La Plata

A un año del crimen, reclaman justicia por Lito Costilla y cárcel a los policías asesinos

El joven repartidor de 28 murió a manos de tres efectivos de la Policía Local de La Plata. Avances en la causa.

El 7 de octubre de 2020 fue asesinado Lito Costilla, repartidor de 28 años, a manos de tres efectivos policiales en la localidad platense de Tolosa. A un año, el caso se ha convertido en una causa popular en la región contra la impunidad del accionar criminal de las fuerzas represivas. Movilizan en La Plata para exigir justicia.

Lito, padre de cinco hijes, se dirigía aquella noche en su moto hacia la casa de su madre, cuando la familia recibió la noticia de que se habría accidentado a cinco cuadras de llegar, en 524 entre 120 y 121. Pero las irregularidades en el operativo policial despertaron sus sospechas desde el primer momento.

Al día de hoy, la versión de los efectivos de la Policía Local Damián Antonio Aquino, Mauricio Rodríguez Medina y Sergio Ceferino Martínez es prácticamente descartada en la causa. La misma recientemente pasó a tramitarse en la UFI 16 de La Plata, luego de que el fiscal Carlos Vercellone solicitara el cambio de carátula de “averiguación de causales de muerte” a “homicidio doloso”. Los familiares reclaman que se los impute por homicidio agravado por ser sus ejecutores funcionarios públicos en actividad.

El descargo de los agentes refería inicialmente que habían sido anoticiados por un transeúnte de que un joven había sufrido un accidente en la esquina de 121 y 524, pero luego el acta policial fue modificada estableciendo el supuesto siniestro en 121 y 525, donde no hay cámaras de seguridad. Los familiares identificaron luego en las filmaciones que el joven comenzó a ser perseguido por los tres efectivos desde la rotonda de 122 y 532. Más adelante las pericias revelaron que Lito había sido víctima de una feroz golpiza, y que circulaba a baja velocidad cuando una “fuerza externa contundente” lo expulsó de su moto -descartando que se tratara de baches o irregularidades en la calzada.

Los familiares de Lito Costilla emprendieron entonces el camino de la movilización para enfrentar este operativo de encubrimiento de lo que ya advertían como un nuevo crimen policial. Daiana, hermana de Lito, nos relata la experiencia que debieron atravesar. “Yendo a golpear la puerta fiscalía no lográs nada, para que te escuchen es necesario salir a la calle a manifestarse”, afirmó a Prensa Obrera. Y refiriéndose al accionar de la Justicia agregó: “Uno va con todo el dolor, sin poder hacer su duelo, marcando que tres efectivos cometieron un asesinato, pero no es el fiscal el que investiga sino la familia la que lleva la causa. Si no fuera por los familiares de las víctimas queda en la nada”.

Primera movilización a Fiscalía en La Plata, febrero 2021.

“Siguen pasando estos casos de gatillo fácil descaradamente”, sentencia Daiana, luego de advertir que su hermano había sufrido el hostigamiento policial mientras trabajaba como repartidor durante todo el aislamiento social decretado por la pandemia: “lo volvían loco, abusaban de su poder”. Así, concluye que el “quedate en casa” fue utilizado además para dejar “las calles liberadas para los policías” y su proceder criminal. No hace falta recordar que meses antes se había producido la desaparición forzada seguida de muerte de Facundo Astudillo Castro, caso que sigue siendo encubierto por el propio ministro Sergio Berni y la Justicia Federal.

La joven caracterizó este operativo de impunidad como “una cadena de poder en la que se cuidan unos a otros; en la institución policial domina el encubrimiento”. Agrega que a pesar de haberse manifestado públicamente en reiteradas oportunidades nunca se comunicaron con ellos desde la Municipalidad de La Plata, siendo que se trataba de agentes de la Policía Local “designados por el intendente Julio Garro”. No solo siguieron en funciones los tres efectivos, sino que -destaca Daiana- incluso el jefe comunal “defendió a la cúpula policial platense cuando fue removida”.

Los familiares de Lito Costilla, que notaron que no tenían más opción que luchar para lograr que se haga justicia, se vincularon además a otros casos de gatillo fácil y participaron de movilizaciones y reclamos contra la represión, como por ejemplo en las marchas del 24 de marzo contra la impunidad de los crímenes contra el pueblo de ayer y de hoy. Este camino se verá expresado también en la jornada de lucha de hoy, donde estarán acompañados de familiares de otras víctimas de las fuerzas represivas y de las organizaciones de derechos humanos independientes del Estado, además de partidos y agrupaciones de izquierda.

Todo el respaldo a la familia y amigos de Lito, que convirtieron el dolor en la fuerza para enfrentar al aparato policial y judicial. Las calles de La Plata volverán así a expresar el repudio al gatillo fácil y el encubrimiento estatal.