Lxs trabajadores de la salud tenemos por delante una semana colmada de lucha. A la inmensa pelea que están llevando adelante los trabajadores del Hospital Garrahan se suma esta semana el paro convocado por la Asamblea de Residentes y Concurrentes de CABA, el miércoles 21, para estratégicamente confluir con las jornadas convocadas por el día de la enfermería.

Las luchas tienen como eje principal el reclamo por el salario, en un momento donde todas las paritarias se desploman por la inflación y los gremios entregan y desaparecen. AMM y Federación, que cerraron una paritaria del 60% en comodísimas cuotas a septiembre, se jactan de rechazar la nueva oferta del gobierno, del 8% en 2 cuotas (ya aceptada por Sutecba). Pero sus propuestas continúan siendo un misterio, porque no las hacen públicas ni tampoco convocan a asambleas y deliberación con las bases. Federación hizo un saludo a la bandera con un cese el pasado 13 de septiembre, en un intento fallido de disimular su simbiosis con AMM. Por su parte, la banda de Rojo llama a Consejo Central el 20, pero siguen haciéndole el juego al gobierno evitando la lucha. El único sector De AMM que esta luchando es la filial opositora de la Maternidad Sarda, que viene sosteniendo ceses y asambleas continuas.

Una vez más, la asamblea de Caba marca el camino.

En este contexto, residentes y Concurrentes vuelven a impulsar la organización en asambleas, con los Hospitales Elizalde y Fernández a la cabeza, y llamando a una asamblea general que votó el primer paro del año, este 21 de septiembre, con movilización a la Legislatura. La fecha tiene la particularidad de proponer la unidad con el sector de enfermería, un sector profundamente golpeado por todos los gobiernos. El reclamo es por la recomposición salarial que lleve el salario a 250 mil pesos y apoyar los reclamos del pase a la carrera profesional de enfermerxs y la titularización de suplentes de guardia, presentándose como una oportunidad para unir las luchas. La asamblea de CABA vuelve a encabezar su reclamo con métodos de organización, paro y asambleas, y sosteniendo su impronta como escuela de lucha.

El disfraz academicista esconde la precarización laboral.

La deserción de cargos en la reciente adjudicación a residencias y concurrencia conmueve al ámbito de la salud, e incluso es noticia de alguno medios (El Día, 18/9). Lo que algunos funcionarios y sectores conservadores quieren pintar como “falta de vocación” es nada más ni nada menos que la profundización de la precarización laboral, algo que lxs trabajadores de la salud no están dispuestos a seguir tolerando. Con sueldos que rondan los 110 mil pesos, condiciones insalubres, guardias extras que no se cobran y degradan las condiciones de vida, las especialidades más pesadas como necesarias (pediatría, clínica médica, terapia intensiva) no cubren los cupos. De esta situación son responsables todos los gobiernos, ya que tanto en CABA, Nación, como en las pcias se da el mismo fenómeno. En consonancia, Diputados acaba de aprobar una ley para promover la formación de enfermerxs, argumentando preocupación por la falta de personal en los hospitales. Pero, nuevamente, el problema no es académico, ya que las matrículas estallan de anotadxs.

La realidad es que lxs profesionales son expulsadxs del sistema público por las condiciones laborales y salarios de miseria. El salario de un enfermerx no llega a cubrir la canasta familiar. En el sector profesional se suma la inestabilidad de los cargos ofrecidos para quienes que tardan más de 10 años en especializarse. Mientras tanto, las corporaciones privadas siguen creciendo y levantándola en pala.

En este contexto de ajuste, queda claro quienes defienden el salario y las condiciones laborales de lxs trabajadores. Ningún gobierno ni las burocracias cómplices se preocupan por la salud. Las asambleas y la organización independiente marcan el camino. Vamos por la unidad y el triunfo de todas las luchas.

https://prensaobrera.com/sindicales/el-sutna-moviliza-a-la-casa-rosada-este-jueves-22