En el Polo Petroquímico de Berisso, donde funciona la destilería de YPF, se detectó que dos trabajadores de empresas contratistas, Hasa y Ecopetro, tienen familiares con Covid-19. Esta situación llevó a que se levantara el turno noche, luego de activar el protocolo por casos sospechosos. La noticia se conoce en un cuadro de salto de los contagios registrados en la zona, de 50% en La Plata y hasta 100% en Berisso.

La aparición de estos posibles contagios pone de relieve los peligros del levantamiento de hecho de la cuarentena por parte del intendente platense Julio Garro, y de la apertura indiscriminada de 500 industrias en toda la provincia autorizada por el gobernador Axel Kicillof. El aumento de la circulación social, las concentraciones de obreros que implica el funcionamiento de la industria, la ausencia de protocolos de seguridad e higiene y la falta de testeos masivos hacen de esto un combo peligroso.

Sin embargo, las empresas contratistas Hasa y Ecopetro nunca frenaron la producción. En esta última han retomado guardias mínimas en el sector del caso, por lo que el “protocolo” que se aplicaría,según informaba un audio del secretario general de Sindicatos Unidos Petroleros e Hidrocarburíferos (Supeh), Ramón Garaza, es insuficiente para frenar la propagación del coronavirus -como ya eran insuficientes e inservibles los insumos sanitarios que entregaba la empresa.

Un protocolo eficiente frente a un posible caso debe implicar el aislamiento preventivo de 14 días a todo aquel que estuvo en contacto directa o indirectamente, testeos a todo el personal, el cierre del área y la desinfección total del lugar, como puntos mínimos.

Esta situación de vulnerabilidad frente a la pandemia va de la mano de la profunda precarización laboral que impulsan estas empresas, con cientos de trabajadores bajo la modalidad de contratos eventuales, sometidos a su vez a los recortes salariales pactados por la CGT y la UIA.

Los sindicatos que nuclean a los obreros de las contratistas y de YPF, la Uocra y el Supeh, han dejado pasar estos ataques. Para enfrentar el contagio del Covid-19 y proteger a los trabajadores es necesario poner en pie un Comité de Seguridad e Higiene electo por ellos, con poder de veto sobre las medidas y resoluciones que se tomen.

Como viene ocurriendo en distintos frentes, es necesaria la intervención de los trabajadores en la actual situación para defender la salud obrera y las condiciones de trabajo que permitan sostener la cuarentena.