La movilización al Congreso que iba a realizar ATE Capital el jueves 30 fue dada de baja tan solo 6 días después de que el secretario general Daniel Catalano la anunciara públicamente. En el plenario de delegados realizado en la puerta de la seccional el lunes 27, la mesa de conducción informó que, en nombre de la “unidad” que se está procesando con la Verde nacional, se acordó suspender la marcha. En su reemplazo, Aguiar (ATE Nacional), Catalano y Arévalo protagonizarán una “conferencia de prensa” en la sede de Belgrano al 2500.

En el plenario, lxs delegadxs de las agrupaciones de izquierda denunciamos el levantamiento de la movilización. La tarea del momento es poner en movimiento las fuerzas de la clase trabajadora para hacer frente al golpazo que preparan Milei y Macri. Este será fuerte en el Estado, donde la amenaza de una sangría generalizada es concreta e inminente. Por ello, planteamos que no solo había que sostener la movilización, sino también dar inicio a un plan de lucha creciente que involucre mediante asambleas al conjunto de lxs trabajadorxs afectadxs.

La burocracia sindical, muy por el contrario, está trazando una ruta que continúa la desmovilización de la clase obrera, tras cuatro años de colaboración con el desastroso gobierno de los Fernández. Los capitostes de la CGT, entre ellos Andrés Rodríguez de UPCN, declararon públicamente su voluntad de contribuir a la “gobernabilidad” de Milei. La paritaria de estatales, que también firmó ATE Nacional (con el público aval de Capital), es una ofrenda en bandeja al gobierno del liberfacho y Mauricio Macri. Es que no solo acordaron una cuota a la baja para este mes; ya dejaron establecida una próxima del 9% en diciembre (se paga en enero).

De este modo, Milei ya tiene garantizada la rebaja salarial en el Estado para su primer mes de gobierno, en el que vendrá una devaluación mayor de la moneda. Esta crítica no pudo ser siquiera recogida en el plenario de ATE Capital, donde los dirigentes de la Verde y Blanca se limitaron a reivindicar con pobres argumentos la “unidad”. Pero la unidad de las direcciones no es un paso adelante cuando se impone para desmovilizar y quitar el poder de decisión a las bases trabajadoras. Hasta ayer, en teoría, teníamos una movilización y un nuevo plenario; hoy, tras el pacto Aguiar-Catalano, no tenemos ninguna de las dos cosas.

Para peor, tras el plenario de capital pudimos ver las declaraciones públicas del secretario general de ATE: “habrá despidos”. A esto agregó “preparamos huelgas sectoriales”, siendo la primera en Senasa por 72 horas. Es decir, que incluso con la confirmación por parte de ellos de los despidos generalizados, se elude una respuesta de tipo única y se promueve la fragmentación de peleas y conflictos.

Es imperioso cambiar radicalmente de orientación. Tribuna Estatal plantea que hay que rechazar la delegación en la burocracia de negociaciones en pos de la “transición”. Por asambleas en todas las dependencias que voten mandatos en pos de un plan de lucha unificado. Por la unidad de todxs lxs trabajadorxs afectadxs por los despidos en curso mediante instancias comunes de deliberación y resolución. Por plenarios de delegadxs con mandato en todas las seccionales ya. La reforma laboral de Macri fue archivada tras la rebelión de diciembre de 2017. Hay que salir a las calles desde ahora y agrupar fuerzas, nunca confiando en los diputados pejotistas o la burocracia sindical, que tienen larga trayectoria en ofrecer “gobernabilidad”.

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