Aparición con vida ya de Facundo Astudillo Castro

Impulsemos un plenario nacional en contra de la represión. #FueraBerni.

Fotos: Juan Diez

La desaparición forzada de Facundo Castro, visto hace más de 80 días en un patrullero de la Policía Bonaerense, no es un hecho aislado. El 15 de mayo, en Tucumán, se produjo la desaparición del trabajador rural Luis Espinoza, a la semana apareció su cadáver y hay diez policías imputados como responsables de la desaparición forzada seguida de crimen. Esto demuestra una profundización en la política represiva de este gobierno en todo el país. A esto debemos sumarle que durante la cuarentena aumentaron los casos de gatillo fácil, represión y detenciones arbitrarias en todo el país. Solamente en la provincia de Buenos Aires, 18 personas fueron asesinadas a manos de las fuerzas de seguridad del secretario de Seguridad, Sergio Berni, en junio: no hay ningún detenido por ninguno de estos casos.

Las denuncias de abusos policiales recorren el país de punta a punta, con resultados dramáticos como los que señalamos y particularmente con un ensañamiento con los sectores más oprimidos, como sucedió con los jóvenes de la comunidad qom del Chaco, que sufrieron golpes, torturas, abusos sexuales y otras brutalidades de manos de la policía, mientras les gritaban “indios infectados los vamos a acostumbrar a golpes”.

Pero no se trata solo de “abusos”. Hay una represión decidida contra los reclamos y luchas populares.

Los abusos policiales y la represión como política de Estado

El despliegue de las fuerzas represivas, montado con el argumento de “hacer cumplir la cuarentena” y “asistir a los barrios populares”, se ha demostrado como un operativo de control y disciplinamiento social que, a su turno, actúa para reprimir a las luchas populares y a la juventud más vulnerada. Desde el comienzo del aislamiento obligatorio vimos cómo esta política de “empoderamiento de las fuerzas”, según el gobernador Kicillof y Berni, tuvo su campo de acción en la militarización de las villas que fueron foco de contagio de Covid-19, como Villa Azul en Avellaneda.

En el marco de una cuarentena, que produjo un agravamiento en la crisis económica y cercanos a un acuerdo próximo a firmar con los buitres, no es casualidad que los trabajadores y la juventud empobrecida sean los principales objetivos de la violencia estatal. A su turno, en distintas luchas sociales, el brazo armado “empoderado” se encargó de reprimir a los trabajadores e intentar sofocar sus reclamos por trabajo, vivienda y salario. Es la que vivieron los trabajadores del frigorífico Penta cuando reclamaban por 200 puestos de trabajo o los choferes del transporte urbano de Córdoba que exigían les paguen los dos meses de salarios adeudados, solo para nombrar algunos ejemplos. Incluso se hace espionaje e “inteligencia”, como lo denunciaron los mineros de Andacollo en Neuquén.

Esta escalada represiva nos remite a una continuidad con el accionar de Bullrich y la doctrina Chocobar. La misma Gendarmería que desapareció y asesinó a Santiago Maldonado, asesinó a Facundo Scalzo en la Villa 1-11-14 hace pocos días, tratando de encubrir su accionar, declarando “que su muerte fue producto de un enfrentamiento tras un robo”. No solo se generaliza la represión a la juventud y los trabajadores, sino que también se extiende la impunidad.

Fuera Berni

En el caso de Facundo, que continúa desaparecido hace más de 80 días, bajo un régimen que se define a sí mismo como democrático, la Policía Bonaerense estuvo más de dos meses a cargo de la investigación, cuando ella misma aparece como la principal sospechosa, ocultando pruebas y poniendo trabas.

Berni es responsable directo del comando de la política de “empoderamiento” de la Policía Bonaerense y, por tanto, del conjunto de los atropellos y asesinatos que ésta descarga contra los trabajadores y la juventud empobrecidos.

”Hay que ser muy estrictos, muy severos con las fuerzas de seguridad, que tienen un arma en la cintura para cuidarnos, no para usarlas en contra nuestro” (Página/12, 19/7), declaró el presidente Alberto Fernández en una entrevista. Rechazamos los argumentos gubernamentales de “los excesos de algunos elementos de las fuerzas”, como si se trataran de casos aislados. Además, el Presidente juega un papel fundamental en la política de “empoderamiento” de las fuerzas represivas, ¿no fue acaso él quien llamó a dar “vuelta la página” en la lucha contra el genocidio de la dictadura? El mandó al ejército a los barrios, supuestamente en una tarea humanitaria. El “blanqueo” y el empoderamiento son parte de una misma política. Lo que intenta Fernández es evadir la responsabilidad del conjunto del aparato represivo y de sus responsables políticos inmediatos. Berni es el responsable directo de cada atropello de la Policía Bonaerense.

Una campaña en marcha, organicemos más acciones de lucha 

Frente a esta situación represiva crece la indignación popular y se desarrollan movilizaciones y reclamos de familiares y amigos, junto con las organizaciones de derechos humanos, políticas y sociales, que rechazan la represión y la persecución. Nora Cortiñas realizó contundentes declaraciones: “Berni ya tendría que haber renunciado”. Convocada por el Encuentro Memoria, Verdad y Justicia (EMVyJ) se realizó, al mediodía del jueves 16, una concentración frente a la Casa de la Provincia de Buenos Aires, en Capital Federal, para reclamar por la aparición con vida de Facundo Castro y exigir una audiencia con el gobernador Axel Kicillof. El EMVyJ, a su vez, se pronunció a favor del ¡Fuera Berni!

La semana pasada, desde el FIT impulsamos una movilización en Nechochea por la aparición con vida de Facundo. En Córdoba se realizó un plenario en contra de la represión policial. La actividad contó con la participación de Soledad Díaz, legisladora provincial del Partido Obrero-Frente de Izquierda y de jóvenes de las barridas y la universidad.

Dentro de la juventud, las organizaciones de la juventud del FIT-U impulsamos una declaración en común, marcando que “la Bonaerense, la Justicia y el gobierno provincial de Kicillof dilataron la búsqueda y la familia de Facundo y sus abogados denuncian maniobras de todo tipo”. A su vez, la UJS y las juventudes del PTS e IS impulsamos un “tuitazo” que logró la adhesión de centros de estudiantes universitarios, secundarios y terciarios, y de la Federación Universitaria Argentina y la Coordinadora de Estudiantes Terciarios. Desde la UJS impulsamos, además del #DondeEstaFacundo, el #FueraBerni como parte integral de esta lucha contra la impunidad y la represión y sus responsables políticos. En la Universidad de General Sarmiento, los estudiantes se pronunciaron por la aparición con vida de Facundo a través de declaración y campaña de fotos.

Por un gran plenario nacional contra la represión

Es necesaria una respuesta unificada contra los atropellos, abusos y la represión. El cuadro represivo está armado para impedir la irrupción popular frente al agravamiento de la situación económica y sanitaria que golpea sobre la inmensa mayoría del pueblo argentino.

Llamamos a organizar colectivamente un plenario nacional contra la represión, que unifique el conjunto de los reclamos y exigencias de los familiares y amigos de las víctimas de gatillo fácil, por la aparición con vida de Facundo Castro, por el juicio y castigo a cada uno de los responsables y por el cese de toda represión y persecución a los trabajadores. De esta manera, estaremos cobrando nueva fuerza para avanzar en esta lucha y todas las luchas que los trabajadores tenemos por delante para que la crisis la paguen los capitalistas.