El viernes 20, una fuerte movilización de vecinos cortó el tránsito en la calle Galván, en protesta contra la arbitraria e inconsulta resolución de la Secretaría de Tránsito y Transporte del Gobierno de la Ciudad, de abrir una calle en medio de la plaza 1º de Marzo.

La plaza 1º de marzo de 1948 es un hermoso y amplio espacio verde, muy utilizado por los vecinos y por los chicos del barrio, no sólo debido a las características propias de la plaza: también porque las calles internas del barrio casi no son utilizadas para el tránsito, debido a su trazado; esto da a ese lugar características de verdadero oasis de tranquilidad y de seguridad, al menos vial.

El proyecto vial macrista, repudiado por los vecinos, modificaría violenta y definitivamente esta característica peculiar del barrio. La calle Galván hace tiempo fue reprogramada como vía rápida de salida del tránsito de la Capital hacia la Panamericana y es muy utilizada por el tránsito pesado -camiones de gran porte-, que sale de la ciudad hacia el norte del país. Como Galván es una calle y no una avenida, en los horarios pico esa salida se transforma en un caos.

A este cuadro se suma que prácticamente sobre la salida misma de esta vía se encuentra el hospital privado Cemic, cuyas ambulancias entran a su guardia… por la calle Galván. Aunque parezca mentira, el "proyecto" vial cuestionado consiste en angostar aun más la Galván: se pretende crear un carril exclusivo para camiones y otras modificaciones que producirían el inmediato efecto de derramar el tránsito que por allí circula hacia la calles internas del barrio.

Por otra parte, la apertura de una calle sobre la misma plaza tiene por objetivo "solidario" permitir el desvío de las ambulancias del Cemic, para que estas tengan su propio carril exclusivo, que como los vecinos denuncian sólo serviría para beneficio de una prepaga -privada-, el Cemic.

Contra todo esto, los vecinos vienen realizando asambleas todos los domingos en la plaza; realizaron el corte, presentaron un recurso de amparo en la Justicia Contencioso Administrativa de la Ciudad y están dispuestos a continuar su lucha hasta conseguir la completa anulación del proyecto.

La Comuna 12 -tiene competencia exclusiva sobre la calle Galván y sobre el espacio verde en disputa- fue olímpicamente ignorada por el Ejecutivo, cuestión incluso denunciada por la Defensoría de la Ciudad.

La solución al cuadro de colapso del tránsito en la ciudad plantea el debate sobre una salida integral al problema, que debe ser el paso siguiente a abordar entre todos.