Políticas
7/8/2024
El Ajuste Universal por Hijo de Milei y Pettovello
La Tarjeta Alimentar y la AUH sumadas no permiten cubrir ni un tercio de la canasta básica.
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El presidente.
Se acerca el Día de la Niñez y es una oportunidad para ver cómo el gobierno de Milei colocó a las infancias como una de las variables de ajuste de su plan motosierra. El monto de la Tarjeta Alimentar, de la que dependen más de 2 millones de personas, está muy por detrás del precio de la canasta de indigencia del mes de junio, y los recortes en la asistencia social son muy profundos.
Los montos de la Tarjeta Alimentar dependen de la composición de las familias que la solicitan; las que cuentan con un hijo perciben una de $52.250, las que cuentan con dos una de $81.936 y las que cuentan con tres una de $108.062. Son valores de miseria.
En junio, según el Indec, la Canasta Básica Total fue de $873.169 y la Canasta Básica Alimentaria de $393.319. Un hogar de cinco integrantes (en el que tres son niños), que percibe AUH y tres Tarjetas Alimentar, cubrió en junio apenas el 31% de la CBT. Un hogar de cuatro integrantes (en el que dos son adolescentes), que percibe dos AUH, solo pudo cubrir en el mismo mes el 12% de la CBT.
El gobierno no hace más que empujar a nuevos sectores de la población a padecer penurias insoportables. Esto, en un cuadro de alza de la pobreza y la indigencia, que según la UCA treparon a un 55% y a un 20% respectivamente.
Según Cepa, entre enero y julio, el presupuesto ejecutado de la Secretaría de Niñez, Adolescencia y Familia cayó un 40%; el del programa de apoyo al Plan Nacional de Primera Infancia se derrumbó un 77%; el del programa Comedores Comunitarios y Merenderos sufrió un ajuste real superior al 81%; y el Potenciar Trabajo tuvo un recorte del 75%. Como contracara, crece el peso del pago de intereses de deuda pública, que insume 11 de cada 100 pesos que gasta Nación.
Lo de la Tarjeta Alimentar y la asistencia social en general se suman a otros agravios que el oficialismo desenvuelve contra los más vulnerables y los trabajadores en general.
El salario mínimo, que sirve como referencia para el establecimiento de los montos de las jubilaciones y los salarios de trabajadores informales y cuyo último aumento fue decretado por los libertarios hace poco, cubre el 26% de la canasta básica total –en noviembre de 2023 cubría el 37%– y el 59% de la básica –en noviembre cubría el 79%.
En mayo, el poder adquisitivo de los sueldos registrados cayó un 15% en comparación a noviembre 2023. El derrumbe de los salarios informales es mucho mayor. A esto se suma que en el primer cuatrimestre se cerraron más de 340.000 cuentas sueldo en el sector formal. Si a la estadística se añaden los despidos en el sector informal, sobre los cuales naturalmente no hay información, podría verse que la sangría laboral es mucho mayor.
Los padecimientos de los trabajadores aumentarán habida cuenta los planes que el gobierno tiene por delante. Viene de reglamentar una parte de la antiobrera Ley Bases, habilitando privatizaciones y más ajuste en el sector público, y se apresta a implementar nuevos tarifazos y recortes en diversas áreas.
Este martes anunció la eliminación de las retenciones a la carne de vaca, cerdo y a productos lácteos; una política que recrudecerá la inflación y privará a muchas familias del acceso a esos bienes.
El gobierno de Milei está llevando adelante una masacre social. A la par que ataca a los más necesitados confiscando sus ingresos, los persigue para intimidarlos y evitar que salgan a pelear por trabajo y contra el hambre.
Este 7 de agosto vayamos todos a Plaza de Mayo con el movimiento piquetero y el sindicalismo combativo contra el hambre, los despidos, el ajuste y por un plan de lucha hasta derrotar al gobierno hambreador de Milei.
