BAHIA BLANCA

Caso Facundo Astudillo Castro: secuestraron tres celulares de policías de la Bonaerense

Pertenecen a Xiomara Flores y Jana Curihinca, dos de los ocho policías acusados de la desaparición y muerte del joven.

Ojo Obrero Fotografía

La Gendarmería secuestró este sábado tres celulares pertenecientes a Jana Curuhinca y Xiomara Flors, dos efectivos de la Policía Bonaerense que están involucradas en la causa por la desaparición forzada seguida de muerte de Facundo Astudillo Castro, hallado sin vida el 5 de agosto de 2020 en un cangrejal en la localidad bonaerense de Cerri.

“En la vivienda de Pradere, lugar donde residen los policías, se secuestraron tres teléfonos celulares, los que posteriormente deberán ser analizados en el marco de la causa Astudillo Castro”, precisó una fuente judicial a la agencia Télam.

El allanamiento a ese domicilio fue ordenado unas horas antes por la Cámara Federal de Apelaciones de Bahía Blanca, dado que ambas tuvieron contacto con Facundo en distintos momentos del 30 de abril del año pasado, el último día visto con vida.

Al allanamiento también llegaron Cristina Castro, la mamá de Facundo, junto a sus abogados. “El año pasado los policías, y por orden de la Cámara, habían entregado teléfonos rotos y viejos, por lo que los fiscales pidieron una nueva intervención de la jueza (Gabriela Marrón) para que entreguen los teléfonos que realmente estaban usando”, dijo Cristina.

En febrero, la Cámara Federal de Apelaciones de Bahía Blanca hizo lugar a un pedido que realizaron los fiscales Silvestre, Heim y o Azzolín, que sistemáticamente era rechazado por la jueza Marrón: el secuestro de los teléfonos celulares de los cuatro policías mencionados en la causa como sospechosos, Alberto González, Gabriel Sosa, Xiomara Flores y Jana Curuhinca. Esto se llevó a cabo recién el fin de semana. La querella insiste hace más de un año en avanzar en la investigación por desaparición forzada de persona de Facundo en manos de la policía de la provincia, que estuvo los dos primeros meses a cargo de la investigación, pero la Justicia pone trabas constantemente.

Al ser consultada sobre si había novedades por las pericias de las prendas de vestir de su hijo secuestradas y una zapatilla hallada en General Cerri, Castro explicó: “Todavía no tenemos los resultados, que fue la gran controversia la semana pasada en una reunión con los fiscales donde les dije que no podía ser que a un año no había resultados y que es lo que podíamos esperar”. El encubrimiento por parte del poder político de conjunto tiene un hilo conductor.

La lucha por justicia continúa

Cristina Castro participó en el II Congreso del Plenario de Trabajadoras que realizamos la semana pasada, y nos acercó su testimonio sobre la impunidad que recubre a la Bonaerense que desapareció y asesinó a su hijo: «Visitamos la casa de gobierno, nos reunimos con el presidente y el gobernador. El rol del Estado fue siempre bancar a Berni, que nos amenazo públicamente. El ministro, a los pocos días de la desaparición de Facundo se presentó en Villarino abrazado con distintos personajes de la política local. Es un atropello a los derechos humanos en toda su expresión».

El accionar de las fuerzas de seguridad no se puede escindir del Estado al que representa. El gobierno de Alberto Fernández ha profundizado una orientación represiva, de amedrentamiento y persecución a la juventud, de violencia y revictimización hacia las mujeres.

En una entrevista en Prensa Obrera, al año de la desaparición y muerte de Facundo, Cristina destacó la defensa del gobierno de Axel Kicillof a la Bonaerense: “Bancar a Berni es bancar la muerte. Berni es la represión y el gatillo fácil. Es las muertes en comisarías. Es la desaparición seguida de muerte, como fue con Facu”.

Queda más que claro, que queda en manos del campo independiente de las organizaciones políticas, sociales y de derechos humanos salir a luchar exigiendo justicia por Facundo y que se vaya Berni. Contra el manto de impunidad que protege a Berni, la Bonaerense y la represión y persecución de lxs trabajadores y la juventud como política de Estado.