremios estén discutiendo me­didas para reclamar el pago en término. En este cuadro con­vulsivo se va a desarrollar la Convención municipal y las elecciones del 14 de mayo. En función del importante desa­rrollo alcanzado y con la nece­sidad de ampliar el reagrupamiento de la vanguardia lucha­dora de la provincia, el PO (catamarqueño) ha decidido con­vocar para fines de febrero a una Conferencia provincial que ponga los pilares para la conformación de un Frente de Izquierda y de los Trabajado­res.

Ese será el marco para la intervención en la Conferencia Nacional de la Izquierda con­vocada por el PO y otras orga­nizaciones de izquierda.